Octubre de TodoMomo

Creati

Se había despertado tarde muy tarde, se duchó rápido y se vistió deprisa, observó por el rabillo del ojo como su novio también se dedicaba a vestirse con un rostro algo adormilado.

—Momo— le llamó pero ella estaba apurada ya que se le había encomendado el patrullaje de la zona donde se había visto un hombre que estaba atacando estudiantes.

—Tengo que irme— anunció aproximándose a la puerta principal.

Todoroki la siguió con la ropa a medio poner, la observó unos segundos mientras tomaba las llaves y se disponía a salir.

—Momo— le llamó de nuevo parpadeando un par de veces.

—Lo siento, pero se me hace tarde— se disculpo y salió corriendo deprisa.

—Que tengas buen día— suspiro y cerro la puerta para terminar de vestirse.
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Tomó su motocicleta estacionada en el garaje para conducirse con velocidad por la ciudad. Arribó rápidamente al callejón de los rumores sin observar nada relevante.

Estacionó su vehículo y patrulló durante unos minutos, observó como los chicos corrían de prisa a la preparatoria cercana y ella recordó sus momentos de estudiante, parecía tan lejano cuando solo soñaba con ser una heroína.

—¡Auxilio!— escuchó el grito de una chica y de inmediato corrió hacia donde provenía.

Se detuvo por una fracción de segundo observando el panorama, era un hombre con apariencia de reptil de largas uñas y afilados dientes. Estaba apunto de meterse a una alcantarilla por lo que atribuyó rápidamente que ese era el modo en que operaba para no ser descubierto, por suerte había unos rumores de alguien que logró ver como este atacaba cerca de esa área.

—¡Akira-san!— grito un chico a su lado quien arrojó rápidamente su mochila hacia el hombre y congeló la ranura de la alcantarilla.

Creati saltó con agilidad haciendo retroceder al muchacho, el hombre la vio por unos momentos y luego regreso a su presa a quien envolvía con su cola para un escape rápido.

—¡Creati!— grito la chica con desespero —Itsu-kun— las lágrimas caían una a una y a Creati por un segundo se le vino a la mente el rostro de su amado por la mañana.

—No tengas miedo— hablo sacando una katana de su pierna y una especie de pistola. Disparó un líquido que inmovilizó al reptil de los pies y con la katana cortó uno de sus brazos —Yo te salvare— sonrió con poderío dando un corte más a la cola del hombre haciendo que soltase a la chica.

El joven corrió hacia ella y Creati lo mantuvo ocupado permitiendo a los dos jóvenes escapar de la escena.

Utilizó una vez más su singularidad para crear una red de una aleación metálica la cual lo dejó fuera de combate. Se sentó encima de una caja que se encontraba en el callejón mientras observaba al hombre que se había mantenido en silencio.

—¿Qué les hacías a esas chicas?— pregunto curiosa tratando de obtener información.

—¿Cómo me descubrieron? Fui silencioso— la sonrisa del reptil le causó un pequeño escalofrío a Creati.

—Responde primero mi pregunta.

—Las ahogaba en la alcantarilla y me las comía. Responde la mía, heroína.

—Te vieron llevarte a la última en esta misma zona— habló secamente pensando lo que habría sentido la chica y pensando que sería de las familias si lo que decía era verdad... todos tenían la esperanza de encontrarlas...

—Lastima, me hubiera divertido más— volvió a sonreír antes de que la morena escuchara las sirenas de la policia.

Se puso de pie para dejarle la captura a los detectives.

—Hagan análisis para saber que ha comido en los ultimas horas— Creati sonó fría y los detectives entendieron de inmediato.

La chica siguió su camino con el patrullaje, no podía dejar de pensar en la estudiante gritando y el muchacho intentando rescatarla. Lanzó un largo suspiro, tomó su móvil y apretó el botón de llamada.

—...— escuchó la respiración agitada de su novio.

—¿Es mal momento?— cuestionó un poco preocupada, pues del otro lado se escuchaban golpes y explosiones.

—Algo así— se quejó el muchacho para luego dejar escuchar un último estruendo. —Bien, ya puedo hablar. Te escuchó— la voz del joven sonó alegre de escuchar a su amada.

—Terminaste rápido con eso ¿no?

—Quiero atenderte lo mejor que pueda y si tengo que esforzarme un poco más— suspiro —Me esforzare mas.

—Lo siento.

—¿Por qué?

—Por no besarte cundo salí de casa— Su voz sonó en un berrinche sintiéndose culpable.

—¿Momo?

—¿Si?

—Te amo.

—También te amo Shoto, ¡tuve un día horrible!— empezó a llorar.

—Lo sé, lo sé... te prepararé algo para la cena y me contarás todo.

—Si... — no pudo evitar que una sonrisa se le formara en el rostro.

Cortó la llamada y volvió a su ronda habitual.

—¡Creati ayúdanos!— escuchó un grito. Esta ves se limpió las lágrimas y lanzó un suspiro era una heroína y era su deber dar tranquilidad a los ciudadanos.

—¡No tengan miedo porque Creati los salvará!