The Walking Dead || Daryl Dixon || P2

9.06 "The Obliged"

Capítulo corto, pero se viene lo bueno.

<<El Obligados>>

Jazmín, Jazmín, Jazmín, era tan obvio que Daryl iba a descubrirte de inmediato. Pensé, mientras caminaba con paso rápido hacia el gran portón de Alexandria, donde Daryl me esperaba.

Cuando vi llegar a Mandy hace un rato, me sentí jodidamente feliz. Por fin estábamos todos aqui, ella había llegado sana y salva, nada de las heridas que yo me había comenzado a imaginar en mi cabeza. Mi sonrisa no duro mucho cuando noté su gesto serio, ni siquiera fue necesario preguntar que pasaba, ya lo había adivinado de inmediato; Daryl se había enterado de todo. Vale, que pensé que laS mentirillas me duraría un par de días, no un par de horas. "Quiere hablar contigo" esas simples palabras de Mandy casi hicieron que me hiciera encima. Así que me tomé mi tiempo antes de ir hacia el, quería que se calmara un poco, aunque conociéndolo bien seguro la espera lo cabreo más.

Sus ojos me miraron furiosos apenas estuve frente al auto, se bajó de este dando un fuerte portazo y retrocedí asustada cuando se acercó a mi con grandes zancadas. ¿Él no iba a golpearme verdad? No, el no sería capaz de aquello.

— ¡Lo siento! —grite levantando mis manos en gesto de rendición

—Solo te pedí una jodida cosa Jazmín —dijo con su respiración agitada

—Daryl-

—No —me callo levantando su mano —Ni siquiera se que mierda hago aquí aún..

—Amor-

—Vete a la mierda Jazmín —jadee sorprendida —Quédate el tiempo que quieras, vete con el, me importa una mierda.

—Daryl detente —lo sostuve del brazo, no resistió a mi agarré —Vine por Judith, ¿vale? Esto no es por el. Mierda, juro que no se trata de el. Daryl por favor, lo siento de verdad, te amo, sabes que si. Tengo un anillo en mi dedo, tenemos un hijo, estamos unidos para siempre, eso es lo que quiero, estar contigo siempre. No me dejes —suplique con la voz rota —Dime que hacer, siempre arruinó todo contigo, dime como lo arreglo.

—Puedes hacer lo que quieras —dijo soltándose de mi agarré con búsquedas —Después de todo siempre lo haces.

(...)

Habían pasado un par de días desde que estábamos en Alexandria. Aquella discusión con Daryl se repetía en mi cabeza una y otra vez, de pronto toda la felicidad que tenía por estar aquí se había esfumado y no dejaba de pensar en que demonios podía hacer para que Daryl pudiera perdonarme aquello. Lo único que se me ocurría era volver a Hilltop, pero eso no era una opción cuando veía a Judith con esa sonrisa gigante haciendo planes para nosotros día tras día. No quería tener problemas con Daryl, pero tampoco quería dejar a mi hermana por tanto tiempo. Ya lo había hecho por mucho después de que perdiéramos a Carl, no podía seguir ausentandome en su vida. No más.

Deje mi taza de café sobre la alfombra y me gatee un poco, asomándome por un lado del sofá al sentir la puerta de entrada cerrarse y posteriormente, sus pasos subir las escaleras. Michonne llegaba de nuevo. No sabia realmente que salía a hacer todas las noches ahí afuera, pero lo que fuera, le hacia bien. Siempre que despertaba a estas horas de la madrugada, podía verla llegar, casi siempre con una sonrisa, sus hombros parecían menos tensos y su semblante era mucho más relajado. Al principio pensaba que ella y papá tenían un punto de encuentro por ahí y tenían un poco de sexo, lo descarte cuando descubrí que incluso con papá durmiendo a su lado ella se escabullía. Algún día le preguntaría, o la seguiría, si, eso era mas emocionante, no iba a quedarme con esas dudas para siempre.