Ayúdame a conquistarla. {Ragoney}

11

A la mañana siguiente, fue Raoul el primero de los tres que habitaban el piso en ese instante en levantarse. Vertió leche fría en una taza y se la tomó de un solo trago. Luego se sentó en el sofá a revisar sus redes sociales, aún en ropa interior.

Nada nuevo. Por lo que se puso a mirar sus historias destacadas. Se paró en una foto de hacía dos días. Era una foto de un atardecer. Aquella tarde la puesta de sol era espectacular y quería dejar constancia de ello. Pero algo que nadie sabía, era lo que había detrás de aquella foto, nadie sabía quién estaba con él en aquella cama de matrimonio en el piso de Miriam.

Se le vienieron todos los recuerdos de aquella tarde, tumbado junto a Agoney en aquella cama.

- Buenos días amiga, yo que tú me taparia un poco. -Miriam le sacó de su ensimismamiento.- ¿Y esa sonrisa de tonto?

Raoul no era consciente de su sonrisa, pero la quitó al momento.

- Joder Miriam, qué susto. -Ambos rieron.- ¿Sabes si Ago está despierto? Me gustaría vestirme y no me apetece despertarle.

- Tenía la puerta cerrada, no sé si seguirá dormido. Oye, ¿en quién estabas pensando? No me lo digas, creo que ya lo sé.  Tendrías que haberte visto la carita de enamorado que me llevabas.  - La gallega se dirigió a prepararse su tazón de cereales multicolores.- La verdad, es que no me gustan. -Dijo metiéndose una cucharada de cereales en la boca.

- ¿Y se puede saber por qué los compras? -En ese instante Agoney apareció por la esquina que separaba el salón y la cocina del resto de la casa.

- Buenos días chicos. -Se acercó a Raoul y le dejó un pequeño beso en los labios.- Buenos días amor.

- Hola, soy Miriam por si no me conocías. -Miriam abrazó con fuerza al canario.- Creo que no dormías tanto desde Navidad, amigo.

- Oye, ahora que podemos dormir tanto como queramos hay que aprovechar. -Dijo Agoney guiñando un ojo a la gallega.

- ¿Cuál es el plan para hoy? -Preguntó Raoul con voz dejada.

- Hoy no creo que podamos hacer gran cosa, dan lluvias para todo el día. -Dijo Miriam desde la cocina, limpiando el tazón que había utilizado para desayunar.

- A mí se me ocurre un plan que nos puede interesar a todos. -Añadió Agoney con voy pícara.

- ¿Qué estás insinuando canario? - Dijo el catalán robandole un largo beso a su novio.

- Hoy podríamos ir a la discoteca. Ricky me dijo que hoy vendían las entradas más baratas.

- No sé por qué no me sorprende que sea Ricky el que te lo haya dicho, ese chaval ha conocido a todas sus parejas en discotecas. - Dijo la gallega desde la cocina aún.

- Entonces qué, ¿se apuntan a la diversión?

- Por qué no. -Dijeron Raoul y Miriam al unísono.- Yo aviso a los demás. -Concluyó Raoul.

- Perfecto. Pónganse guapos, hoy nos espera una gran noche. -Acto seguido, cogió a Raoul de la nuca, y lo acercó a él para regalarle un beso como el que minutos antes le había dado.

A la hora de comer, decidieron que hacer ir a un pobre repartidor al piso con el chaparrón que caía no era buena idea, por lo que prepararon tres ensaladas de pasta. Cuando terminaron de comer, decidieron ver una película.

- ¿Cuál os apetece ver tortolitos?

- A mí me apetece ver DeadPool. - Dijo Agoney quitándose las legañas que aún habitaban en sus lagrimales.- Pero lo que ustedes quieran.