Iida se fue antes que Tsuyu confundido, perdido y frustrado. La palabra de la enfermedad que Izuku tenía estaba lejos de su alcance. Hanahaki la enfermedad pesadilla, la muerte inminente, etc.
¿Qué podía hacer para ayudar? En su habitación daba vueltas y hablaba consigo mismo. Podía ayudarlo a olvidar sus sentimientos por Todoroki, pero no sería fácil y probablemente termine arruinando la bonita amistad que tenían Izuku y Todoroki.
Dejó salir un gruñido de frustración, esto había llegado a límites inimaginables y su cabeza no podía formular una solución.
(Probablemente porque las soluciones estaban muy lejos de su alcance).
Su teléfono vibró. Era una llamada de Uraraka.
— Uraraka-san hola...
— ¡Iida-kun! — La voz de Uraraka estaba agitada y parecía que estaba corriendo.
— ¿Estás bien? ¿Qué pasó?
— ¡Es Deku-kun! — Iida sintió sus manos sudar. No hacía falta decir más, sabía que algo malo pasaba.
—¡Voy para allá! —Dio media vuelta y usó su quirk para llegar más rápido a la casa de Izuku.
Cuando llegó Bakugō estaba asistiendo a Izuku mientras vomitaba, Katsuki lo miró sin expresión alguna.
— Está así porque el mitad-mitad le pidió reunirse para el proyecto que tenemos. — Katsuki le informó molesto mientras sostenía la cabeza de Izuku.
Pronto Izuku levantó su cabeza y comenzó a toser sacando una de las flores más bonitas y exquisitas de los prados y jardines -Aunque en esta situación no fueran tan bonitas-: Margaritas blancas.
Iida estaba paralizado y horrorizado al igual que Izuku cuando notó a Iida en el marco de la puerta y cuando escuchó que Tsuyu y Uraraka llegaron corriendo, quitándose los zapatos por la fuerza.
— Yo... ah... — Izuku no sabía que decir, solamente se dedicó a mirar a su amigo con los ojos llorosos y la sangre en la boca.
— ¡No se queden ahí parados caras de mierda! ¡Traigan agua o algo! — Bakugō interrumpió el momento de horror mutuo con gritos y órdenes. Iida fue por un vaso de agua y se lo tendió a Izuku temblando.
— Gracias Iida-kun.— La voz de Izuku no era como la cotidiana. No era dulce o alegre, no era suave y agradable. Era rasposa y lastimada.
Tsuyu y Uraraka apartaron a Iida del camino, histéricas y temblorosas. Pero la pequeña reunión angustiosa no podía llevarse a cabo en el baño, así que salieron para que Izuku pudiera lavarse los dientes y el rostro.
Izuku se quedó en el baño unos momentos temblando de miedo. No quería decirle a nadie porque él podía con la enfermedad.
Mientras apretaba al lavabo como si fuera un villano, Katsuki recargó su espalda en el marco de la puerta, observando como a Izuku se le iba la respiración y el rostro se le ponía blanco como las flores que acababa de vomitar.
— Yo le avisé a cara redonda y ella le avisó a los demás. — Katsuki respondió la pregunta que pendía en el aire, silenciosa.
— ¿Por qué? — Katsuki suspiró suavemente y miró a Izuku con seriedad.
— Porque eres un cabeza dura que seguramente pensaba que podía deshacerse de una enfermedad como si fuera la basura de su habitación... No tienes que hacer esto solo, nerd. Deja que te ayudemos. — Katsuki puso una mano en el cabello de Izuku revolviéndolo con delicadeza. Katsuki se dirigió a la sala con Izuku detrás.
Izuku se escondía detrás de Katsuki como si no estuviera enfermo. Parecía un niño que se esconde por hacer una travesura y no quiere enfrentar el regaño.
Uraraka, Iida y Tsuyu estaban de pie en la sala, hablando entre susurros. A Izuku el ambiente le recordó a un hospital. Cuando hablas entre susurros porque ni siquiera tú quieres escucharte hablar sobre el estado de una persona.
Sus tres amigos voltearon para mirarlo, y un segundo después lo estaban abrazando fuertemente.
— Midoriya ¿Por qué no nos dijiste nada? — Iida le reprochó suavemente con un nudo en su garganta. Una cosa fue escucharlo de Tsuyu, otra fue ver lo mal que Izuku estaba.
