Calaveras: la vida está muerta

El alumno insatisfecho

-"En el monte de Agua Fría yacen los cimientos de un pueblo antiguo, una colectiva enfocada en los ancestros. Aquellos individuos obtuvieron habilidades sobrenaturales al aspirar cenizas de los dioses caídos en la Guerra del Hueso. Se dice, que al subir a aquel monte, se puede sentir una energía negativa tan potente que puede provocar desmayos, migraña, dolores intensos en todo el cuerpo, lágrimas de sangre y en algunos casos, la muerte" - Elías terminó de leer su investigación ante la clase.

Sorprendentemente, sus compañeros disfrutaron la lectura, aplaudieron y  recibió algunas palmadas en la espalda al momento de regresar a su  mesabanco. Extasiado, Elías agradeció y bromeó con  una reverencia hacia su público. El Sr. Gutiérrez suspiró y se giró hacia la lista para escribir su calificación.

-Muy bien hecho Montenegro - dijo desganado- tienes un 9.

-¿9?- preguntó Elías con confusión.- entiendo su estado de ánimo Sr. Gutierrez pero, es una realidad que me esforcé demasiado para entregar una investigación impecable de 5 cuartillas y, admito que al momento de ser seleccionado entre los tres mejores, supuse que la calificación sería un... 10.

Las reacciones fueron divididas: algunos suspiraron irritados por el comportamiento del sabelotodo de la clase, otros lo apoyaron asintiendo con  la cabeza mientras que el  Sr. Gutiérrez se incorporó en su silla color café y contestó:

-A pesar de la variedad de información presentada, tus fuentes no son del todo confiables. Fuiste seleccionado por haber realizado un trabajo sobre algo ficticio, para así cumplir con los tres géneros literarios que estamos estudiando en este parcial. Su 9 no es señal de fracaso, es señal de que fue casi perfecto.- Terminó diciendo con un tono de altanería.

-¿Entonces, está diciendo que se necesitan fuentes confiables para avalar la ficción? - preguntó Elías  con arrogancia - lo siento Sr. Gutiérrez pero no lo logro encontrar la lógica en su juicio. Y cabe recalcar que mi investigación no es ficción, es historia.

Ante esa última afirmación, se escucharon risas en el recinto. A pesar de la satisfacción mostrada anteriormente por sus compañeros, la realidad era que aquella investigación sonaba muy bien para ser una película sobrenatural, no una historia de origen de la ciudad de Montenegro.

-9 será.- contestó sin problemas el Sr. Gutiérrez y en seguida sonó la campana rompiendo así toda tensión.

Fuera de  aquella discusión, nadie notó el descontento de Ernesto Caverna quien, sentado en el último asiento de la tercera fila, apretaba su mandíbula y miraba con desaprobación aquella blasfemia de investigación que en realidad hablaba sobre su familia. Después de haber sentido tanta  impotencia durante la lectura de Elías, imaginó cómo sería si sus poderes siguieran fuertes como antes, podría robar las almas de toda un escuela completa y mandarlas al Purgatorio. Por un momento, sintió la energía correr por sus venas, cosa que calmó su enojo y apartó su fantasía alocada.

Ernesto Caverna provenía de un linaje oscuro relacionado con las Calaveras de la Era Perdida. Por miles de años, sus descendientes trabajaron de mano con la muerte, robando almas de los justos y mandándolas a enfrentar sus peores pesadillas. No era un trabajo bueno, como se podrán imaginar, pero era lo que las Calaveras debían de hacer para no sufrir la Muerte en todo su esplendor. Después de que la Muerte fuera despojada por los Leales elementos, las Calaveras se vieron en una situación selectiva, o morir eternamente en el infierno o renunciar a sus habilidades sobrenaturales para tener una vida normal en el mundo mortal. La mayoría de las Calaveras renunciaron, gracias al acuerdo con los Leales, obtuvieron un permiso para entrar a