Capítulo IX
°Aprendiendo de ti°
Mi no vida, se escucha gracioso puesto que estoy muerto, en la cual he podido hacer todo lo que una vez soñé, aunque al principio no era lo que esperaba mucho menos lo que quería, tuve que aprender a vivir con lo que era más nunca supe el ¿Por qué?, mucho menos el ¿para qué?, nunca antes me lo había preguntado puesto que la vida me había dado lo que necesitaba, sino que hasta más.
En el punto exacto en el cual me encuentro, pudiese responder una de las grandes preguntas que me habría hecha cuando joven, me iniciaron en la casa de vampiros, licántropos y brujas, aun cuando mi vida era una completa monotonía, me era imposible ver más allá de lo que mis ojos humanos podían ver, pero ahora que me encuentro junto a mi pequeña flor, todo cambia, ella lo cambia todo.
Ahora tengo una nueva encrucijada en mi vida, es como decirle a su padre que la tomare como esposa, en lo que menos espera, me puedo imaginar el dolor que sentirá su padre mi buen amigo Níquel, pero tendrá un poco de consuelo el saber que respetaré a su hija como una total dama, no la deshonrare bajo ningún motivo.
Ella será tratada como una total princesa, como una reina si así lo pide ya que siempre le daré lo que pida, todo lo que salga de su boca será tomada como una orden por mí la cumpliré al pie de la letra, solo viviré para cumplir cada uno de sus caprichos, si desea un carro del año eso es lo que va a conseguir, quiere un castillo, yo le construiré un castillo, lo que ella pida eso le daré.
Dejando mi ensoñación de lado, tomo a mi princesa en brazos y me la llevo de vuelta a Forks, como me lo esperaba todo en casa está muy calmado al parecer los chicos están en el colegio, pues no hay nadie en casa eso me facilita las cosas pues estaré tranquilo antes de enfrentarme a Níquel o dejar de existir, lo que suceda primero.
Deposito a mi princesa en el sillón que mantengo en mi habitación, sé que no es el lugar adecuado, pero tendré que traer una cama, para mi princesa; Al parecer Edward se había encargado de todo, respire profundo aun cuando biológicamente no tengo la necesidad de hacerlo, y esto lo hice por la persona que ha entrado en casa y ha azotado la puerta con tanta fuerza que ha roto, no cabe duda de que mi viejo amigo aún no ha perdido su fuerza.
- ¿Dónde mierda te encuentra, maldito vampiro de mierda?, ¡sal cobarde! - creo que mi futuro suegro me quiere, pero 100 metros bajo tierra.
- ¡Viejo amigo! – le saludo, tratando de calmar su ira- cálmate por favor – le pido, pues con sus gritos despertara a mi hermosa flor.
- ¡¿Qué me calme?!, púdrete ¡te robaste a mi hija!, y quien sabe que tanto le abras echo, cabrón y me dices que me calme – vuelve a gritar completamente alterado y es muy comprensible su reacción, pero ahora no me imagino lo que pasara cuando le diga que su hija es mi mujer.
- Me conoces muy bien, sabes que jamás te deshonre, a ti ni a tu hija – le intento explicar.
- ¡Lo sé carajo! – me grito para después respirar hondo eh intentar calmarse - pero eso no quita que te hayas llevado a mi hija a no sé dónde, ¿Dónde está? – me pregunta.
- Descansando un momento en mi habitación, sabes que jamás la lastimaría ni haría nada para hacerle algún daño, simplemente no lo he podido detener, ella... ella es mi mujer – le suelto la bomba pues al parecer está en posición de poder entablar una conversación más civilizada.
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Mi verdadero Amor - Carlisle Cullen
FanfictionCarlise Cullen, cegado por un cariño que disfrazó de amor su subconsciente, poco a poco se va dando cuenta que lo que realmente siente por su actual pareja Esme Cullen no es más que aprecio, un cariño que desarrolló a base de no dejarla morir. Esme...