Vi por mi ventana como se iba Thomas, subió a su auto se fue rápido por la calle. Fue raro la forma en que se tensó al ver el nombre de quien lo llamaba, pero eso no debe ser un tema que a mi debiera importarme, pero una pequeña parte de mi quiere saber que pasa con él.
La forma en que me hablo en la mañana de alguna manera me hiso sentirme algo así como protegida, algo que hace tiempo no lo sentía. No era la misma manera de protección que me daba Jeremy o mis amigos si no una diferente, una seguridad de la que estoy segura no quiero volver a sentir.
Sentía que había hecho una grieta en una de las tantas armaduras que tenía construidas hace bastante tiempo, quizá no de forma intencional pero de igual manera lo hiso y me asustaba. Me asusta.
Desde ahora debía mantener las distancias.
Deje el cuaderno en encima del escritorio y baje para ver si aún estaban Damian y Emilia, me debían una tarde de películas. Como si fuera adivina hay estaban los dos viendo la televisión.
-¿Acaso ustedes no tienen casa? –pregunte sentándome en medio de los dos, por lo que tuvieron que hacerme un espacio.
-Te estábamos esperando para ver una película bebé. –dice Damian pasando sus brazos por mis hombros. –Estuvo buena la broma que le hiciste a Jer, pero para la otra recuerda que algunos también tenemos derecho a dormir.
-¿Donde esta Jer? -pregunto acordandome de él.
-Fue al Hospital. -dice Emilia. Cierto hoy le tocaba a el y en la mañana no fue por razones obvias (resaca) y menciono que iria despues de almorzar. Se me habia olvidado.
-Ahora a ustedes dos debería haberles tirado agua no fueron capaces de defenderme.–digo cruzando mis brazos sobre mi pecho y sacando el brazo de Dan sobre mis hombros.
-No te enojes. –dice Emilia abrazándome a lo que Damian emite su gesto y los dos terminen abrazándome.
-¡Ya! No estoy enojada pero suéltenme. –les digo en medio de una pequeña risa tratando de alejarme de sus brazos. Lo logro.
-Creo que hace tiempo no reías mucho en un solo día. –dice Dan levantándose del sillón, dándome una sonrisa tierna. –Iré a preparar las palomitas ustedes vean elijan la película. –termina de decir y desaparece por la cocina.
Me acerco a la mesita de centro para tomar el control de la Tv y me giro para preguntarle a Em que película vamos a elegir en Netflix, pero está mirándome con una sonrisita como el gato de "Alicia en el pais de las maravillas" es raro que me observe asi y eso pasa solo dos veces. La primera cuando conoce a un chico que le llamo la atención y quiere contarme acerca de él o ella sabe algo que yo no y quiere que le aclare las dudas que rondan por su cabeza.
-¿Qué te pasa? –pregunto temiendo de su respuesta.
-Nada. –dice con un muy fingido desinterés. –Solo que ayer en la noche vi en primera fila como te defendió Thomas de Aarón y te llevo arriba cuando te desmayaste. Solo eso. –termina. Me la quedo mirando con los ojos abiertos, sabe todo. A veces me sorprende.
-A no ni se te ocurra nada en esa cabeza loca que tienes. –digo desviando mi vista a la tele y viendo las películas que hay.
-¡Ay! A veces eres tan tonta. –dice, vuelvo mi vista a ella.
-También te quiero. –digo con sarcasmo.
-No te das cuenta de nada. –rueda sus ojos y se cruza de brazos. Con esas palabras me quedo con la duda, es obvio que me quiere decir algo entre líneas pero no soy buena captando indirectas. Soy un asco. Siempre deben explicarme dos veces algunas cosas porque no soy capaz de entender a la primera. Le voy a preguntar qué es lo que quiso decir con eso, pero llega Dan haciendo equilibrio con tres tazones de palomitas.
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Confiar en ti?
RomanceConfianza eso es o era todo lo que a ella siempre le importo sobre todas las cosas, pero no se puede pedir que sigas confiando en las personas cuando estas te lastiman.