The Walking Dead || Daryl Dixon || P2

9.10 "Evolution"

《Evolución》

—Son unos 130, 140 —escuche decir a Daryl, si era mucha mierda muerta ahí abajo. Aún con mi ceño fruncido me gire sobre mis rodillas mirando los tres hombres tras mi espalda.

—¿Alguna vez los vieron hacer eso? —pregunte con confusión.

—No, nunca —respondió Aaron

Volví mi vista a la horda de caminantes frente a nosotros. Ellos simplemente iban hacia un lugar con normalidad y de pronto, sin razón alguna cambiaban el rumbo de una forma tan malditamente extraña. Sólo estaban ahí, dando vueltas en círculos, es como si estuvieran esperando algo o alguien. Algunos querían seguir su camino, pero era como si algo estuviera ahí junto a ellos reteniendolos.

—La huella que dejó Rosita pasa justo por el medio de la horda. Deberíamos ir por los caballos, dar la vuelta y seguir a pie —volvió a hablar Daryl

—Están solo dando vueltas —volví a decir ignorando la conversación que tenían —Eso no es normal, ¿Verdad?

—No. No lo es —respondió Daryl después unos segundos —Deberíamos irnos. Se avecina una tormenta. ¡Tate!

Soltando un suspiro, me puse de pie y me dispuse a seguir a los tres hombres. Jesús tenía el mismo rostro que seguramente tenía yo, porque si bien yo había tenido en muchas oportunidades ver una horda numerosa de caminantes, estoy completamente segura que el había visto muchas más que yo. Así que de seguro que esa cara preocupada era porque yo malditamente tenía razón y eso que hacían los caminantes en aquel campo no era para nada una maldita cosa buena.

Tomé la mano que Jesús me ofreció y salte el pequeño canal que nos impedía el paso. Sin dejar de mirar a nuestro alrededor, buscando alguna forma de llegar al lugar que Rosita nos indicó, sin tener que pasar por entre todos esos caminantes. Seguir a Daryl era una cosa buena por hacer en estos casos, nadie sabía mejor sobre rastreos que el.

Mire su espalda mientras caminábamos y una pequeña mueca se posó en mi rostro. Ese hombre aún estaba a mi lado después de todos estos años, después de todos los errores que cometí. Después de la muerte de Rick todo fue diferente, se que había algo dentro de esa cabeza dura suya que lo atormentaba y que eso era lo que le había llevado a alejarse de mi y de nuestros pequeños. Si bien, Ian y Gracie no habían sufrido mucho de su ausencia, no podía decir lo mismo de Kilian, quizá por eso mi hijo no le prestaba mucha atención cuando Daryl iba de visita. Y muy en el fondo de mi corazón tenía esa pequeña espina, ese pequeño rencor de que el no compartiera su corazón de la misma forma con mi bebé menor. Lo peor, se que Kilian esta creciendo con ese mismo rencor en su corazón.

Fue Negan el que me hizo saber de aquello, lo culpe en un principio, porque sólo el podía hacer que mi hijo tuviera ese rechazo para con su padre. Días después me sorprendí cuando los escuche hablar, Ne, como Kilian lo llamaba le decía lo importante que era tener una buena relación con su padre, aunque estoy segura de que el pequeño aún no entendía mucho las cosas que el decía, de todas formas le agradecí. Después de sentarme hablar con mis tres hijos más grandes, si, Mandy también estaba dentro. Les pedí como favor que cada vez que Daryl fuera de visita, me ayudaran a motivar a su pequeño hermano. No dio resultados claro, Kilian lo único que veía siempre era a Ne. Si Daryl se enterara de aquello, mierda, ni siquiera quería imaginarme su reacción.

—Estoy confundido —susurro Aaron cerca de mi oído, lo mire con confusión —No tengo muy claro si esa baba que corre por tu barbilla es de amor o rabia.

Solté una risa empujando mi hombro contra el suyo. Vale, quizá un poco de ambas pero eso no iba a decirlo en voz alta. Supongo que en algún momento Daryl me daría el tiempo para hablar con el sobre aquel tema, podíamos solucionar esto hablando. Si algo había aprendido durante todos estos años es que entre nosotros, todo podía solucionarse hablando de las cosas aunque sea difícil y la mayor parte del tiempo termine en muchas peleas.