Juliette

Capítulo 13: Buenos momentos

***

-A ver, Biociencia, Fisiología II y Organismos básicos-nombro señalando los libros y los entrego a la señora Rossie quien me sonríe

-Siempre puntual, Julie. Conociéndote, creo que eres la única a la que le dejaría llevarse la sección entera de medicina con los ojos cerrados-dice la amable señora arreglando sus lentes

-Muchas gracias, señora Rossie. Iré a estudiar un poco, recuerde que si necesita algo de ayuda puede pedírmela-hablo con tranquilidad y ella asiente sonriendo. Creo que quizás es la mujer más amable que he conocido. Tomo asiento en una de las mesas junto a la pared y saco mi cuaderno de estudio para poder adelantar un poco y trato arduamente de concentrarme, bajo la mirada a mi cuaderno y leo cada línea con impresionante atención. Un movimiento en frente de mi hace que pierda el hilo del estudio una hora después y levanto la mirada, instantánea e involuntariamente sonrío al ver que se trata de Daniel sentándose frente a mí con un par de cafés como ya se le ha hecho costumbre

-Quedarás en quiebra por mi culpa- digo sonriente tomando uno de ellos y él se encoge de hombros

-Pero lo haré complaciendo a la chica más bella de la facultad-el color rojo recorre mi rostro y quiero palmear mi frente por su habilidad de causar ese efecto en mí. E incluso hace que las cosas que dice parezcan ciertas aunque no sean así

¿Yo? ¿Bella? Creo que realmente alguien mezcló algo extraño en su almuerzo

-¿Qué haces? Parecías muy concentrada- curioso adopta una posición cómoda

-Quería adelantar algo de material, asique aproveché el tiempo libre para estudiar un poco –explico dando un sorbo a mi cappuccino, me hacía falta

-Y vine yo a interrumpir la paz-bromea con sorna y nos reímos –Entiendo, he pasado por eso. Por lo cual cuando te vi aquí, creí que no te caería mal algo de cafeína-expresa

-Jamás te equivocas, nunca me vendrá mal algo de cafeína-afirmo

-¿Hasta qué hora trabajaste anoche? Pareces cansada-cuestiona inclinándose para pasar sus dedos por mis ojeras y me aparto

-Hasta bien entrada la madrugada, no necesito que me lo recuerdes-digo sin muchas ganas de hablar del trabajo. Ayer hubo un evento y todo el personal caminaba como loco, de aquí para allá, de allá para acá, limpiando platos, sirviendo, tomando órdenes y llevando copas

-¿Al menos pudiste dormir algo luego?-pregunta poco complacido

-¿Una hora y quince minutos valen?-inquiero de regreso con una mueca y niega

-¿Quieres que vayamos al departamento y así puedes descansar un poco?- asiento con una ligera sonrisa

-Eso estaría bien-afirmo y me ayuda a recoger mis cosas para salir de la biblioteca, al cruzar la puerta atisbo un guiño por parte de Rossie y solo me río para continuar nuestro camino hasta su auto

Ya han pasado un par de semanas desde la fiesta y todo va genial, al principio tenía algo de miedo de iniciar una relación con Daniel, pero luego me di cuenta de que sería mejor intentarlo a arrepentirme por no haberme arriesgado. Las peleas con mi padre se han reducido a insultos y palabras hirientes, pero gracias a Dios no ha vuelto a ponerme un dedo encima, en cuanto al trabajo estoy algo falta de dinero por lo cual he requerido hacer turnos en los extenuantes eventos que realiza el restaurante cada vez que alguien lo reserva, la universidad ha estado algo fuerte debido a la cantidad de trabajos, asignaciones y proyectos que nos han mandado a hacer, pero he sobrevivido a todos ellos, y por último; las cosas con Daniel no podían estar mejor, continuábamos conociéndonos, yo sé ahora mucho más de él y viceversa, pasamos más tiempo juntos y nos agrada salir con Cath a su parque favorito o ir a tomar algo después de la facultad en nuestros ratos libres, se ha estado empezando a acostumbrar a buscarme en las mañanas casi todos los días, a excepción de los que pido que no lo haga, como hoy por ejemplo, debido a que tendría mi primera clase un poco más tarde y quería descansar al menos una hora antes de comenzar la jornada universitaria del día.