Los Gemelos y Yo **COMPLETA**

Campamento primera parte

Campamento, meses antes de la fiesta de Halloween...

Hannah

—Hannah, estas lista— pregunta Ethan mientras entra a mi habitación y yo estoy sobre mi maleta, tratando de cerrarla, digo —ven ayúdame a cerrar esto

Aiden entra en mi habitación y dice —¿que te mudaras al bosque? solo es una semana Hannah no un año—

—Que bueno que llegaste, así llevan una maleta cada uno— digo mientras señalo la otra maleta que esta cerca del baño, tomo mi bolso de mano y camino hacia la entrada gritando

—vamos tortugas, perderemos el avión.

Me gana la sonrisa macabra, adoro que los gemelos sean mis esclavos, y me encanta hacerlos enojar, han sido como mis hermanos, son mi familia, Aiden rompió mi corazón y aun así no podría vivir sin el, siempre hemos sido los tres, quizá seria mejor así, por ahora solo quiero pasarla increíble.

Nuestro viaje seria de cinco Horas, iremos a un campamento muero por llegar, toda mi clase estará allí. Los gemelos llevan mi equipaje y yo soy la envidia de todas, se porque no tengo amigas, bueno las porristas son mis amigas, pero se que en el fondo me odian por tener todo el tiempo a los gemelos conmigo.

El avión es inmenso, y mi asiento es el de en medio, Aiden y Ethan están a mi lado.

—no entiendo a las mujeres— dice Aiden viéndome,

—¿de que hablas?— digo apagando mi teléfono

—traes dos maletas, ¿porque necesitan tantas cosas?

—en ese caso, no entiendo a los hombres, viajan una semana entera, y que solo traen dos pantalones, cinco camisas, dos calzoncillos y listo

—¿revisaste mi maleta?— pregunta Aiden

—eres un asco—

Ethan me dice —Nana, creo que Aiden tiene razón, es mucho equipaje

—tu también Ethan

Ethan acomoda su cojín de viaje alrededor de su cuello y yo me coloco los audífonos, se que Aiden verá una película, cierro los ojos un momento y quizá se me sale una que otra frase de la canción, Aiden me quita uno de los audífonos y yo me asusto, lo observo con algo de enojo y me dice —quieres dejar de cantar,—

—quieres dejar de ser un idiota

Me levanto, aveces Aiden puede ser demasiado insoportable, entro en el baño, me veo al espejo, y veo que la puerta se abre, no le puse seguro, digo —está ocupado— pero Aiden entra, y dice

—hola fastidio

Estamos muy cerca, el baño es demasiado angosto, yo digo —¿qué haces? no puedes estar aquí— continuo

—fastidio, crees que puedes decirme idiota todo el tiempo

—sal de aquí Aiden— digo viéndolo a los ojos muy seriamente

Coloca las manos en la pared aprisionándome, esta demasiado cerca,

—estas nerviosa Nana— susurra

Casi nunca me dice así desde que nos volvimos enemigos, ¿porque estoy nerviosa? «me prometí odiarlo» no podía demostrarle lo nerviosa que de verdad estaba

—¿porque lo estaría Aiden?— me acerque a su boca viéndolo a los ojos y arqueando una ceja agregue —te molesta que ya no muera por ti—

El me acerco a su cuerpo con un solo brazo, y sonrió como siempre lo hacia, esa sonrisa retadora que me pone la piel de gallina, —estas segura de eso Hannah—

«Dios»

El tiempo parece avanzar lentamente mientras contengo la respiración, Aiden quiere besarme, reacciono, no puedo besarlo, no quiero, no quiero caer en su lista, Aiden de verdad no me ama, me lo dejo claro,

Empujó el pecho de Aiden y digo —puedes apostarlo idiota— me abro paso y logro salir del baño

Despierto a Ethan y lo obligo a pasarse en medio así tengo lejos de mi a Aiden, me coloco los audífonos de nuevo y me acomodo en el hombro de Ethan, cierro los ojos, siento que Aiden se sienta, pero no abro los ojos, pienso en lo qué pasó, ¿que quiere de mi?, no pienso caer en su juego. Pero si quiere jugar puedo ganar.