— Yo no quería preocuparlos...
— ¿¡Estás loco?! ¡Somos tus amigos! ¡Es nuestro trabajo preocuparnos por ti! — Uraraka habló alterada y enojada.
— Esto es algo serio, Midoriya-chan. No es algo como un hueso roto o un moretón. Es necesario que te llevemos a un hospital. — Tsuyu ignoró la mirada aterrorizada de Izuku y le miró con severidad, haciéndole saber que fue muy descuidado de su parte no decirles.
— He estado yendo con Recovery Girl...
— Ir con Recovery Girl no es suficiente, nerd. Puede curarte todos los huesos rotos que quieras, pero esto es diferente. — Katsuki habló desde detrás del sofá serio y cansado de lo mal que Izuku cuidaba de sí mismo.
Izuku suspiró con los ojos llorosos, los cuatro se separaron de su abrazo y sentaron a Izuku en el sofá. Lo iban a hacer hablar.
— Así que... ¿Todoroki-kun, eh? Tenías que enamorarte de la persona más densa y torpe de la clase 1-A — Uraraka se recargó y cruzó los brazos. Con un tono de decepción miró a Izuku juguetear apenado.
— No alientes más vomito con margaritas, cara redonda.
— ¡Solo estoy mencionando a Todoroki!
— Izuku tiene flores dentro de sí por ese bastardo. Creí que eso ya había quedado claro hace diez minutos.— Bakugō volteó los ojos ácido e irritado por las reacciones de los amigos de Izuku. Aunque Bakugō sabía lo difícil que era digerir la noticia gráfica acerca de la condición de Izuku.
— Bueno ¿Y qué haremos en el parque de diversiones? — Iida se dirigió a Tsuyu y Uraraka pensativo.
— ¿Parque de diversiones?
— Ojos de mapache y los demás están organizando una visita al parque de diversiones juntos. — Katsuki le informó a Izuku con un dejo de enojo.
— Podemos alejar a Deku-kun de Todoroki.
— Aunque no lo crean Todoroki se irrita fácilmente, no creo que alejarlo de Midoriya-chan se la solución más segura para nosotros tres. — Tsuyu dejó salir varios 'ribbits' mientras hacía su observación.
— ¿Y si no voy y ya? No es como si tuviera ánimos para ver a Todoroki-kun con Yaomomo-san.
— ¡Pero Deku-kun! ¡Tienes que ir! Sería nuestra primera salida oficial como amigos.
— No lo sé Uraraka, no me gusta la idea de tener que correr a un baño cada cinco minutos por Todoroki-kun.
— Confía en nosotros, verás como no notarás la presencia de Todoroki-kun.
— Vamos nerd, más de la mitad del salón espera que vayas. — Bakugō fue el último que habló.
Después de toser unas cuantas veces Izuku aceptó ir al parque de diversiones y despidió a sus amigos después de un rato.
Inko llegó tarde del trabajo y se sorprendió al ver a Bakugō y a Izuku hacer tarea juntos, y se sorprendió aún más cuando escuchó que Bakugō se quedaría a dormir.
Después de un rato de dormirse, Izuku miró por encima del hombro a Bakugō para comprobar si realmente estaba dormido.
Tomó su celular y se dirigió al baño. Seleccionó el chat con Todoroki y le se dispuso a escribir.
"Podemos hacerlo en mi casa si quieres."
Inmediatamente después le llegó una respuesta.
"Claro, para mí está más que bien. Tenía la idea de visitar tu casa de todas formas. Mañana nos ponemos de acuerdo. Descansa, Midoriya."
Izuku abrió la tapa del baño sintiendo la urgencia por vaciar a un intruso en su estómago.
Y ese intruso sabía a miseria.
••••••••••••••••••••••
¡Feliz Año Nuevo a todos! Sé que me tardé en actualizar pero me costaba mucho escribir este capítulo...
¡Gracias por su paciencia y nos vemos en el próximo capítulo!

ESTÁS LEYENDO
Flower Crown
Fiksi PenggemarIzuku podía sentir las flores en sus pulmones arrastrarse hacia su garganta en cuanto Todoroki juntó sus labios con los de él. Después del fin del beso, a Izuku no le asqueaba el sabor de la sangre en su boca, no le asqueaba ese palpitar en su coraz...