Porque me enamoré de ti

Día a Día. Juntos Para siempre.

Te conocí a principios de Junio, cuando íbamos a la piscina, y comenzábamos a hablar por Twitter, por esos mensajes directos. Y créeme fue la casualidad más bonita que he encontrado en mi vida, la más especial, y la que estaré con ella toda la vida. Aquel día en el que según tú dijiste <<He perdido el autobús por tu culpa>> fue el inicio de nuestra historia, el comienzo de una historia sin final. ¿Te acuerdas? Porque yo voy a acordarme todos los días de mi vida. Fue cuando mis ojos coincidieron con los tuyos, pardos y brillantes, al igual que esa sonrisa que cruza tu rostro cada vez que me ves, iluminaria de mi vida, de mi camino junto a ti. Esa sonrisa que tengo en mi mente cada vez que me despierto y abro los ojos cada mañana al salir el sol, o cada vez que te veo por la Cam, que aunque nos separe cierta distancia, nos seguimos queriendo. La vida nos ha puesto en el camino para seguir juntos, el destino nos ha unido, y lo que nos ha unido, no nos separe jamás. Me acuerdo cada mañana de tu rostro, brillante, hermoso, y mi corazón late a mil por hora, deseando verte, deseando escuchar tu voz. Si fueras una canción, Caricias En Tu Espalda, si fueras un personaje de cuento, La Chica Perfecta de una novela, si fueras perfume, la fragancia de las rosas nada más salir el alba. 

Los ojos son tu luz; la mirada más hermosa;  porque yo veo en ella a la mejor de los ángeles del cielo. Una estrella se ha posado en mi vida, la estrella más hermosa de mi corazón. Días pasan y cada minuto pienso en ti. Porque eres la estrella que hace que mi vida tenga sentido. Ojos, pardos y brillantes, fiel del destino, que hace verme reflejado en ti.  Palabras, caricias, abrazos, besos, todos un conglomerado de sentimientos correspondidos. Juntos, felices, unidos en un solo corazón. Destino que nos ha unido para que estrella y ángel se fusionen en un solo universo, el universo del amor. Ese sentimiento del que hablan cuando sientes que tu estomago está lleno de sentimientos, que son mariposas en el estomago

Si fueras una estación, invierno, así me pedirías que te abrace hasta acabar en calor. Si fueras una colonia, la fragancía de las rosas nada más despertarse el sol. Si fueras un color, rojo, como roja es la sangre que corre por mis venas porque nacen y acaban en mi corazón, en el corazón que te entrego cada noche, cada instante. En cada palabra hay un trozo de mi corazón..

Juntos para siempre. Te quiero Pricnesa.