¿realmente te encuentras a salvo?

Capítulo 18

 

¡Sara! Grite alarmante ante lo que parecía una situación desesperante por cómo se encontraba mi hermana

Alice…. Dijo Sara y tardo un segundo en recuperar su voz para continuar con lo que tenía que decirme – tienes que hacer lo que él te diga- dijo Sara- ¿lo que él diga?- dije en confunción ¿Quién es el, Sara? … no escuche más a Sara - ¡Sara! – Grite al teléfono desesperada – dime- volví a decir ya con lágrimas en los ojos, no lloraras, Alice, me reprendí a mí misma

Y volvió ese vacío sordo en el que no había nada que analizar, pero no iba a colgar el teléfono, no  mientras del otro lado aun siguiera en línea

Tardaron unos minutos así, aunque para mi fueron siglos de espera, hasta que se escuchó un sonido pesado, como si hubiesen lanzado algo, talvez hallan tirado algo, no sabía con exactitud

-Hola preciosa, nos volvemos a comunicar, la última vez te dije que dejaras las cosas como estabas o alguien saldría lastimado, como vez… cumplo con lo que digo – era la misma voz, esa voz cargada de ira, venganza, oscura llena de secretos macabros, imposible de comprender del todo

¿Quién eres?- pregunte, tratando de que mi voz sonara serena, pero creo que me traiciono como siempre

-No importa quién soy, lo que importa es lo que tú harás

- ¿hare? – dije arrugando la frente –

- si, como hiciste caso omiso a lo que te propuse, ahora pagaras las consecuencia, veras, tengo aquí a tu hermana, y si no la salvas – se empezó a reír, le complacía hacer esto- ella morirá, podrá ser una muerte rápida  o… lenta, como me gustan, que sean dolorosas, escuchar sus gritos de desesperación, tendrás exactamente 30 días, lo suficiente para dar con ella, te dejare pistas, y cada vez que falles tu hermana sufrirá, si fallas en todas, muere si llegas puede ser que la salves…

Y colgó, ¿pistas? … ¿Cuándo empezaría esto? … ¿Cómo reaccionaría mi mama al no ver a su hija?

¿Sufrirá?  Tenía un nudo en la garganta, pero no eran ganas de llorar, tenía miedo, miedo a no dar con todo, a que ella muera gracias a mí, a que sufra, me acosté en la cama, aún tenía el dolor de cabeza, un poco más fuerte ahora, me pare recogí algunas cosas, bote lo que fuera necesario y trate de ordenar todo, tome la toalla y me duche, una vez dentro de la ducha, mientras que el agua recorría mi cuerpo estaba más relajada, más serena, con la cabeza despejada, había sido un día terrible, lo de Peter, mi habitación y ahora mi hermana, pensé en llamar a la policía, pero descarte de inmediato esa idea, cuando el supiera que la policía estaba detrás de esto mataría sin dudas a Sara escaparía y hasta me mataría a mí, y capaz.. Luego a mi madre… me horrorice al pensar en esa idea, mi madre no regresaría hasta la mañana, así que me tenía que quedar sola en la casa, se me iba complicar dormir

 

Al terminar la ducha, me cambie por algo cómodo y baje a tomarme la pastilla, opte por un tranquilizante, eso me ayudaría, lo tome y me acosté, no fue mucho lo que dure despierta mirando el techo hasta hundirme en un sueño profundo

 

Era un lugar oscuro, ciego por completo, olía a grasa, a sudor, a cosas guardadas, por alguna razón estaba agitada, me toque la frente y la tenía húmeda, me acerque la mano a la nariz para ver que era esa sustancia liquida, era un olor a oxido, era sangre, mi sangre, estaba mareada, escuche los gritos de Sara, grite su nombre al escucharla- Alice ayúdame- Gritaba Sara desesperada- corría pero era como un laberinto sin salida, siempre quedaba en el mismo lugar, ¿Sara dónde estás?- grite nuevamente desesperada, pero mi hermana seguía repitiendo la misma frase esta vez era como un murmullo, por fin había encontrado un habitación de la cual desprendía mucha luz, me tape un poco los ojos para evitar la intensidad de ella, pero de un momento a otro se escuchó un grito sofocante y estaba empapada de sangre, yo estaba empapada de sangre de Sara, de pronto todo se oscureció

 

 

Me incorpore de la cama de un salto, el corazón me latía demasiado rápido, como si se me fuera a salir, estaba sudando, me puse la mano en la frente y suspire, agradecí de que solo allá sido un terrible sueño, mire la hora, 4:40 Am, trague saliva, tratando de recuperar mi estado normal, después de unos minutos me encontraba mejor, me acosté de nuevo, me puse de medio lado y cerré los ojos tratando de recuperar el sueño pero fue imposible