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一¿A dónde nos dirigimos?一 preguntó a Minho, quien le dirigió una mirada fugaz y después sonrió.
一Es una sorpresa一 mordió su labio con fuerza. La verdad es que aunque por fuera se viera tranquila, por dentro estaba peleando con sigo misma para no gritar de la emoción.
A pesar de los hechos que habían tenido lugar hace unas horas, Danbi sentía ese día como si fuera el mejor de su vida porque estaba con Minho.
El sol se estaba escondiendo por detrás de las colinas, el aire fresco les acariciaba el rostro y los grillos comenzaban a cantar.
Ella odiaba los grillos, pero estaba con Minho y eso los hacía más bonitos.
Siguió mirando a su alrededor hasta que sus ojos se detuvieron en la silueta de una pequeña chica sentada en una banca. Miraba con impaciencia su teléfono como si estuviera esperando algo.
Pobre, seguro la dejaron plantada.
Me con pena a la muchacha hasta que estuvo lo suficientemente cerca de ella como para poder reconocerla.
一Gahyeon一 susurró su nombre. Al principio le parecía bien dejarla plantada para salir con Minho pero ahora que la veía ahí sentada, se sentía pésimo.
一¿Has dicho algo?一 alejó la vista de la chica para mirar al pavimento.
一No, nada一 sonrío viéndolo一. ¿Podemos hacer una parada? Tengo que hacer una llamada一 asintió.
Soltó su mano —porque si, todo este tiempo que habían estado caminando juntos, habían ido tomados de la mano— y caminó hasta un árbol un poco alejado de el. Lo suficiente para que no pudiera escucharla.
一¿Hola?
一Felix, tienes que ayudarme一 habló en un susurro y mordió sus uñas con nerviosismo.
一¿Que ha pasado? ¿Minho también te ha descubierto?
一No, es Gahyeon.
一¿Que hay con ella? ¿¡Ella también te descubrió!?一 jadeó sorprendido.
