Amante » Yoonmin [율민]

[capítulo dos;;]

capítulo dedicado a kityesga  xx

🍷

Su celular resonaba por toda la habitación indicando que muchos mensajes de texto y llamadas entraban desesperadamente en el aparato, se levantó maldiciendo mentalmente al dueño o dueña de aquella desesperación que lo hizo levantarse de su cómoda cama. Yoongi estaba a unos centímetros del celular cuando unos brazos rodearon su cintura y no pudo evitar sonreír volteándose para encontrarse con ese hermoso chico pelirrojo.

—Amor ¿que pasa? ¿por que te despiertas tan temprano. —se levantó torpemente para abrazar al pelinegro por la espalda y dejar un beso en esta.

—Mark, bebé, lo siento, me están llamando del trabajo, dame un segundo ¿está bien?

El contrario asintió.

Min se levantó tomando su celular, salió de aquella habitación, bajó las escaleras de una forma brusca, estaba frustrado. Al llegar a la cocina tomó su celular una vez que sonó de nuevo y gruñó como respuesta.

—Hola, bebé ¿que pasó?

—Y-Yoongi...— la voz del pequeño Jimin se escuchó quebradiza del otro lado, su respiración sonaba fuerte en la oreja del mayor y sus sollozos le impedían hablar.— ¿cuando dejarás a ese tipo?

—Joder, Jimin, ya hablamos de esto, bebé ¿puedes esperar un tiempo más? tengo que planear como decirle todo esto.

—¡No puedo esperar más!

Yoongi suspiro intentando calmarse, intentando no gritar para no alterar a su novio el cual seguía acostado, pero Jimin estaba agotando su paciencia.

—¡Ya no puedo! ¿acaso no ves como sufro cada vez que ese tipo publica algo contigo? me duele, me duele mucho y... y-ya no puedo más.— y una vez más, la voz del pequeño rubio se rompió dejando que el mayor lo escuchara como siempre era vulnerable.

—Jimin en serio yo...

—¡¿Tú qué, Yoongi?! ¡¿Tú qué?!

Bien, ya había perdido la paciencia.

—Yo todavía no le diré nada a Mark, y tú, pequeño masoquista tienes que aguantarte esto ¿sabes por que? ¡por que te gusto tan exageradamente como para no poder dejar de ser solo un jodido amante! ¿acaso no ves que no eres más que eso? un simple amante, un chico que se revuelca con otro que está en una relación, un chico de segunda opción.

La llamada se cortó y Yoongi suspiró.
Unos brazos nuevamente tomaron su espalda acariciando esta con cuidado. Mark dejó descansar su cabeza en el hombro de su novio.

—Yoongi-ah... volvamos a la cama, tengo sueño.— frotó sus ojos como referencia y dejó escapar un bostezo.

El nombrado se volteó, tomó al chico de la cintura y lo abrazó empezando a dejar besos húmedos en su cuello, casi con cansancio.

—No puedo, son las seis, sabes que los sábados todo el día tengo que resolver asuntos importantes. —besó su mejilla.— Acaban de llamarme y me dijeron que hay un gran problema tengo que ir a arreglarlo, luego en la noche volveré, lo prometo.

El chico asintió dejando un suave beso en los labios de su novio, Yoongi sin más correspondio para luego subir a la habitación en la que había dormido la noche anterior, rápidamente recogió sus ropas colocándose una que otra prenda las cuales estaban regadas por todo el suelo debido a la noche anterior. Al terminar tomó su bolso, su celular, sus llaves y salió de aquel moderno y muy lindo departamento de su novio; subió rápidamente a su auto colocando sus cosas en el asiento de atrás y sin más arrancando el motor.

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—Vamos, lindo, déjame estar contigo. Déjame tocarte.

Aquel chico de cabello platinado besaba desesperadamente su cuello mientras lo apegaba a la pared, ambos cuerpos desprendían el olor de alcohol y cansancio. Intento alejarlo una vez más, y falló nuevamente en el intento, el chico en realidad era fuerte y se arrepienta de haberlo traído a su departamento para follar solo por despecho.

—¡Ya déjame o llamaré a la policia, maldito bastardo! —gritó con desespero Jimin apartándolo de un solo empujón.

—Bien bien, luego te veo, nalgón. —dijo aquel chico para luego largarse con un portazo.

Jimin suspiró dejándose caer en el suelo con la espalda apoyada en la pared y sus piernas separadas. Tomó su celular revisando todas las estupideces que había hecho ayer a pesar de los gritos y mensajes de texto de Taehyung para que no le escribiera al idiota de Yoongi.

Y como siempre Taehyung tenía razón, cada vez que estaba o hablaba con Yoongi salía lastimado.
Jamás olvidaría esas palabras de ayer "un simple amante, no eres más que eso"

Jimin siempre había sido un chico muy orgulloso, fuerte mentalmente, y de esos que no se aguantaban ser juguete o chiste de nadie, se dejaba respetar y buscaba ser querido y entonces ¿cómo terminó siendo el masoquista amante de Min Yoongi?

Estaba decidido, ignoraría a ese tipo, de alejaría con cuidado y buscaría hacer su vida de nuevo.

La puerta sonó, sonriente caminó a abrirle a su amigo Taehyung que dijo que venía a verlo al instante.
Abrió la puerta, sus piernas flaquearon, sus ojos se llenaron de lágrimas y el agarre de su mano en la perilla se debilitó completamente.

—¿Que haces aquí?

—Vamos, bebé, sabes que no quise tratarte de esa forma.

Jimin estaba jodido.

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