Por: mel_katina
Yulia estaba hablando por teléfono con Oleg, su padre, mientras Lena se encontraba acostada con ella en la cama, y Yulia le acariciaba lenta y suavemente los cabellos.
-entonces, ¿si están molestos?-preguntó Yulia temerosa
-molestos no, pero si desilusionados. Verás, realmente te quieren de vuelta Yulia-dijo Oleg- y yo también quiero verte, hija
-lo sé papi pero ya te dije mis razones, razones por las que no puedo volver a América-dijo Yulia en voz más baja. Lena sintió un grado de culpabilidad y se incorporó, mirando confusa a Yulia- si, está bien papá. Te llamo mañana, si. Adiós.
Yulia colgó el teléfono y le sonrió a Lena.
-¿qué pasa bebé?-le preguntó
-Yul, yo soy esa razón por la que no puedes volver. Mira, yo sé que tienes un gran compromiso allí, me has contado de tus niños y ellos te necesitan. Te quieren mucho, Yulia. Así que ¿por qué no vuelves?
-no te voy a dejar-dijo Yulia más seria- jamás, no te volveré a perder
-pero qué dramática eres-replicó Lena- ¿es que no entiendes Yul? A mí no me vas a perder, sólo...sólo será por poco tiempo
-mmm...no lo sé Lena, tengo que pensarlo-dijo Yulia no muy convencida y se paró de la cama. La conversación le incomodaba- voy a tomar agua, no tardo
-ok-dijo Lena comprendiendo y se acostó a ver la tele mientras Yulia desaparecía por la puerta.
Sonrió al recordar cuánto era amada por su chica, cuantos sacrificios había hecho por ella y se sintió bien, debía devolverle el favor a Yulia. ¿Pero cómo?
Mientras tanto, Yulia se encontraba en la cocina, sentada en la barra, pensando. ¿Qué hacer? No sabía por cuanto tiempo se quedaría en Rusia, se había olvidado por completo de la idea de volver a Canadá y ahora sus niños la necesitaban. La iban a correr del trabajo si no se presentaba en dos semanas y eso la llenaba de frustración. Aquel trabajo le fascinaba, debía hacer algo. De pronto, una idea le asaltó la mente. Un vago recuerdo le vino, el deseo que tuvo 10 años atrás, cuando Lena se encontraba hospitalizada.
Si su memoria no le fallaba, ya tenía las ilusiones de hacer un viaje de placer con Lena, con tal de que su pelirroja se mejorase, con tal de que se recuperara y bien...nunca se hizo.
¿No estaba Lena en el proceso de recuperación? Es decir, ya estaba muchísimo mejor, las cosas marchaban casi a la perfección, pero...todavía no era por completo la Lena de antes.
Mientras una estúpida sonrisa no se le quitaba de la cara, salió corriendo de la casa, tomó uno de los autos y se fue a toda velocidad al centro de Moscú.
**Oh, ya pasaron 20 minutos, ¿qué se cree esta Yulia?** pensaba Lena mientras cambiaba una y otra vez los canales de televisión. Decidió bajar a ver que pasaba.
Se fue directo a la cocina y, ¡no estaba!
-¡Yulia!-empezó a llamar con suavidad por toda la casa, mientras la recorría- ¡Vamos Yul, que tu y yo necesitamos hablar!
En eso, sale Marie de una habitación.
-¿qué sucede Lena?-le preguntó
-¿has visto a Yulia? Supuestamente bajó a tomar agua
-no, pero me pareció escuchar la puerta principal y un auto yéndose hace...
-15 minutos-completó Lena y se mordió el labio al ver que Marie afirmaba con la cabeza- ¿a dónde se habrá ido ahora?
ESTÁS LEYENDO
Inopacable Amor (¿Cómo llegamos tan lejos? 2) (t.A.T.u. fanfic)
FanfictionEsta es la continuación de ¿Cómo Llegamos Tan Lejos?. Este fanfic no me pertenece, su autora es mel_katina