CAPITULO 4. SECRETOS DESVELADOS
Cuando me desperté, Zayla estaba en la cocina haciendo el desayuno.
-Buenos días.
-Buenos días dormilón, siento haberme quedado dormida encima tuyo...
-Tranquila.
-Oye, si no tienes nombre, tendremos que buscarte uno no?
-Para que? no tengo a nadie que lo tenga que usar...
-Y yo que?
-Me puedes llamar como quieras.
-Pero tendrá que ser un nombre que te guste no?
-Supongo...
-Creo que te llamare... Draysh.
-Draysh?
-Significa alma pura.
Hice un breve silencio.
-Estas bien? No te gusta?
-Zayla tengo que contarte algo que seguramente no te gustara.
-Me estas asustando...
-Siéntate... a los siete años, tuve un cambio... me transforme en vampiro... y antes de que me encontraras, tuve un sueño en el que era un hombre lobo... soy ambas cosas...
Se hizo un silencio que parecía eterno, Zayla me miraba intentando asimilar lo que le había contado, yo la miraba a los ojos con la esperanza de que lo entendiera y no me echara de su vida ya que era la única persona con la que había estado en toda mi vida.
-Cuando pensabas decírmelo?
-No creía que fuera necesario...
-Tendría que tenerte miedo?
-No.
-Prométeme que a partir de ahora no habrán secretos entre nosotros.
-Te lo prometo.
