Capítulo 31: Malas Noticias

721 79 71
                                    

Wyatt

Descansaba plácidamente en mi cuarto hasta que un indeseable ruido empezó en la cocina. Las personas egoístas no querían que durmiera. Genial.

"¿Quién eres y que puta cosa quieres de mi?" dije esperando a que me respondiera fuese quien fuese la persona al otro lado de la línea.

No recibí ninguna respuesta.

"Son las nueve de la noche y necesito diez horas de sueño" Contraataqué con los nervios de punta amenazando con colgar el teléfono e irme a dormir.

"No, no era mi intención molestarte" oí del otro lado, el sueño dejó que estar presente y un Wyatt recién renovado aparecio.

"¡Sr. Lieberher! Oh, no se preocupe, puedo dormir mañana" tardé unos pocos segundos antes de darme cuenta que he sonado desesperado. Rayos, él pensará que estoy necesitado, que su voz hace que todo dentro de mi se mueva, que he soñado con él y han terminado con un lavado de sábanas.

"Wyatt" gimió. Mi mente escandalosa lo vio tendido en una cama matrimonial pero esas alucinaciones se esfumaron cuando oí un sollozo.

"¿Sr. Lieberher, está usted llorando?" Enredo mi dedo índice al cable del teléfono que está pegado a la pared. Su llorando empeora y sin darme cuenta el mío inicia; no puedo evitar imaginarlo con sus ojos rojos ¡Mierda! Me sentía culpable por no responderle en las citas como él quería.

"Jess, el hotel. Ha sido un maldito, él lo pagará, Lara anotó el número de las placas. Está en coma y su familia está devastada" tanta información en tan poco tiempo y con las palabras medio habladas me confundió bastante.

"Toma un poco de aire que ahora mismo voy para allá" Tomé las llaves que estaban encima del mesón, cogí un abrigo para que tapara mi pijama verde a rayas.

"No hace falta, estoy a pocos minutos, ya llegaré" colgué el teléfono y me asomé por la ventana y en efecto ahí estaba, con un teléfono inalámbrico en sus manos, sus manos pálidas y su cara cubierta por su cabello. Se ve fatal.

Un par de minutos más y aquí está parado en el umbral, tiene los ojos rojos pero antes de caerse lo sostengo entre mis brazos. Se nota que no ha dormido ni comido lo necesario así que lo dejo en mi recámara y voy a la cocina para darle de comer.

Mientras corto, mezclo y los meto a fuego lento. Jaeden aparece somnoliento por la cocina.

"¿Por qué te has levantado? Necesitas un descanso" Le recomiendo pero él hace caso omiso y niega, tengo que quitarme el delantal blanco para escucharlo con más comodidad.

Jaeden parece dudarlo ya que no dice ni una palabra, en cambio, suspira y yo también lo hago.

"Como sabrás desde hace unas décadas, la familia Hopkins es la familia con más poder criminal de todos, no se ha podido desmantelar ya que posee redes en cada parte del país y de América" asiento aún con la confusión rondando mi cabeza ¿Qué tienen que ver una familia poderosa con la causa de sus lágrimas? "Pero ahora parece que hay una oportunidad, su clan se ha reducido en un ochenta por ciento y al pertenecer sólo está en manos de Alexander Hopkins" termina de hablar y une la punta de sus dedos. Mientras tanto, yo, con la duda carcomiendo mi mente sigo sacando causas y posibles conclusiones sin hallar algún resultado.

"¿Cómo se llama tu amigo? ¿Mack Taxer?" Pronuncia fruncido el ceño con duda cosa que lo hace extremadamente tierno.

"Jack, se llama Jack Grazer" afirmo y lo invito a sentarse en el sofá.

 Room Service; Fack [✔]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora