Natalia's POV:
Llevaba un día completo, había acabado la Universidad bastante más tarde de la cuenta debido a que el profesor se ha retrasado y ha insistido en que su clase debe darse entera.
Al conseguir salir al fin de allí lo primero que he hecho a sido fumar, me hacía falta una calada para liberar todo lo que llevaba dentro.
Cuando estaba en el que parecía el mejor momento del día sonó mi teléfono.
Miré a ver quien era la persona que estaba llamando.
Iris, una chica con la que me suelo liar en alguna que otra fiesta o algún botellón en el que se ha plantado, me imaginaba que la llamada era para quedar para hacer lo mismo. Así que simplemente no respondí.Seguí a lo mío, mirando como anochecía lentamente.
Cuando acabe de fumarme el cigarro noté como alguien me ponía la mano en el hombro.
Era Miki (mi amigo desde que tengo conciencia).
- ¿Qué haces aquí tan solita? - dijo sabiendo que ese comentario iba a hacerme gracia, ya que yo siempre decía que era uno de los comentarios más heteritos y hungas hungas que había oído nunca.
- Pues nada, asimilando todo lo que nos acaba de explicar Julio como quien explica el cuento de los tres cerditos - dije encongiéndome de hombros.
- Oye, un respeto, es un cuento con mucho trasfondo eh - dijo alzando el dedo índice. No pude evitar reirme un poco ante su comentario.
- ¿Hoy te vienes a dar una vuelta? Ya sabes, es Jueves la noche promete - dije dándole un leve golpe con el codo y guiñándole el ojo de broma.
- No se si debería - le miré extrañada de manera que él supiera que podría especificar. - Quizá salga también Helena, y sabes que no es buena idea verla, y más si va a ir con él.
Miki llevaba un tiempo bastante jodido, ya que su novia le había dejado después de ponerle los cuernos con otro chico.
Asentí y entendí perfectamente que él no quisiera venir.
Quedé con Damion, África, Famous y María para ir nosotros está noche. Tenía pinta de ser una noche movidita.
Por la noche...
Llegamos a las doce a la puerta de la discoteca la cual se llamaba nigow.
María, África y yo fuimos a la pista mientras los otros dos estaban en la barra bebiendo y hablando de su última clase juntos y de alguna que otra cosa que sentí que no era necesaria preguntar.
Nosotras no parábamos de reír y bailar ( en el caso de María era perreo extremo, y la otra tonta le seguía, así que al final me unía también yo) todo eso con el cubata en la mano y sin parar de cantar.
Fuimos a la barra a por otra, y no pude creer lo que veía.
En la barra estaba la ex de Miki, ahora me alegraba de que mi amigo mo hubiera venido. Habría sido bastante chocante para él verla ahí después de tres meses.
Se lo dije a las chicas de la manera más discreta posible, pero claro, ellas esa palabra no saben ni lo que significa.
Por lo que la chica quizás se dió cuenta de nuestra presencia.
Volvimos a la pista y seguimos a lo nuestro cuando alguien le tiró a la menos indicada (María) un vaso encima.
No había sido nada más ni nada menos que el chico por el que Helena dejó a Miki. He de admitir que a mi me hirvió la sangre. Pero el triple le hirvió a María que se había juntado que había llenado de ron su vestido y a parte había (de alguna manera) roto el corazón de su amigo.
- Tío, ¡¿Eres subnormal o que te pasa?! - dijo ella alterada.
- Perdona - dijo el chico recogiendo el vaso del suelo e intentando secar un poco el vestido de mi amiga.
- ¿¡Qué coño te pasa?! - dijo María alterada. That's my girl.
- ¿Qué he hecho? - dijo el chico descompuesto.
- TOCARME - Dijo María cortante y con una cara de asco que no se la quitaba nadie.
Él volvió a tocarla para hacer el intento de secar un poco el vestido y lo que hizo sin darse cuanta fue cavar su tumba.
María estaba a punto de hablar. Pero no pude evitar adelantarme.
- ¿Eres sordo? ¿gilipollas? No se, ¡¿qué coño eres?! - dije alejándole de María de un empujón.
El chico perdió el equilibrio y cayó al suelo.
Se levantó y vino a pegarme sin pensarlo dos veces, su orgullo de machito estaba herido, que pena. Eso último lo dije en voz alta para que le quedará clarito que no le tenía ningún miedo y que las ostias que se llevara iban de parte de mi amigo.
Me cogió del cuello de la camiseta y también me lanzó contra el suelo. Yo me levanté y empecé a darle puñetazos sin ton ni son. Sólo lo hacía.
La situación se prolongó hasta un momento en el que noté como alguien me hacía un placaje y me hacía caer al suelo, al igual que al otro chico.
Era la policía, y a mi y al chico nos esperaba una larga noche en comisaría.
A la mañana siguiente nuestros amigos vinieron a por nosotros, a por mi vino Damion y Famous, me imagino que las otras dos iban demasiado mal.
Y a por el chico raramente no vino su novia, me imaginé que era su amiga.
Era rubia, bastante bajita, ojos marrones y una sonrisa que iluminaba bastante la sala, era preciosa.
- Joan, para una noche que sales y te meten en el calabozo - dijo la chica suspirando y mirando a su amigo desde fuera de la celda.
Yo estaba sentada en la "cama" de la misma viendo el panorama mientras mis amigos rellenaban algunos informes.
- Se lió un poco - dijo él - esa loca se me abalanzó. - dijó él señalando para mi lado con la cabeza.
Yo puse los ojos en blanco mientras negaba con la cabeza.
Levanté la mirada y me la encontré mirándome con una intensidad muy singular.
Sonreí un poco, y me levanté de donde estaba.
- He de decir que él le tiró la Copa encima a una amiga mía- ella le preguntó si era cierto, y él asintió.
Y yo proseguí. - también he de decir que no es escusa para liarme a ostias pero lo hice. Lo siento si te hice daño, pero la frase de pegas como una chica no suena tan bien cuando una chica te ha dado lo tuyo, eh? - dije sonriendo. La chica estaba atónita.
No paraba de mirarme.Ella iba a hablar. Pero en ese mismo instante Famous llegó diciendo que yo ya me iba.
- Pues nada chicos, espero que os sea leve - le guiñé un ojo a la chica y me fui.
Famous me sonrío y nos fuimos juntos de allí.
Muchas gracias por leerlo, sinceramente no se como irá y si gustará este fanfic, pero lo estoy haciendo con muchísima ilusión y espero que os guste leerlo.
Gracias <3
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blurry Friday nights - albalia
RandomLimpiaré tus heridas, sanaré tus golpes y besaré tus cicatrices.