Observaba cada movimiento que daba, estaba consciente de él, de su inminente presencia que lograba erizar mis vellos. Sentía la sala pequeña con el en ella. Ni siquiera saber la naturaleza de Jungkook, un lobo, me hizo sentir tan cohibido como ahora. Se ve tan bueno, pero parece que oculta algo peor, un sucio secreto que podría hacer que lo pierda todo. Somos como opuestos, él se nota malo y yo, hasta donde sé soy buena. El problema es que por más opuestos que seamos no nos atraemos, o al menos él a mi no me causa nada.
-¿Taehyung?- Salgo de mis pensamientos y observo la sonrisa de mi madre, estoy percatado de como Minjae me observa, tiene una taza de té en su mano mientras porta una sonrisa altanera.
-Perdonen, estoy algo distraída- Mi madre tensa la mandíbula, enfadada.
-Esta bien, suele ocurrir, algunos dicen que mi belleza no los deja pensar- Además de arrogante, otra cosa que agregar a mi lista, pienso levemente enojado ante su comentario.
-Oh, Minjae- mi madre ríe tontamente y sé que sólo finge, trata de ganar algo de confianza con él y que me acepté como su futuro '' esposo'' , él sólo pensamiento de la palabra me hace estremecer.
Esa tarde la pasamos charlando, bueno, más bien mi madre y Minjae, mi progenitora parece más interesada en él que yo. Risas falsas por parte de mi madre y chistes carentes de sentido y gracia por parte de Minjae son lo que me hacen aburrir. Ni siquiera su gran casa de ladrillo y cemento me sorprende, tampoco su ropa que parece presumir de ella a cada que puede:
"¿Sabe? Esta tela es única aquí, traída del exterior"
Me tiene harta, es muy engreído, junto con un toque de narcisista y arrogante. Combinaciones peligrosas. No es nada parecido a como lo pintan, los chismes y rumores de las aldeanas son como alabaciones para lo que en verdad él es. Cuando nos retiramos él nos acompaña a la puerta, siento como posa su mano en mi espalda baja y reprimo las ganas de quitarla de un manotazo. Eso solo arruinaría todo este teatrito montado por mi madre y yo no me puedo dejar de actuar imprudentemente.
-Fue un placer, Taehyung. Espero verte otra vez y con algo de suerte te conviertas en mi prometido- sonríe con sorna y yo espero que sus palabras sean un chiste, porque ni en broma tengo ganas de casarme con él.
En respuesta le sonrió tontamente mientras mi madre lo saluda cordialmente.
Cuando estamos algo alejados de su presuntuosa casa mi madre vuelve a entrar en su etapa de adolescencia.-¡Dios! Lo viste, estaba embobado por ti, es muy apuesto y aparenta ser mas joven de lo que en verdad tiene, simplemente perfecto- mi madre lo elogia y yo la observo, ¿es enserio? ¿Ese petulante y altanero le cayó bien? Increíble, simplemente increíble-. ¿Qué te pareció a ti? No pareces tan impactado.
-Esta bien, no es asombroso o algo así- de repente la imagen de Jungkook aparece en mi mente, esperen ¿qué?
-Hijo, es perfecto, ¿no has visto sus ojos? Son de color azul precioso- yo sonrió tímido.
-He visto mejores- confieso algo avergonzado al acordarme de dos preciosos zafiros que aparecen en mi mente.
-Imposible...-tengo ganas de refutar pero entonces esta pequeña conversación no terminaría y se convertiría en una acalorada discusión que seria mejor evitar.
Me encantaría decirle que los ojos de Jungkook son más lindos pero luego recuerdo que ella lo odia y callo, es verdad, tengo este saber, esta carta a mi disposición... ¿qué haré con ello?
...
Miraba distraído el cielo teñido de un amarillo claro seguido de un celeste algo oscuro, recién comenzaba a amanecer y veía con sumo detalle como todo empezaba a esclarecerse, simplemente bello. Estaba caminando en aquel bosque, se que no debía hacerlo a estas horas, se que cuando mi madre no me encuentre en la cama tal vez pegue el grito del año pronunciando mi nombre y se enoje, pero no me importa. Necesitaba algo de aire, puro y limpio aire, y el del bosque es uno sin igual. Mi pequeño lugar en donde podía sentirme yo mismo, seguro, protegido. Cerré los ojos sintiendo la fresca brisa mañanera en mi rostro como un suave roce.
-Lo único que provocas caminado tan solo es que faciliten las posibilidades de cazarte - sonrió ante tal comentario y abro mis ojos mientras miro mi camino de pasto y hojas revueltas.
-Que negativo eres- comento mientras mi vista se posaba en él, siempre con la misma camisa algo sucia y rota, sin contar sus pantaloncillos que le quedaban mas abajo de las rodillas, eran de un fuerte marrón y contrastaba enormemente con su blanca piel.
-Es mejor ser positivo, a veces siempre debes pensar en lo peor- lo miro con interés.
-¿Eso crees? Entonces, ¿tú dices qué es mejor pensar lo inesperado en vez e lo esperado?- Él asiente y me mira, sus ojos se notan algo más suaves-. Eres raro, Jungkook-- rió.
-Querrás decir único- yo ruedo mis ojos, me agrada su compañía-. ¿Qué haces a estas horas caminando solo? Mmm, hasta suena triste- resoplo algo enojado.
-Oh, calla. No estoy caminando solo, estoy caminado contigo- explico y veo su sonrisa levemente dibujada en su rostro.
-EL único raro aquí eres tú- susurra y lo observo curioso.
-¿Yo?- Exclamo casi indignado, pero es que, ¿qué tengo de raro yo? La palabra normal es mi confort personal principal y que él lo cuestione me asusta.
-Bueno, estas hablando con un lobo y ni siquiera te alteras o algo así- sonrió ante sus palabras.
_Tal vez, solamente, los dos seamos raros...
Y por alguna razón, como si lo que acabase de decir fuera un secreto ambos sonreímos como tontos.

ESTÁS LEYENDO
La Bestia Dorada《KookV》
Lobisomem"Ya viene el lobo... será mejor que te cuides." Adaptación de "La Bestia Dorada RinxLen" Créditos a su autora @-dominguixcidio