Amor oscuro y peligroso

Capituló (11)

Capituló 11. Atormentada

Narrado por: Randy Ridley

Sus ojos negros penetraban los míos, sus labios figuraban una sonrisa juiciosa, mientras que su cuerpo corporal arrastraba el mío. Rebekah Rodríguez.

En mi mundo, había sola una mujer con la habilidad de destruir todos mis sentidos, en lo que recordaba solo existía una mujer que despertaba mis ansias de querer arrastrarla hasta mi cama y hacerla mía. Realmente se me había olvidado sobre la existencia de Rebekah, haciéndome creer que la única que existía era Scarlett (Verónica).

Rebekah Rodriguez podía ser igual que Scarlett, por no decir, mejor que ella.

Despegue rápidamente mi mirada de la de ella, para girarme y encontrarme con un hermoso mar chocolate confundido y atormentado. Los labios rojizos provenientes de Verónica formaron un simple. "¿Que mierda?"

Negué rápidamente con la cabeza, restándole importancia al asunto, no quería incomodar a la morena, ni mucho menos quería hacerla sentir mal por el hecho, de la presencia de Rebekah. Le di una sonrisa sincera y calmada, la cual, ella simplemente asintió.

John Smith.

El bastardo había sido capas de hacer presencia de mi pasado, un acto de celos, era algo que identificaba a Smith. Prácticamente eso significaba que él estaba al tanto de la situación entre Verónica Valdés y yo, haciendo referencia a que él tarde o temprano se lo comunicaría a Charlie, sin contar que tal vez, Smith, ya lo había trabajado en su plan de separación. Por hecho de sospecha, Verónica y yo nos encontrábamos en peligro, y más teniendo a un par de alacranes en nuestras espaldas. Charlie Watson, John Smith, y ahora, Rebekah Rodríguez.

Rebekah trono los dedos en mis ojos, haciéndome despertar del trance. "Ridley, ¿no dirás nada?" Preguntó en voz inocente.

Rodé los ojos y me dirigí a John. "¿Es esto lo urgente? No puedo creer que me ayas hecho perder mi tiempo, con algo que realmente no vale la pena"

Rebekah abrí los ojos, mientras que me daba una intimidate mirada, a la cual, simplemente ignoré. "¿Que coño pretendes? Está mujer y yo no tenemos nada en común. Eso se terminó hace mucho tiempo, es mejor que tengas una muy buena explicación, Smith..."

Una frágil voz resumió. "Randy"

Dirigí mi mirada a la menor, la cual no tenía que hacer en este asunto. Smith había planeado todo aquel encuentro con Rebekah, lo cual sería una problema entre Verónica y yo, y por supuesto que le convenía al hombre.

Rebekah habló. "No quiero ser indiscreta, pero...¿quien eres tú, querida?" La peli-negra se dirigió a la morena.

Dos mujeres tan arrogantes y con el mismo genio no sería algo fácil de manejar, ni mucho menos en estas situaciones. La morena clavo aquel par de chocolates en los grandes y penetrantes ojos negros de la peli-negra. La tensión estaba muy arriba, mientras que las dos mujeres peleaban silenciosamente, intentando ganar el poder y el control de la otra.

Me dirigí hacia el lugar en donde se encontraba Verónica sentada, le acaricié el hombro haciendo que se relajara ante aquel tacto, por otra parte John me atravesó con su mirada, sus inquietos ojos recorrían mis manos que se encontraban, ahora, en el cuerpo de la morena.

Y después de tantos, incómodos minutos, la mujer habló. "Scarlett Roser, un placer conocerte, 'querida'."

"Rebekah Rodríguez" sonrió con autoestima. "Ex-novia de Randy"

Después de tanto tiempo, la palabra 'novia' había llegado a ser una gran importancia para mi, claro, todo es perfecto y todas las relaciones tarde o temprano terminan, sea por bueno o malo, y Rebekah no había a excepción de todo aquel cliché.