La gira había comenzado, anhelaba de sobre manera que ésta comenzara, siempre lo hacía, pero está vez más que nunca. Últimamente necesitaba cualquier cosa para distraerme, pero esas cosas no eran lo que yo esperaba y siempre terminaba sumido en mis pensamientos, intentando dar explicaciones a mis acciones, pero terminaba cada vez peor, a pesar de ya haber pasado bastante tiempo, a veces, lo sucedido aquella noche atormentaba mi sueño y hacía que me torturara a mí mismo. Después de esa noche andaba prevenido, no sabía en qué momento Shoya se podía "insinuar" o reclamarme por lo sucedido, así que había tomado la decisión de alejarme o evitar estar a solas con él, pero muchas veces esas precauciones eran innecesarias, ya que él se mostraba indiferente a lo sucedido y cuando hablábamos solo lo hacía en relación con el trabajo, eso de alguna forma me tranquilizaba, pero me hacía sentir como un paranoico y no me gustaba, también sembraba la duda en mí, de saber si lo recordaba o no, de si actuaba para no tener que hablar de ello, todo esto me torturaba el pensamiento y como si fuera poco, mi relación con Rika, la que se hacía llamar mi "novia", se había ido al carajo. Unas semanas después de lo sucedido con Shoya, la había citado para hablar de "nosotros", la conversación no fue para nada amable, terminamos discutiendo, bastante fuerte, para ser exactos, aparte de eso, ella terminó llorando haciéndome ver cómo el malo del paseo, nunca la pude entender, ella me reclamaba cosas que yo supuestamente no hacía y cosas que "tal vez" sí pero que ella no aprobaba, era obvio que solo estaba conmigo por mera apariencia y publicidad, quería un "novio" que le sirviera, no que la amara, pues esa palabra no existe en su vocabulario. En fin, cerré mi ciclo con ella, no sin antes ser tratado como la peor persona del mundo...
Todo se había vuelto oscuro y solitario, por todo eso, necesitaba comenzar la gira, necesitaba liberarme y eso solo lo lograba haciendo lo que más amaba, cantar, hacer que mi voz sonara muy alto y llegar a muchos corazones, era la única manera en la que podía alejarme y olvidarme de todo lo que me atormenta y esta vez espero que el destino no lo arruine.
-¡Yo-ka! Ya llegamos, ¿hasta que horas te vas a quedar ahí sentado? -Tatsuya me reclamaba sacándome de mis pensamientos.
-Sí, lo siento no me di cuenta -me disculpe bastante avergonzado por lo sucedido.
-Como sea, vamos a descansar estoy agotado.
- Eh, sí, ¿Dónde están los demás?
-Kei fue a revisar lo de las habitaciones y Shoya dijo que necesitaba un baño con urgencia, al parecer bebió mucha soda -se río- el verano no ha sido indulgente con él.
-Eh, no, al parecer no -sonreí forzosamente.
Cuando entramos al hotel, Kei estaba en el recibidor esperándonos con las llaves en sus manos.
-¿Por qué tardaron tanto? ¿Pensaban dormir en la Van o qué?
-Dile a él, está en nubes rosas de algodón, al parecer hay algo o alguien que ocupa su mente -dijo eso sonriendo pícaramente.
-Que gracioso Tatsuya, no querrás que te moleste después ¿No?
-¡No! Máster prometo no volverme a burlar de ti -dijo esto con un tono bastante burlesco, lo que hizo que reaccionara y le golpeara su abdomen.
-¡Ay! -se quejó y arremetió contra mí
Así comenzamos un "juego" de "golpes" contra el otro, tontear de esa forma con Tatsuya me sacaba de ese malestar y de alguna forma me divertía, hace tiempo no lo hacía, eso me hizo sentir un poco tranquilo.
-Chicos, si ustedes no están cansados yo sí, así que ¿vamos a sortear las llaves? o escojo la que yo quiera y ustedes se quedan jugando -dijo Kei bastante serio. Se notaba bastante agotado, cuando estaba así no había nada que se pudiera hacer, estaba en la delgada línea en que podría salir un monstruo de allí.
Con Tatsuya nos detuvimos y cada uno tomó una llave de las manos de Kei, ese era el pequeño "sorteo", creí que tendríamos está vez habitación individual, pero supe que estaba equivocado cuando Tatsu preguntó.
