Amor oscuro y peligroso

Charlie Watson (6)

Narrador: Scarlett

Los días habían transcurrido desde aquel último encuentro con Randy. Ella no había vuelto a buscarme ni mucho menos yo a ella. No entendía el porque mi cuerpo la necesitaba demasiado, no entendía el porque sus toques me hacían sentir viva, cuando sus labios besaban los míos me sentía tan diferente a este mundo. Randy había llegado a mi vida sin ningún previsto y sin notarlo la había dejado penetrarse lo más adentro de mi piel. Randy era la única persona que podía hacerme perder la cabeza sin ni siquiera notarlo o planearlo.

Cuando la veía sentía tal pasión y deseo que nunca antes había sentido con ningún hombre, cuando su mirada seductora se posaba sobre mi cuerpo sentía los pelos de punta. Randy me hacía ver una perspectiva de mi diferente, una faceta que realmente no conocía.

Media hora atrás Marcela corrió hacia mi y simplemente dijo "Charlie está en camino. Es mejor que arregles todo lo hayas hecho durante  su ausencia".

Marcela. Como mi mejor amiga sabía absolutamente todo sobre Randy. Marcela creía que yo tenía sentimientos más aya de laborarles hacia Randy y eso significaba que estaba rompiendo una regla del contrato, o como nosotras lo llamamos; el juego.

No podía arreglar absolutamente nada de lo que había hecho durante la ausencia Charlie porque no podía. No podía simplemente decir a mi mente y a mi cuerpo dejar de reaccionar con diferencia hacia Randy, era algo que no podía conducir, era algo en el cual quería tener el control, pero no podía. Quería volver a tener el control sobre todas mis partidas, incluyendo a Randy, ella había sido la única que había podido dominar a lo que llevaba adentro, era la única persona que había podido vencer a Scarlett Roser, pero no sería lo mismo con Verónica Valdés. Tenía cartas bajo la manda y las utilizaría.

Por primera vez en cuatro años Verónica saldría a la luz. Veronica volvería a ver la luz del día y por supuesto volvería a sus andanzas, Verónica sería el domino que controlaría a Randy, ella sería quien realmente podía derogar a la nueva dueña del juego.

Sería una jugada muy difícil, arriesgarte y peligrosa. Debía jugar las cartas con devora y agilidad. Con aquello estaba rompiendo una de las reglas más importantes del juego y junto a ello arriesgando mi vida. Scarlett Roser había sido derrotada, Verónica Valdés nunca había lo había sido, y esta no sería una excepción. Yo volvería a ser la dueña del juego, tendría a la bestia comiendo de mi mano, Scarlett y Verónica estaban unidas en dos, era una face nunca antes probada.

Randy Ridley había despertado tal interés de poner mi vida en riesgo, de romper reglas y por supuesto de ganar un enemigo. Charlie. Randy había hecho de mi un lío, alguien como ella había llegado a mi vida para desmoronarla, había llegado para probarme, para vencerme y para cambiarme.

"¡Gran idiota!" escuche gritos provenientes de la planta baja de la casa.

Baje las escaleras encontrándome a Elena junto a Marcela. Peleando.

"¡Elena...!" Marcela volvió a gritar mientras corría alrededor del gran comedor. "Verónica, ¡ayuda, es una araña!" Llego a mi.

Mire a Elena que simplemente hizo una señal de guardar silencio con su dedo meñique, mientras trataba de aguantar la carcajada. Gire los ojos, acercándome a Marcela para después quitar de su camisa un pequeño trozo de papel.

"¿¡Araña!?"repite gritando.

"Esa hija de...¡perra!" se acercó a Elena que simplemente sonreía. "Creí que era una araña, sabes que soy alérgica a esos...¡demonios!"