C U A T R O

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La chica beso a Finn como si el mundo se acabase en ese mismo instante, lo que ella sentía era miedo, miedo de volver a tener que esperar tanto tiempo para volver a besar esos labios.

--eres mía.--susurro Finn en sus labios, los dragones dieron una vuelta y ella se sentía de nuevo llena, como si todo eso fuese una mentira o un sueño.

--soy tuya, Finn.-eso le dio seguridad a Finn, no es como si él no confiara en ella, si, si lo hacía pero él temia que ella renunciase a él por cómo él la trataba, aveces no era intensionalmente, sólo que el estrés puede hacer gran parte de su trabajo.

--vámonos.--Finn tomó la mano de Antonella y la saco de la escuela, ella siquiera preguntó pues ella iba con él hasta el fin de el mundo, confiaba en él más de lo que debía, aún después de que él se besara con otra chica y a las semanas le pidiera ser su novia, ella confiaba en él, pues había visto una parte de Finn que sólo él le permitió ver.

En el camino cada uno iba perdido en sus pensamientos, hasta que ella rompió el silencio.

--te extrañe, Finnie.-este sonrió pues ella le había puesto ese apodo desde hace tiempo.

--y yo a ti fresita.-el corazón de la chica empezó a latir con fuerza, ¿cuánto tiempo había pasado que no la llamaba así?, mucho tiempo.
--sólo que he tenido unos días de mierda y estresados, perdón por alejarme.- este tomo una de las manos de Antonella y la entrelazo con la de él.

-Finn, tú más que nadie sabé que puedes confiar en mi, estoy para apoyarte siempre, soy tu novia, pero más que eso tu mejor amiga.-esta dio un apretón a su mano para luego acariciarla.

-lo sé, tienes razón, y te quiero tanto por eso.-ella deseaba oír un te amo, Finn tenía mucho tiempo que no se lo decía pero él la amaba, sólo que desde un tiempo para acá no de la manera correcta.

Finn llevo a Antonella a un puesto de hamburguesas, ese que antes solían frecuentar porque allí estaba su hamburguesa favorita, extra queso con doble tocino y pollo.

Finn ordenó para luego sentarse junto con su novia.

El pedido llego y ambos se miraron cómplices pues era su hamburguesa preferida, ambos habían dejado de hacer tantas cosas juntos, como andar en bici en el atardecer, ir a su lugar, cocinar juntos, ver su serie favorita, el día que Antonella se enteró de que Finn había besado a otra chica ella sintió que lo perdía, pero ahora es como si hubiese perdido a su Finn y lo hubieran cambiado por otro, por eso ella disfrutaba tanto de ese momento junto a él, tenía miedo de que esto se fuera a desvanecer como si fuese un sueño.

--¿sabes?, a Sandy hoy le pegaron un chicle al pelo, se lo tenía tan merecido por engreída.-dijo esta soltando una risa.

Pero jamás imagino que Finn fuese a reaccionar como ahora, al contrario, pensó que le iba a dar risa.

--Y, ¿eso qué tiene de gracioso? Explicame- Su expresión se volvió vacía  mientras inspeccionó cada detalle de el rostro de la chica dejando su hamburguesa en la bandeja.

--Pero...¿Qué? ¿Y a ti que mosco te ha picado, Finn?- Su sistema se empezó a llenar de Rabia pues, ¿Desde cuándo Sandy le importaba? O es que acaso ya le gustaba, se prometió interiormente conservar la calma pues solo estaba haciendo suposiciones.

--¿A mi? Nada, solo qué no le veo la gracia a qué se rían de ella--La miraba de una manera tan fría que era espeluznante.

--Pues a la defensa ella lo hace con todos, todos los días y a toda hora, de lo tenia merecido por engreída-- Dijo segura,Le dio una bocanada a su hamburguesa deleitandose.

--No me importa, igual.

Bien, eso era suficiente.

--Y bueno Finn, ¿Qué más da? O es qué ahora te importa Sandy.

--¿Y si me importase qué? Tal vez podría ser su amigo.

Las mejillas de Antonella estaban Rojas por lo furiosa qué estaba, ¡Esto era el colmo? ¿Que....qué se había atrevido a decir? ¿Acaso le estaba restregando en su cara que Sandy le gustaba? ¿Como podría ser siquiera amigo de la chica que la ha molestado por tanto tiempo.

--Ah, qué bueno, pues debiste traerla a ella en vez de a mi.--en este punto ya su tono había subido un poco.

--No vayas a empezar--Este tenia su ceño fruncido.

--¿empezar qué, eh?

--¡Empezar esto! ¡No entiendes nunca las cosas, Jesús!--En este punto se encontraba gritándole.

Al instante se arrepintió al ver la cara de su novia.

Un nudo se había apoderado de la garganta de la chica y salió corriendo de ese lugar lo más rápido que pudo, Finn la llamo pero ella no iba a volver.

Deseó qué le pasara como en las películas de romance qué solía ver con Sophia, qué Finn la siguiese y le pidiera disculpas, qué no la dejara ir.

Pero eso no pasó.

Ahora qué se lo preguntaba, ¿Seria Finn capaz de luchar por ella?

Y pensó que no, que no lo sería porqué muchas veces se lo había demostrado, Él se había convertido en un mal novio, uno muy malo.

Cuando llegó a su cara recibió un mensaje de texto de Finn.

Finnie❤.

El: Lo siento, soy un idiota.

Y vaya qué lo eres.--pensó.

Ella no respondió, simplemente ya la situación la tenía cansada, siempre es lo mismo, y para colmo estaban las fans, qué siempre inventaban cosas de ella, o se tenía que aguantar el shipp de millie y Finn a pesar de que solo fuesen amigos.

No promises||Finn Wolfhard.||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora