-Querido, dejala en paz no vale la pena. —Una de las prostitutas que acompañaban al rey besaba su hombro despacio. —No pierdas tiempo con una peste como esta. —El rey nalgueó a su acompañante divertido.
-Ese chiste fue muy bueno preciosa. —Pierre se la vivía engañando a Kim, en el "fondo" él amaba con mucha pasión a la muchacha pero al constante negarse de fornicar con él lo enfurecía; así que buscaba con quien descargar sus frustaciones.
-¿Tu eres la mierda que gobierna este país? —Hyewon finalmente habló entre sollozos, Pierre la miró extrañado ya que Hye habló en surcoreano, su lengua natal. Uno de los guardias le tradujó y este en una reacción pateó su cara rompiendole la nariz.
-Puedes engañarme con una zorra, puedes discriminar a cualquier moderado, pero no por el hecho de ser superior en un rango te hace diferente de alguien que te puede matar mientras duermes. —La postura de Kim le daba un aire dominante. Levantó a Hyewon del suelo acariciando su cabello. —Si vas a tener sexo con ella que sea rápido. —Pierre tensó sus músculos. La aparición inesperada de su esposa lo dejo sin aire. Alzó su mano, sus acompañantes se retiraron esperandolo en la entrada del gran tribunal.
-¿Qué quieres? —sus ojos azules aterrados observaban a la mujer que desposo. —No tengo tiempo.
-Cierto te tardas treinta minutos en la cama. —Kim siempre terminaba acostandose con las "amantes" de su esposo puesto que ninguna quedaba satisfecha con él. El matrimonio era un desastre y a menos que no fueras trabajadora sexual sabrías que ambos no tienen química. Muchas personas concordaban que Kim enserio aparentaba ser la verdadera monarca de Francia. Pierre apretó sus puños, no podía defenderse ante su esposa, después de todo ella fue quien lo acabó descubriendo con otra. —La corte en América quiere que supervisé la prisión de cristal, partiré en unas cuatro horas. Aceptalo o estas dispuesto a acompañarme. —Pierre no lo pensó dos veces. La imponente figura de su mujer le decía que era mejor no entrometerse en sus asuntos.
-No olvides tu anillo. —Besó suavemente los labios de la francesa. Enserio estaba enamorado de ella pero no sabía como llegarle a la joven. Se retiró cabizbajo.
-Me mirarás a los ojos? —Kim besó la cabeza de Hyewon quien levantó su vista, la belleza de esta causó una palpitación en el corazón de la reina. Unos ojos rojo fuego cambiaron a un verde claro. Era como la navidad en un ángel.
-L-lo siento... mi nombre es Hyewon, alteza. —se agachó, Kim ruborizada seguía sin comprender el sentimiento que nacía de ella.
-No tienes porque hacerlo, disculpame. —se alejó un poco tratando de contener el rojo en sus mejillas. —Por qué llorabas? —se volteó a espaldas de ella, no quería que la viera así.
-He sido acusada de homicidio su majestad... —En ese instante las pupilas de Kim se dilataron, sus sospechas cobraban vida...
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Raccoon city
Ficción GeneralRaccoon City es una ciudad muy corrupta, llena de problemas morales y sociales, gigantes. Se dividen en tres categorías, puesto que así es. Hay diferencia social, esta la nobleza, los moderados y la peste negra. Todo ha sido un completo desastre h...