La Bestia Dorada《KookV》

Capítulo cuatro: Las Apariencias Engañan.

--Parece que le agradas--doy un brinco en mi lugar y al girarme tengo los dos grandes y oscuros ojos zafiros de Jungkook puestos en mi.

--Maldición--susurro mientas cierro los ojos y tomo aire, lo menos que quiero es gritar y despertar a mi abuela pero vaya susto me ha dado el tonto lobo humano este.

--No deberías maldecir-- inquiere él con una sonrisa traviesa y lo miro con el ceño fruncido.

--No deberia hacer muchas cosas pero mira, las hago--farfullo rodeándolo y caminando escaleras abajo, él parece que no me persigue, no escucho sus pasos, a lo mejor y se fue. Cuando me giro a mitad del camino de las escaleras le veo, esta detrás de mi-. ¡Joder!- Medio grito y él tapa mi boca con sus manos.

-¡Shh! La abuela duerme- me regaña y aunque por primera vez pensé que sus manos serían ásperas y con callos son lisas y suaves.

-¿Cómo te apareces de la nada?- cuestiono algo asustadizo, el sonríe.

-Los lobos somos bastantes cautelosos- lo miro sorprendido, ¿nos estuvo escuchando? Porque no puede ser que diga aquello tan a la ligera-. Aparte de que tenemos un buen oido, ya sabes, escuchamos desde grandes distancias y estas paredes de madera no me impiden oir conversaciones que ocurren en otras habitaciones- me enojo, eso es como invasión de la privacidad.

-Mph, al menos sirven para algo- Mascullo y me arrepiento de mis palabras al ver su ceño fruncido.

-Sí, mas cosas que ustedes-. Bufa enojado mientras camina el pequeño trecho restante de escaleras, me quedo confundido en mi lugar.

-¿Qué? Oye, ¿qué quiere decir con "ustedes"- pregunto mientras lo sigo por detras, él me mira por sobre su hombro.

-Lo que oiste- comenta con obviedad mientras va a la cocina siendo perseguido por un confundido yo.

-Si pero tu también eres uno de "nosotros" tonto- informó y él se gira mirándome con altanería.

-No me compares con ustedes, yo tengo mucha más capacidad y mis sentidos más desarrollados que los suyos, ya quisiera ver un humano cazando en la obscuridad- se burla mientras se da aires y yo ruedo los ojos.

-Eso no te quita lo humano que sigues siendo- refuto ya que a mi vista parece bastante normal, podría camuflarse fácilmente en el pueblo y nadie pensaría que es un lobo por las noches.

-¿Y quien dijo qué me queda algo humano?- Inquirere acercándose demasiado a mi rostro que rápidamente se pone de todos los colores quedando finalmente rojo.

-P-pues... para mi pareces bastante normal- él se aparta al instante.

-En apariencia, ¿sabias que las apariencias engañan?- Me dice sonriente mientras saca con una taza agua caliente de la cacerola que está en fuego, se hace un té como si estuviera en su casa y tal ves sea así pero todavía no me acopló a la idea de que él haya estado más tiempo aquí que yo, de repente me siento como alguna clase de intrusa-. Apestas a amargura- observo a Jungkook quien tiene puestos sus par de ojos oscuros como mares en mí, su nariz fruncida.

-¿Eh?- Articulo de manera confundida.

-Al igual que los perros percibimos algunas clases de emociones y la tuya es tristeza en este momento, ¿te pasa algo?- Lo miro unos segundos para negar y sonreirle.

-Cosas sin importancia, sólo tonterías- ni loco le diré a este Pulgoso mis problemas, posando mi vista en la ventana de la cocina observa como la lluvia golpea el frágil vidrio verde casi con rabia.

-Finalmente te contaron el jugoso "secreto"- Habla Jungkook luego de un tiempo y lo miro, parece relajado, toma el té como si lo degustara con cada trago y me cuestiono seriamente de si es un lobo.