S E I S

210 14 3
                                    

Ha pasado justamente una semana desde aquel encuentro entre Antonella y Finn, las cosas mejoraron por así decirlo, y se han estado entendiendo mejor, y...volvieron a ir a su lugar.
Aquella vez luego de terminar de tener relaciones, ambos estaban  sonrojados y la vergüenza consumía sus cuerpos desnudos, la chica admiraba cada detalle de el rostro de Finn, sus infinitas pecas que parecen unas chispas, sus ojos color negro hipnotizantes, la nube negra esponjosa que tenía como cabello y su alto y flaco cuerpo color blanco crema.Y él bueno, él la veía a ella como si dé una obra de arte se tratase, amaba esos ojos color verdes con azul, eran adictivos de mirar, su cabello castallo que parecía una cascada y esos labios que el amaba probar y lo mejor era que lo podia hacer cada vez que quisiese, ellos son como un tipo de rompecabezas, están perfectamente hechos el uno para el otro, como "perfectamente equivocados", ¿no?
En este momento ella se encuentra feliz por estar pasando la tarde con sus amigos, ya qué hace tanto tiempo no lo hacían, se encontraban recorriendo las calles de los Ángeles, jugueteando un poco y haciendo algunas tonterías como hace ya tiempo no lo hacían.

Finn se detuvo y de repente tomó a Antonella de la cintura y la besó, eso la tomo por sorpresa pero le siguió el beso, olvidándose de todo a su alrededor, pareciera que las cosas volvían a ser como antes.

--¡mierda chicos!, ¡eso debería de ser ilegal en las calles!--gritó jack volteándo a verlos.

Los chicos se separaron inmediatamente y soltando una risa.

Estaban algo cansados a lo que decidieron parar en una heladería.

Cada uno estaba eligiendo el sabor que quería.

--Finn, yo quiero el mío de....--dijo la chica pero este la interrumpió.

--Fresa, lo sé--respondió Finn orgulloso, Antonella creía que no podía estar más feliz, él lo había recordado después de tanto tiempo.

Los chicos pasaron una tarde increíble, al rato cada uno se fue a su casa, pero Antonella se fue a la de Finn habían acordado hacer un maratón de 13 reasons why, recompensando todo ese tiempo perdido sin verla.

La chica se encontraba en los brazos de Finn, con su cabeza en su pecho apreciando oír los latidos de su corazón, así quería estar siempre entre sus brazos.

--Como en los viejos tiempos, Finnie.--susurro está.

--Como en los viejos tiempos, fresa.--aseguro este.

Todo iba bien, pero cuando iban por la segunda temporada, ella notó que Finn no dejaba su celular y este sonaba con muchos mensajes de texto, robandole algunas sonrisas a esté, eso a ella le molesto, porqué, el poco tiempo que él lograba tener libre ella lo quería aprovechar con él al maximo, ya que Finn ha estado muy ocupado últimamente, casi ya no asistia a la escuela.
Ella se armó de valor para hablarle, digo valor, porqué seguramente pelearían y el lindo momento habría acabado.

--Finn, te quiero aquí conmigo.-dijo volteando a verlo.

--Bueno, y ¿donde más estoy?--la actitud de Finn había cambiado repentinamente, ¡auch!

--Estas solamente con el teléfono, creí que pasaríamos un rato para nosotros--se rasco la cien mientras apretaba los labios.

--No vayas a comenzar, Antonella.--dijo este antipático rodando los ojos.

--Yo no estoy comenzando nada, Finn, sólo creí que veríamos nuestra serie después de tanto tiempo.--ella trato de sonar pasiva pero por dentro estaba molesta por la actitud de Finn.

--Antonella, no es nuestra serie, es de Jay Asher--odiaba cuando Finn se ponía asi lograba herirla porqué ella sabía a lo que se refería con lo de "nuestra" serie.

Antonella dio un suspiro fustrado.

--Así es todo contigo ahora--soltó está.

--Bueno, pues todo contigo se ha vuelto un drama--escupió él.

Ella abrió un poco los ojos en sorpresa.

--¡Si!, ¡bien, ya estoy harto!, ¡te has vuelto una dramática por todo!--exclamo este elevando sus manos.

Ella respiraba hondo para no explotar y decirle a Finn cosas que luego se arrepentiria, aunque el muy idiota se lo mereciera.
Es un hecho Finn es bipolar.

--¡Cállate, Finn, basta!--está tomo su bolso dispuesta a irse, no entendía porqué Finn la heria así.

--¡En eso te has convertido, en una maldita reina de el drama!,¡pareces Taylor Swift!--elevó el tono de voz pero inmediatamente cerró su boca en arrepentimiento.
-yo.....

La chica salió corriendo al baño y se cerró de un portazo con llave, se dejó caer lentamente en la puerta, tapó su boca con su mano para que Finn no la escuchará llorar.

Finn tocó la puerta con las yemas de sus dedos unos cuantos segundos.

--Déjame en paz, Finn.--dijo en un tono de voz bajo pero audible.

--Lo siento, fresita, en verdad lo siento, no debí decirte eso--se disculpó.

--No importa, Finn, herirme es lo qué te sale mejor, ¿no?--escupió ella de manera seca.

Auch.

--¿Sabes qué?, haz lo que quieras, me voy a la fiesta de Lilia, si decides irte apaga el televisor y cierra bien la puerta--fue lo único que dijo antes de irse de la casa de un portazo.

Auch, esa actitud si que dolió, Finn no era una persona de estar rogando y cuando lo hacia no lo hacia por mucho tiempo, a excepción de aquella vez.

Antonella limpio rápido las lágrimas que caían en sus mejillas y se miro en el espejo.

--¿en qué se ha convertido todo esto?--fue lo último que dijo antes de salir lo antes posible de esa casa.

___________________

¡bajen las antorchas! He vuelto, me disculpo por la ausencia he estado muy enferma esta semana por eso me desapareci, siento tanto que odien a esté Finn, pero prometo que lo volveran a amar tanto como a el Finn de antes. 🍓🍉

No promises||Finn Wolfhard.||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora