"Veámonos el uno al otro cuando estemos débiles."
___________________La madrugada siguiente, ocurrió lo mismo así como la siguiente y la siguiente, hasta que pronto se había tornado una rutina... Una semana exactamente. Todo era igual siempre, a comparación de que esta vez Natalia estaba peinada delicadamente. Su rostro se perfilaba perfecto ante la curvatura de los rulos, James lo notó y ni siquiera se molesto en mantenerse callado preguntar por ello apenas puso un pie en la sala.
- ¿Alguna razón para que haya decidido peinarse?
- Siempre es un buen momento para lucir bien. - Cómo era de esperarse, la mujer no hizo amago de querer levantar la mirada de su libro, había releído unas siete veces el mismo párrafo sin conseguir que las letras se le grabarán en la mente.
- Oh, por supuesto.
El agua ya estaba hirviendo para cuando ambos llegaron a la cocina, Natalia se había ocupado de aquella tarea, algo peculiar puesto que el soldado no se esperaba ser recibido de aquella forma. ¡Y Dios! Hasta había un platón con una variedad extensa de galletas.
Estaba sorprendido claramente.
- No se preocupe, las compré ayer.
- No me gustan las galletas. - Respingo, la pelirroja sólo le sonrió.
- Podría hacer una excepción por hoy.
Se veía distinta, es decir, lucía al natural. Pero había algo en su mirada, no era la misma, ésta se notaba apagada, como si algo la abrumara. Bucky no se quedó con las ganas, después de todo, llevaban hablando por días, contándose anécdotas o simplemente conversando sobre su día, que claramente, no era nada interesante ni nuevo.
- Escuché la pelea por la tarde - Soltó el moreno, Natalia levantó la mirada de su taza humeante para verlo - ¿Está todo en orden?
- Si a orden se le llama aclarar las cosas, sí. - Respondió tejante - No creo que logre entender los mal entendidos de casados.
- No debería ser tan cruda respecto a eso.
- Lo siento, ser discreta nunca ha sido mi fuerte. - Pero la cara de James seguía afligida, ni siquiera sabía por qué le dolía tanto que la mujer fuera tan sincera y le dijera en pocas palabras que no se metiera en sus asuntos. Jugó con una galleta - ¿Podría preguntarle algo?
- Sí.
A pesar de que seguía un poco desconcertado, intento que su voz no lo delatara. Natalia tomó una galleta entre sus dedos y le dió un mordisco antes de atreverse a preguntar.
- ¿Por qué se enlisto al ejército?
- El uniforme me sienta de maravilla. - Sonrió.
- No lo dudó, pero es en serio.
James lo sopeso por un segundo, su mirada entristeció.
- Un cabeza dura no podría estar mejor en otro lugar ¿no?
- ¿Quién dijo eso?
- Muchas gente lo creía, sobre todo mi padre. Como sabrá, el era un veterano de La Gran Guerra y creía que debía ser su sucesor, no había aprobado en la escuela así que no me quedaban muchas opciones después de eso, si vivía de lo que sé, seguramente habría muerto en la calle.
- Apuesto a que haya algo que aún no descubre, James. Quien le dijo que era un fracasado es un imbécil, y me vale un bledo que haya sido su padre - Aseguró la mujer. - ¿En qué es bueno?
Una vez mas permaneció en silencio.
- Cuando cumplí diez años, mi madre me metió a cursos de piano, pero apenas y puedo recordar una melodía.
- Debería tocar para mi algún día.
Miraba los ojos de la muchacha que hacia tan solo una semana lo parecía como si pudiera matarlo, que hacía tan solo unos minutos parecían querer acuchillarlo por entrometido, pero ahora su mirar era distinto,esos penetrantes ojos ahora reflejaba la dulce mirada verde vida de la mujer; esos destellantes ojos combinaban a la perfección con su tez blanca y su cabello pelirrojo.
- Algún día. - Prometió dando un mordisco a la galleta.
Eso, la sonrisa sincera que Natalia le había regalado, era suficiente como para prometerse internamente que debía aprender de nuevo a tocar, por ella.
¿Qué les esta pareciendo? :^)

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Just Be || WinterWidow
Fanfiction... Llegó a la conclusión de que podría escuchar su voz hasta el amanecer. Los personajes no me pertenecen, pero el universo alternativo sí. N° 1 #buckynat