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Los días pasaban y Felix se sentía cada vez más desanimado, ansioso, perdido.Sentía muchas emociones y pensó instintivamente en la noche en la que estuvo con Hyunjin.

Hyunjin. Tal vez, esa era la causa de su tristeza. Porque, como pensó, no lo volvió a encontrar.

Extrañaba a Hyunjin. De sólo pensar en él, en sus labios carnosos, su pequeño lunar debajo de su ojo y su cuerpo contra el suyo un sonrojo se esparcía por sus mejillas y su corazón latía desbocado.

Seo Changbin, examinaba a Felix con su ceño fruncido. Sabía, o imaginaba, en lo que el menor estaba pensando.

Felix le había contado absolutamente todo, sin obviar ningún detalle, excepto algunas cosas demasiado íntimas que nadie podía saber. Pero le molestaba saber que no obtendría la atención del menor hasta que despertara de su pequeño trance.

Se preocupaba por Felix, Seo decía que era como su hermanito y cualquier cosa que afectara al menor, le afectaba a él también. Sabía que, probablemente, el tal Hyunjin se había olvidado de Lee, que para él era una noche sin nada más de por medio y ver a Felix tan embobado, le dolía.

─Hyung, debo irme. -el menor interrumpió los pensamientos de Seo. Se acercó a él y depositó un suave beso en su mejilla-. Después hablamos.

Y Felix salió del estudio de 3racha.

Estaba muy feliz por sus tres mejores amigos. Habían logrado cumplir sus sueños, dedicarse a la música. Y eso no podía dejar de resultarle reconfortante y demasiado perfecto. Sabía que Bang Chan, Han Jisung y Seo Changbin se habían esforzado al máximo para poder estar en donde estaban. Felix sabía de todo el talento que tenían aquellos tres y le parecía ilogico como alguien como ellos se acercarían a alguien sin futuro ni talento como él.

Una mueca de disgusto se colocó en su cara. Otra vez pensaba negativamente de él mismo.

Podría decirse que Felix intentaba a más no poder dejar de ser un chico tan inseguro, pero cada paso que daba luego retrocedía cinco y era un ciclo que no se terminaba jamás.

Si hubiesen podido borrar memorias, Felix no lo hubiera pensando ni un segundo y se haría un lavado de cerebro para borrar absolutamente todo lo que le hacía mal. Pero esas cosas no existen y Felix tiene que luchar contra esos grandes miedos y pesos en su cuerpo y mente.

Quiere aprender a ser mejor para él y para todos, quiere poder elegir que hacer con su vida, quiere sentir los brazos de Hyunjin en su cintura, quiere poder amarse a él mismo, quiere ser alguien en el mundo.

Las lágrimas no tardaron en salir. Necesitaba un abrazo. Sin pensarlo demasiado, vuelve al gran edificio de 3racha y se adentra en el estudio, donde sus tres amigos estan practicando una de sus últimas canciones. Pero al ver a Felix en ese estado, corren a su ayuda y le dan un abrazo tan fuerte que el menor siente menos aire que antes.

─Perdón... -un hipido sale de su garganta- por... -otro.- molestar e interrumpirlos.

─ Lixie, nunca molestás. -respondió Han, acariciando cuidadosamente sus cabellos. Felix suele ser muy frágil, pero ellos siempre estarán ahi para él-. Ya te dijimos que siempre que nos necesites acá estamos.

─Si, pequitas. -responden al únisono Changbin y Bang. Ambos sonrien.

Consintieron a Felix un rato más, entre mimos y besos. Y al final, practicaron "Zone" y se la dedicaron al menor. Que los aplaudía complacido y orgulloso de sus mayores.

just one nightDonde viven las historias. Descúbrelo ahora