smile bitch!

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-Mama lo juro prometo que si me dejas faltar hoy,,,mmmm no se hago lo que quieras pero déjame faltar dios mío!!!

-Luz lo que digas o hagas no va a lograr que yo te deje faltar hoy... 

Mi madre saco un libro pequeño del bolsillo, respiro y recito las siguientes palabras

-"La vida es como un libro abierto; muestra palabras dulce y el que lo lea quedara atrapado con el libro"

-Así que ¿hay que estar de piernas abiertas? .- dijo mi hermana mientras agarraba una manzana y la mordía

-NO! eso no era lo que quería decir,,, no importa que tengan un buen día!!

Había perdido la batalla por lo cual agarre mi longboard me puse mi gorra y decidí enfrentar el maldito primer día de clases. Como siempre me había puesto mis vans de la suerte, un chupín negro roto en la rodilla derecha , una remera blanca y mi camisa escocesa azul y roja que tanto amaba. Como siempre decía si uno esta vestido cómodamente nadie lo molesta. Salí con mi longboard a la calle, Olivia me seguía atrás con su bicicleta.

El colegio nos quedaba dentro de todo cerca a uno 10 minutos. Para ser un pueblo mediano el instituto era gigante así que era muy raro chocar con alguien en los pasillos ya que podías ponerte a bailar breakdance en el medio del pasillo e igual quedaba lugar para que gente pasara tranquila. Tenía lockers por todos lados los cuales la mitad solo eran usados. Una cafetería gigante con grandes vidrio que en verano se abrían para que pudieras comer afuera en el pasto tranquilamente y tenía muchos árboles en los cuales apoyarte  ya que el instituto daba directamente al bosque.

Entre al primer deseando que no pasara nada y que fuera un día normal donde no me caiga ni haga el ridículo. Enganche mi longboard en mi mochila y camine hasta mi locker. Olivia me saludo con la mano y se unio a un grupo donde todas la abrazaban y la saludaban. La salude y ella me devolvió el saludo agachando la cabeza, algunas pensaba que mi hermana le daba vergüenza contarle al mundo que era su hermana. Llegue al locker coloque mi longboard y los cuaderno que iba a utilizar en el año. Me di vuelta para dirigirme a mi primer clase, y ahí estaba caminando en el pasillo como si fuera el único ser del mundo, Melanie.

Melanie, además de ser el ser más detestable del planeta, era la más popular del instinto. Su popularidad se debe a que ella a los 13 años había perdido la virginidad con un chico mayor que ella. El chico solo la había utilizado para completar una apuesta, por lo cual el instituto entero se había enterado lo que había pasado entre ellos dos. Pero lo que más sorprendió no fue eso, si no que cuando Melanie apareció al día siguiente de lo sucedido, con una biblia y un rosario en el cuello. Diciendo que el único que se merecía su amor era DIOS. Así fue como todo el mundo al principio rio, pero después al verla con su pollera corta con tacos y su remera mostrando escote , lograron que llegara a la popularidad. Negándose a los hombres pero mostrando todo su cuerpo y no dejando nada a la imaginación. Claramente es como mostrarle un pedazo de carne a tu perro y luego comértela sin dejarlo saborear ni un bocado.

Las clases fueron tranquilas primero matemática y después historia. No era buena en matemática pero igual disfrutaba de pensar y superarme a mi misma, y historia amaba el tema que estábamos viendo, por lo cual habían sido “divertidas”. Lo que era difícil era ahora, el tema cafetería donde me acordaba que tenía que relacionarme con gente. Decidí que hoy no era un buen día para relacionarme a lo que decidí salir afuera y ponerme debajo de un árbol a leer mientras comía una manzana, ya que el primer día de clases había quitado todas mis ganas de  comer. El libro que había elegido  estaba tan bueno que no sentí cuando un cuerpo con forma de elefante se tiro arriba mío gritando :”la tengo, la tengo, es mía”

 -HEY CUIDADO SER HUMANO ABAJO TUYO- grite con todas mis fuerzas mientras  trataba de quitarlo de arriba mio

 -Hey no te vi- dijo el chico mientras se sacudía – soy nuevo bah no tanto vivo aquí hace unos meses pero por suerte llegue en vacaciones mi nombre es Martin pero todos me dicen Tin

-Mmm,,, okey Luz mucho gusto- dije, levante la mirada para mirar al idiota a la cara sus ojos color verde fueron lo primero que capto mi atención luego de su cabello castaño claro

-¿Luz como la luz? – dijo sonriendo

 -Valla que chiste idiota de tu parte lamento que no allá nadie para reírse, pero si te hace sentir mejor ¿quieres que me ría?- dije mirando, lamentablemente es idiota, dios del feng shui de mi madre ¿porque todos los lindos son idiotas?

-Era un chiste para calmar las aguas- dijo sonriendo y rascándose la cabeza

 Me levante decidida a terminar la conversación, agarre mi mochila y comencé a caminar

-Te vi entrar en la longboard hoy- dijo gritando para que lo oyera

-Ah mira que bueno…

Sentía como corría atrás mío.

-Hey escucha la cosa es que te estoy hablando, porque la chica esa – dijo mientras señalaba a Melanie- me dijo que si lograba que sonrieras saldría conmigo…

Me pare en seco y lo mire a los ojos.

-¿Quieres que sonría para salir con Melanie?

-Sí, ¿qué locura no?

-Si me prometes que no me vas a volver hablar, prometo sonreír

-Trato- dijo estirando la mano, a lo cual lo mire con cara de asco

Me largue a sonreír exageradamente apretando mi panza, mire a Melanie que sonreía con la biblia abrazada con cara de perra, y seguí sonriendo mirándola mientras levantaba mi dedo del medio en su dirección.

-Jajaja para ser callada tienes actitud – dijo mientras me miraba  

-Me prometiste que no me hablarías más cumple tu promesa- dije alejándome de el 

El primer día había terminado, por suerte. Me dirigí al locker a buscar mi longboard. Al abrir el locker un papel blanco doblado, era una nota :

“como dijiste que no te podía hablar, decidí escribirte, al final no Salí con Melanie, porque me invito a la iglesia, si te interesa te dejo mi numero . TIN”

Arrugue la nota y la tire a la basura. Maldito idiota que no me moleste, bastantes problemas me había metido y tenía un chichon por su caída libre arriba mío.

NO TAN POPULARDonde viven las historias. Descúbrelo ahora