The Walking Dead || Daryl Dixon || P2

9.03 "A New Beginning"

<<Un Nuevo Comienzo>>

Me removí sobre la cama con cuidado de no aplastar el pequeño cuerpo cerca de mis costillas. Bostece refregando uno de mis ojos, ser mamá, con seguridad, era una de las cosas mas lindas en todo este maldito mundo. Pero, ah yo extrañaba tanto dormir toda la noche, ya había perdido la costumbre de lo que era mantenerse toda la noche con un ojo abierto por cualquier inconveniente. Ahora con este pequeño, dormir se me hacia algo imposible, sobre todo cuando Daryl iba a pasar las noche en el santuario, trabajo que Rick le había dejado a cargo y que no me agradaba mucho pero que de todas maneras prefería no opinar.

El cuerpo de mi hijo se movió y un pequeño quejido salio de su boca, sus ojos se abrieron apenas acostumbrándose a la luz de la habitación, con una sonrisa lo tome en mi brazos y lo puse sobre mi pecho. De inmediato su cuerpo se acurruco contra el mio, refregando su cara contra mi pecho. Aferrándome a el, me puse de pie para volver a acomodarlo sobre el colchón, hora de cambiar esa ropa.

—¿Por qué eres tan guapo? —pregunte terminando de abrochar mi camisa. Una sonrisa se formo en su rostro —Estas creciendo muy rápido —me queje volviendo a tomarlo en mis brazos —Quédate así pequeñito para siempre, por favor.

Salí del trailer que aun teníamos en Hilltop poniendo el sombrero en su cabeza y camine hacia donde estaban preparando todo para la salida que harían hoy. Daryl se mantenía ahí, con ese gesto serio suyo hablando con Jesús y de vez en cuando acercaba el walkie a su boca, hablando seguramente con Rick.

Los ojos de Jesús se encontraron con los míos, me saludo con una sonrisa y golpeo el brazo de Daryl apuntando en mi dirección. Su cuerpo se giro un poco hacia nosotros, dijo algo inaudible para mi pero que hizo reír a Jesús. 

Me quede de pie ahí en medio de todo y espere a que llegara a mi lado, sus ojos me miraban con un brillo diferente ahora, seguramente porque absolutamente todo había cambiado entre nosotros. La llegada de nuestro hijo, el hecho de que ya no le importara lo que el resto pudiera pensar a la hora de demostrar su amor por nosotros. Lo fácil que se había vuelto para el decirnos te amo frente a otras personas. Mierda, si el Daryl de antes me encanta, ¿pueden hacerse una jodida idea de como me tenia este Daryl? Era increíble que no dejara de arruinar las cosas con él.

—Buenos días —murmuro dejando un beso en mis labios

—Hola —susurre abrazando su cintura con mi mano libre

— ¿Cómo amaneció este campeón? —pregunto tomándolo en sus brazos

—En mis costillas —dije limpiando la baba que corría por su barbilla

—Mmm, se de quien saco esa manía —rodee los ojos con diversión. Desde siempre me había molestado con eso, pero hey, no es mi culpa que su cuerpo sea tan calentito y cómodo para dormir —Ojala no saque tu genio.

—Claro —bufe —Como saque el tuyo, lo llevamos claro.

Soltó una risa antes de tomarme por la nuca y juntar nuestros labios unos segundos.

—Te amo.

Golpeo mi trasero con suavidad antes de alejarse de mi, con una sonrisa vi como se acercaba al resto de personas que le sonreían con cariño a mi pequeño. Me acerque a ellos también, sentándome en el césped junto a Enid que limpiaba con concentración su arma, ella también saldría esta mañana.

Jadis o Anne, aun no sabia como llamarla realmente. Rabia dicho que en Washington había un museo que tendría cosas necesarias para todas las comunidades. Mas para el santuario que para cualquier otra, Rick se había puesto esa idea de ayudarlos después de lo ocurrido con Negan. Nadie estaba muy de acuerdo realmente, pero tampoco nadie le debatía. Las cosas se ponían tensas cuando ese tema salia a flote, así que todos preferían evitarlo. O dejarlo en Alexandria donde papá había decidió mantenerlo en una especie de cárcel. Esa era la razón por la que Daryl me tenia completamente prohibido ir a visitar a mi hermana pequeña.