Bob Y Alay tienen un hijo llamado Branch, que resulta ser el príncipe de los lobos. En la celebración de su nacimiento un malvado brujo le maldice diciendo que al cumplir los 24 años, Branch se convertirá en otro tipo de animal y que no podrá ver a...
Poppy, al escuchar a su padre decir su nombre, dejó de aullar y corrió hacia él. No lo abrazó porque temía que su padre se asustase otra vez. Peppy se levantó, se acercó a su hija y le empezó a observar los ojos. Eran los dulces ojos de una troll optimista y a la vez sensible.
Peppy: ¡Poppy! ¡Estás bien!
El troll abrazó a su hija felizmente mientras que los demás trolls del lugar, empezaban a salir de sus escondites. En ese momento, a Poppy le dio un tirón en la barriga. Su padre se preocupó y ella hizo una señal con la cabeza que no era nada. En ese momento, Branch intervino y frotó su cabeza con la de Poppy. Ella, le empezó a lamer la mejilla.
Peppy: Ahora lo entiendo. Sois pareja, tu debes de ser el lobo que cantó aquella canción en el concierto y el que salvó a Keith de que lo atacaran.
Branch asintió con la cabeza. Peppy se acercó a él y Branch asustado retrocedió un paso. El troll abrazó al lobo felizmente por cuidar a su hija durante todo este tiempo. Poppy se acercó a Branch y lo abrazó. En eso, escucharon un aullido que los atemorizó a todos. No era un aullido normal, era el aullido del mismísimo diablo. Branch se puso delante de todos los trolls y de Poppy, protegiéndolos para que no les pasase nada. Era el lobo más fuerte del lugar, y fuera lo que fuera protegería a todos. El aullido paró y todos se tranquilizaron, pero no por mucho tiempo, pues un lobo vino de repente, arrasando con todo a su paso. No era un lobo normal, no. Era el mismísimo demonio.
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Branch empezó a gruñir fuertemente mientras que el otro lobo, gruñía sacando enormes colmillos cubiertos de fuego y sangre. Branch se abalanzó sobre él mientras este también hacía lo mismo. Los dos chocaron cabeza con cabeza. En ese instante, Branch levantó su zarpa arañando al demonio en la cara. No le afectó en absoluto puesto que su cuerpo estaba compuesto por roca, fuego y lava. Los dos empezaron a arañarse, morderse y hasta arrancarles la piel con arañazos. Poppy y los demás, miraban la escena preocupados mientras ellos dos peleaban sin cesar. Branch iba ganando poco a poco hasta que el rival, le empezó a morder el cuello hasta asfixiarlo completamente o que muriera desangrado. Poppy no podía soportarlo. El demonio tumbó a Branch. Él estaba hecho un desastre, no podía luchar contra él y mucho menos, moverse. Cuando el demonio estuvo a punto de clavar le los colmillos a Branch, Poppy empujó a Branch, siendo así que fuera ella la agredida esta vez. Branch al ver eso, se armó de fuerza y de valor y con todas sus fuerzas, mordió a su rival en el cuello haciendo que poco a poco se asfixiara. Al final, el demonio empezó a perder sangre, lava, fuego... Hasta que Branch acabó con él. El diablo se fue deshaciendo poco a poco hasta que el viento se llevó sus cenizas. En eso, débilmente fue hacia Poppy. Ella estaba tumbada en el suelo con marcas de colmillos en su cuello y un poco de sangre. Branch se acercó a ella y empezó a abrazarla y a lamerle la herida mientras lloraba.
En ese momento, el cuerpo de Poppy fue desvaneciéndose poco a poco hasta que recuperó su forma de troll. Branch no prestó atención puesto que lloraba mientras él estaba acurrucado a su lado.
Poppy: ......Branch.......
Él al oír su nombre, abrió los ojos y vio a Poppy en su forma normal y viva. Cuando Branch la vio, también vio que sus patas eran manos azules de cuatro dedos. Tenía chaleco y pantalón. Y su pelo violeta resplandecía mientras que miraba para arriba. Los dos se convirtieron en trolls otra vez. Pero esta vez, permanentemente. Los dos se levantaron y se besaron. Todos empezaron a aplaudir de alegría mientras que Peppy se acercó corriendo hacia Poppy.
Poppy: ¡Papá!
Peppy: Mi niña... Estás bien.... Gracias por salvarla Branch, a todos....
Branch: No hay de qué señor...
En ese momento, Peppy sacó dos coronas de su pelo y se las puso a Poppy y a Branch.
Peppy: *levantando las manos de los dos* ¡¡Nuestros nuevos reyes!!
Branch y Poppy se agarraron de las manos mientras sonreían a todos los trolls.
Branch: ¿Sabes, Poppy? Ahora me doy cuenta de que este es mi verdadero hogar porque aquí tengo a mi familia.
Poppy: Bienvenido a Villa Troll. *lo besa*
Y así fue como los trolls y lobos vivieron juntos y felices por siempre.
Rinbow: ¿Esa historia es de verdad, papá?
Éliot: Claro que sí mi amor, ¿por qué no se lo preguntas a los abuelos?
Rainbow: ¡Sí! ¡Tengo muchas cosas que preguntarle al abuelo Branch!
