¿Y qué le voy a hacer?,
no sé vivir si no es a mi manera,
esta forma loca y autodestructiva
que impongo a mi cuerpo cada noche;
también es una forma de castigarme
por no saber ofrecerte lo mejor de mi en cada momento.
He llegado a la conclusión de que echarte de menos,
no es más que la rutina de unos sentimientos clandestinos,
depravados en esperanza.
Nos hemos creído muy pronto que nunca llegaremos a ser nada,
pero nos hemos dejado llevar por la ilusión que oculta un 'nosotros'
que matamos constantemente haciendo uso de razón y no de corazón.
Estamos en un continuo enfrentamiento con nosotros mismos
y nos da miedo creer que un simple mensaje,
puede destruir el vacío de cientos de kilómetros
Descuido mis ojos y en mis párpados pesan
las toneladas de sueños que tenia contigo.
Estoy enamorado de las noches en las que te echo de menos,
es como sentir que estoy vivo, y es por tu culpa.
No quiero dormir,
no quiero cerrar los ojos,
podría despertarme.
Sé que hemos elegido el camino más difícil,
porque en el fondo, esos caminos son los únicos que no sabemos a dónde nos llevan.
Tú no hagas nada más,
salvo quedarte
te enseñaré cómo hacer para que me toques el pecho
y sientas que allí donde acaba esta jodida oscuridad, empiezas tú.