Ezarel y Erika (En curso)

¿Porque tengo la sensación de no estar en el lugar correcto?

En la mañana siguiente Erika se levantó muy temprano decidida a ir a la biblioteca para ponerse a hacer la poción; en el camino se encuentra a un confundido Ezarel que se hallaba cerca de su habitación y decide acercarse nerviosa...

Er: ¿Ezarel, que estás haciendo aquí?

Ez: Yo... Solo... no sé...

Er: ¿No sabes?, creí que me buscabas, ¿Oh me equivoco?

Ez: Si, pero... no sé porque desde a noche no logro estar tranquilo y sin darme cuenta mis pies me habían guiado hasta a ti...

Er: (¿Por qué este repentino vuelco que siento en mi corazón?, no puedo evitar sentirme feliz, y aun no logro averiguar por qué...)

Repentinamente Ezarel se precipita sobre ella y Erika del susto cae al piso causando que todo a su alrededor le diera vueltas.

Cuando volvió a abrir los ojos, se encontró sentada sobre su cama, aún con su ropa de cama.

Er: ¡ah!, ¿qué?, fue solamente un sueño?

Erika se observa las manos buscando respuesta de ellas inútilmente y se levanta desconcertada, dispuesta a ir a la biblioteca para ayudarse con la poción, como se había dispuesto la noche anterior, pero, en el momento en que pone un pie fuera de su habitación se da cuenta de algo muy extraño; no se encontraba en Eldarya, como se suponía que era la noche anterior, estaba en su casa, ¿en el mundo humano?

Emocionada ante la idea de que haya logrado regresar a su casa se precipita a la planta baja de su casa muy feliz buscando a sus padres.

Er: ¡Mamá! ¡Papá!, ya estoy de vuelta!

En cuanto termino de decir estas palabras sus padres quien yacían en el comedor se voltean a ver sorprendidos a Erika.

(Mamá: Ma, Papá: Pa, Amiga1:A1,Amiga2:A2)

Ma: Erika, hija, no sabía que habías salido, se suponía que seguías durmiendo, ¿oh no?

Pa: A que hora saliste, yo llevo levantado toda la mañana, ¡sabes muy bien que no me gusta que salgas sola a esas horas jovencita!

Er: ¿Qué?, pero... Hace muchos meses que había desparecido... Llevo muchos meses viviendo en Eldarya y...

Ma: ¡Dios! ¡No hagas ese tipo de bromas!, ¡¿tu desaparecida por meses?! No puedo ni imaginarlo, eso debió ser solamente una pesadilla hija

Er: ¿Qué?, no puede ser posible, ¡miren la ropa que llevo puesta!

Pa: ¿Que tiene tu ropa?

Erika baja la mirada a su cuerpo descubriendo con sorpresa, de que la ropa que le habían dado en Eldarya había desaparecido, dejando lugar a su ropa que usaba comúnmente cuando vivía Enel mundo humano...

Er: No entiendo lo que está pasando...

Ma: Ya hija, todo eso debió ser una pesadilla, anda desayuna porque tus amigas ya deben de estar esperándote

Er: ¿Mis amigas? (¡Es cierto, habíamos quedado en ir al cine a ver la película que recientemente había salido!)

Pa: Pero, si te sientes mal, podemos llamarles para cancelarlo...

Er: No, no te preocupes, ¡ya me apuro! (Mis padres deben de tener razón, todo lo que viví en ese extraño mundo debió ser solamente una pesadilla...)

Erika se apura a terminar su desayuno y después de arreglarse un poco, sale corriendo al encuentro de sus amigas.

A1: ¡Erika!, que bien que ya llegaste, ya me estaba preocupando, ¡te habías tardado mucho!

Er: Lo siento, es que anoche tuve un sueño extraño en el que iba a parar en un mundo llamado Eldarya

A2: ¿Eldarya?, que tipo de lugar es ese?

Er: Bueno, ¡es en el mundo en donde habitan las hadas!, los elfos, vampiros, ¡y hasta unicornios!

A1: ¡Que sueño tan raro...¡jajajajaja!, deberías de dejar de tomar tanto café antes de dormir, que ya hasta sueñas con unicornios voladores! Jajaja

A2: ¡jajajajajaja! y, ¡lo de los vampiros me mata más!, qué tipo de películas ves?

Erika fuerza una risa forzada al sentir una repentina punzada en el corazón al ver a sus amigas burlándose de su sueño

Er: Ehm... si...

A1: Bueno, ya debemos irnos, ¡recuerda que tienes una cita con Erian!

Er: ¿¡Erian?!

Erika al escuchar este nombre no puede evitar sentir un vuelco al corazón repentino

A2: Si, Erian, recuerda que fue el quien te pidió una cita; ¡nosotras solo vamos por sus amigos que el prometió llevar!

Er: Bueno, entonces ya hay que ir

A1: Porque el repentino entusiasmo, dijiste que no soportabas sus bromas pesadas

Erika siente un repentino dolor de cabeza y una extraña ansiedad en su pecho la impulsa a precipitarse a su encuentro, con la extraña esperanza de ver a alguien que deseaba ver, aun sin esperar por quien...

Al llegar al lugar donde habían quedado, Erika se agacha recobrando el aire por haber llegado corriendo y cuando levantaba la mirada vio a un chico con ojos verdes y cabello azulado, ¿acaso era el?

Er: ¿¡Ezarel?!, ¿¡Pero, que estás haciendo aquí, creí que tu...

¿?: ¡Ezarel?, no, mi nombre es Erian, ¿con quién me estas confundiendo?

Er: N...no... yo, solamente brome...aba... (¿Eso explica por qué soñé con ese elfo...pero si eso fue un sueño, porque siento que estoy en el sitio equivocado?)

Continuara...