Addison Jaleel Miller

Capítulo 95 🍁Especial🍁

Maratón 7/10❤️

💖🌸Dedicado a Anoninatum 🌸💖

Addison Miller.

Últimamente mi vida se está arruinando. Las cosas que hago, las cosas que digo, lo que no hago y lo que no digo, me están matando. No quiero ser exagerada o sonar como tal, pero si conocieran un poco mi día a día, me darían la razón. Me gustaría empezar con mi niñez antes que nada, creo que es la parte para importante para un niño, ahí es donde se forma su personalidad, su autoestima y todo lo referente a su personalidad. No puedo decir que mi infancia fue la más cruel del mundo, porque no lo fue del todo para otros ojos. Siempre lo he dicho, cada persona tiene una perspectiva diferente de ver la vida y lo que para ti no equivale a nada, para mi, quizás lo es todo.

Mi hermano, mi hermano y yo nunca hemos tenidos esos fuertes lazos que siempre se ven entre familias. Erik siempre me ha parecido un maldito estúpido y, es el peor hermano mayor que pudiese desear. Cuando tenía apenas 9 años, que el grupo de Steyssy empezó a molestarme, él ni siquiera hacía nada para impedirlo, simplemente se dedicaba a reírse con todos y, en algunas ocasiones, también se burlaba de mi.

Lo que más me enojaba de todo es que, me ocurre lo mismo que en la mayoría de los hogares, mis padres están al borde del divorcio y tratan inútilmente de ocultarlo. Pero no soy tonta, me doy cuenta de sus discusiones a mitad de la noche, de las llegadas de mi padre con alcohol en su sangre, las hostilidad en las horas de comida es palpable, sin embargo, lo disfrazan todo con una sonrisa falsa. Esto me ha afectado un poco, porque no he tenido el apoyo de ellos, ni mucho menos el del mi hermano. Tener que ir al colegio para ser humillada, llegar a casa con un dolor inaguantable y lo único qué quieres es hablarlo con tu madre sobre cómo te sientes, sacarlo todo, no quedarte con ello por dentro, porque cada día qué pasa te hace daño. Pero no tuve otra opción que quedarme callada, aguantarlo todo yo sola, todas las noches, sin importa los gritos de mis padres. Porque no tenía a nadie

Desde ahí, empezó mi tortura. Mi necesidad de sentirme querida, de que alguien me haga querer tener razones para seguir soportando los problemas en casa, me llevó a caer en los brazos de Thomas Thomson, el chico más atractivo de toda la puta escuela. Con su sonrisa, con su carisma, con su amabilidad, su manera de mirar, y su maravillosa personalidad, me cautivó desde el primer día, me enamoré de él, fue mi primer amor y el mas doloroso. Al principio, fuimos buenos amigos, no puedo negar que me ayudó bastante con todo aquello que me atormentaba, pero, para mi mala suerte, la vida nunca era justa y, por desgracia, mi felicidad duró muy poco.

Hace tres años, para ser exactos, me di cuenta que todo lo que le decía a él, se lo contaba a Steyssy. Ella, junto con su grupo, se burlaban de mi abiertamente y, luego me golpeaban constantemente, mientras me insultaban.—Señorita, Miller—Me sobresalté al escuchar mi nombre—¿Podría explicarle a sus compañeros que es la anorexia nerviosa?—En estos momentos todos tenían su vista en mi. Miré a mi alrededor tratando de buscar una respuesta. Tenía un conocimiento previo, pero al estar tan sumida en mis pensamientos, se han esfumado por completo.

Nadie habló, ni siquiera la psicóloga que esperaba ansiosamente mi "no" respuesta, aquella que iba a confirmar lo que todos sabían, no le estaba prestando atención.—¿Entonces?—Me miró fijamente. Hice un esfuerzo enorme para rebuscar en mi memoria algún archivo para responderle. Pensé que no lo lograría, pero no fue así, gracias a todos los cielos, pude encontrar una respuesta lo suficientemente técnica para que no encuentre algún pretexto.