-¿Qué número tienes?
-608 y tú
-Te toca compartir habitación con Sho-chan, tengo la 603, me toca con Kei, al parecer Sho-chan se nos adelantó al "sorteo".
Sentí como si me hubieran arrojado un baldado de agua fría, me paralice, es como si lo que siempre estuve evitando ya no tuviera marcha atrás, de hecho no tenía, sabía que tarde o temprano tenía que afrontar esto, pero no espere que fuera tan pronto, no estaba preparando, no sé, pero tenía miedo, mi corazón había llegado hasta mi estómago y no había nada que lo devolviera a su lugar. Sabía que si pedía a Kei o a Tatsuya que me cambiaran su llave sería sospechoso.
-¿Yo-ka? ¿Pasa algo? -Tatsuya me sacó de mis pensamientos- ¿Tienes algún problema con Sho-chan? Si quieres puedo cambiar contigo
-¿Eh? ¡No! -me apresure a contestar, no quería que nadie sospechara nada, tampoco que cuestionara cosas que no podía responder- Claro que no -reí por lo bajo-, ¿Por qué lo dices?
-Bueno, te pusiste algo pálido, como si hubieras visto un fantasma o como si te esperará algo aterrador al otro lado de la puerta.
-Je,je,je, pero que cosas tan extrañas dices, claro que no, no pasa nada, solo estoy cansando -mentí, en ese momento el ascensor abrió sus puertas en el sexto piso, mis nervios estaban a reventar, mis piernas temblaban, nunca en mi vida, ni siquiera cuando salía al escenario, me había sentido tan nervioso como en este momento.
Los chicos se despidieron y se dirigieron a su habitación.
Observe la "llave", esta era una tarjeta color negro, con el número de la habitación grabado en relieve, en color plateado y el nombre del hotel en la parte inferior en dorado.
Apreté la llave en mis manos, el revuelto de mi corazón en el estómago era aterrador, volví la visita para ver si Kei y Tatsuya seguían allí. Ellos estaban entrando a su habitación, lo último que vi fue a Tatsuya despidiéndose de mí, para luego desaparecer, repetí su ademán y seguí mi camino deteniéndome enfrente de la dichosa habitación.
Tome una bocanada de aire haciendo que llegara al revuelto de estómago y corazón, intentaba reaccionar y darme una razón lógica por la cual me sintiera así, no la había, no podía explicarlo, sentía que las reacciones de mi cuerpo eran algo exageradas al suceso. No pasa nada. Durante 7 años Shoya ha sido ni compañero de banda, habíamos compartido habitación más de una vez y nunca había pasado nada ¿Por qué ahora sí? Volví a tomar aire y entre.
La habitación estaba muy normal, dos camas un baño y un balcón antecedido de una pequeña salita de estar. Vi la maleta de Shoya en una de las camas, ésta estaba abierta y con algunas prendas por fuera colocadas delicadamente a los lados, intuí que estaba en el baño, un ruido proveniente del mismo me lo confirmó.
Está tomando una ducha, me quedé parado enfrente de una de las camas, pensando qué hacer. Tenía dudas, miedo, pero ya no podía seguir escapando, era momento de enfrentar todo eso, ya no quería seguir así.
¡Hola!
Les traigo nuevo cap de esta historia XD, sí lo sé, está avanzando de forma muy lenta, pero pues no he tenido mucho tiempo para continuarla y pues es bastante difícil escribir desde ésta perspectiva, bueno al menos para mi lo es, no sé mucho del Yaoi, pero hago mi mejor esfuerzo, así que espero que les guste y no olviden darle estrellita y dejarme sus comentarios, ya que son muy valiosos para mí. No siendo más les dejo un abrazo rompe costillas y un muchos besitos, no leemos en el siguiente cap :*
Atte.: AnArTeEz :3
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¿AMOR O DOLOR? [Fic de DIAURA]
FanfictionEste es un fanfic de fans para fans, los derechos de los nombres de los protagonistas aquí utilizados corresponden exclusivamente DIAURA. Lo único que me corresponde es la historia y los demás personajes ficticios. Shoya, a pesar de tener sus sent...