CAPITULO 17

469 32 0
                                    

Han pasado los días y por fin llega el momento en el que tengo que verme con Nicole, y como siempre ando con los nervios de punta.
Estoy en casa de Deimy con Steven, pues Nicole ha quedado de recogerme en casa de ella, así que estoy esperando.
-Creo que te han dejado a la espera, princesa.- Dice Steven con su tono burlón. - No entiendo que fue lo que hizo para que te tuviera así Sofia, para mi que tiene que ver con brujería o algo, no se me hace normal- Continúa su comentario con el mismo tono.

- ¡Cállate! Siempre debemos equivocarnos para después lograr encontrar el amor de nuestras vidas. Deja que se equivoque.- Interviene Deimy de inmediato.

Procuro no opinar bastante, así que solo opto porque nos veamos una película. Cabe resaltar que amo estar con estos dos chicos, son lo más bonito que me ha sucedido en la vida.

Estamos viendo 'LA NOCHE DEL DEMONIO' y soy lo suficientemente miedosa como para ya no querer dormir en mi casa sola, puesto que mis padres se encuentran en un viaje y llegan el día de mañana.  Así que le suplico a Deimy que me deje quedar con ella... Ella accede escuetamente.

Tomo mi teléfono, pues ya he esperado lo pertinente y le marco a Nicole.

- ¡Hola! veo que no vendrás y pienso que dejar de vernos debería de se la mejor opción. - Dejo este mensaje en su buzón de voz, cuelgo y sigo viendo esta pelicula horrible.
En breves minutos recibo un texto de ella, pero me encuentro molesta así que suelto el celular.

-¡Arrunchame!- De digo a Deimy con voz de niña consentida, mientras tomo su brazo y la obligo a abrazarme.
-Como ordenes, dictadora- me sonríe, mientras con sus brazos me presiona hacia ella.

Y así, logramos quedarnos dormidos los tres en la misma cama.

DÍA SIGUIENTE 

He despertado primero que ellos dos, y noto que Deimy y yo dormimos abrazadas toda la noche, lo cual me hace mucha gracia.
-¡DESPIERTEN! - Grito con fuerza, haciendo que se levanten muy asustados y me burlo gratamente de ellos.

Hemos organizado toda la casa y preparado el desayuno.

Mientras disfrutamos de de unos waffles deliciosos, tocan la puerta y al abrir notamos que es el novio de Deimy, quien con su sola presencia me hace molestar, por obvias razones.

- Mauro ¿Que haces acá tan temprano?- Pregunta Deimy mientras poza un beso en sus labios.
- Juraba que estabas sola, hola muchachos- Nos lanza una mirada agradable.

Steven contesta a su saludo y yo solo hago un movimiento leve con mi cabeza, el sabe perfectamente que no me cae nada bien.

- ¿Vamos? - Me dirijo a Steven con una mirada penetrante, haciendo que acceda de manera eficaz. 

Nos despedimos de Deimy y le he pedido a Steven que me acompañe a donde mi padre que me ha dicho que me dirija a un concesionario de autos. Yo solo quiero que sea lo que estoy esperando hace tanto, me siento nerviosa.

Hemos decidido irnos caminando para hablar bastante y no gastar dinero innecesario. Pero en el transcurso del camino hemos percibido  que un auto nos viene siguiendo dos calles atrás, así que intentamos acelerar un poco el paso para voltear en la esquina. Lo hacemos, pero el auto sigue detrás de nosotros. Ambos tenemos mucho temor, no obstante me toca a mi tomar valentía, pues Steven esta muy alterado y solo quiere salir a correr. Emito una mirada amenazadora  dirigida al puesto del conductor, sin embargo no logro ver quien esta dentro de el, pues los vidrios están obscuros, tanto como para no permitir curiosear quien maneja, esto me asusta mucho más.

La puerta del auto se abre y se alcanzan observar unos tacones de plataforma negros tocar el suelo.

-¿Te llevo princesa?- Preguntan desde el carro, pero aun no logro ver quien es, pero su voz, su maldita voz, si la reconozco.

-¡AH! Lo que me faltaba- Piso fuerte con mi pie derecho hacia el suelo y me doy media vuelta con la intensión de tomar a Steven de la mano para irnos. Pero Steven como buen amigo que es, me detiene en seguida

-Hola Nico, claro que si. Estamos emocionados de verte, ya que ayer nos hiciste esperar hasta dormirnos- Le responde el con sarcasmo, arrastrándome hacia el auto.

DE HOMOFOBICA A HOMOSEXUALDonde viven las historias. Descúbrelo ahora