Freedom

Capítulo Doce

- Podría andar así desnuda por la casa siempre Freedom!!-

- No lo harás! Alguien podria verte y tendría que matarlo!!!-

Me gusta picarlo, se toma todo tan a pecho, si estoy desnuda ahora, sentada sobre el,  si soy una desvergonzada pero no podría estar desnuda siempre , pero ver su rostro enfadado me resulta tan cómico .

-¡Freedom! Sabes que estoy bromeando ¿verdad?-

- Tienes una extraña manera de hacer chistes,  eres única y me gusta pero hay momentos que no puedo leerte -

- ¿Leerme? Vaya eso es nuevo y si, soy de usar mucho el sarcasmo o el humor negro, y tu no me entiendes por eso seguiré fastidiandote tanto como pueda-

- Déjame explicarte, Dylan nosotros podemos oler las emociónes , como el miedo o el dolor es como un olor característico que los humanos o especies sueltan y nosotros y nuestro gran olfato lo detectactamos-

- Ahhh y que olor característico sientes en mi ahora Freedom-

- Esa es la cuestión, hay momentos en el que siento que te disgustas o mientes pero después nada,  son momentos-

- Ohhh vaya, eso puede tener una explicación larga, y muy fastidiosa explicación Freedom ¿Quieres saber igual?-puedo ver la incertidumbre en sus ojos pero después de todo siento que debo ser honesta con el.

Intento levantarme y sus manos sostienen mis caderas haciendo que permanezca en el mismo lugar.

- Quiero saber todo de ti Dylan!-

- Ok, y si te digo que en mi vida todo es una gran mentira elaborada, aún así¿me seguirás queriendo?- le preguntó.

- ¿No lo entiendes Dylan?-

-¿Entender que? Freedom!- esto ya me está poniendo de malas suelto sus manos de mis caderas y me levanto.
Camino hacia la comoda y tomó otra de sus remeras,y me lo pongo lo único que deseo en este momento es irme de aquí.
Cuando colocó la mano sobre la mirilla de la puerta Freedom me abraza por detrás y me arroja de nuevo a la cama antes de que pueda hacer algo.
El se acuesta sobre mí, poniendo todo su peso y sujetando mis manos sobre mí cabeza intento moverme pero es inútil, Freedom es mucho más fuerte que yo.

- ¡¡¡Yaaaa sueltame !!! -

- ¡No, no lo haré hasta que escuches lo qué quiero decirte!-

- Habla entonces para que pueda irme de una vez - chillo furiosa y mirando hacia la pared.

- Dylan, Dylan mirame porfavor...-me habla con tanta suavidad que lo único que deseo es llorar.

Sólo muevo mi cabeza negativamente y no emito una sola palabra .

- Dylan tu no entiendes la magnitud de mis sentimientos por ti.. Yo te amo! Tu eres el motivo por el cual estoy vivo, por el cuál respiro sin ti no soy nada, durante todo este tiempo que estuve sin ti sólo vivía como un cascarón vacío y cuando te volví a ver mi corazón  volvió a latir,¿Lo entiendes? Nada de lo que puedas decir hará que cambie, si hasta para mi, me parece algo difícil de creer hace 72 horas que te encontré pero yo no te miento, te amo y no hay nada más importa y si me dejas quiero hacerte feliz toda la vida, ¿escuchas? Toda la vida!!-

Una lágrima traicionera cae de mi ojo, y otra y otra, volteó y noto que el también lo hace, no me gusta el drama y sólo estiró mi cuello para volver a besarlo, el corresponde a mi beso inmediatamente se qué debemos hablar pero ahora no quiero ya estoy cansada de tantas palabras.

Cuando siento que el beso comenzó a intensificarse, unos duros golpes en la puerta nos interrumpen, es de noche de madrugada creeria, eso me hace tener un mal presentimiento.

Freedom se aparta de mi, de mala gana, yo también me levanto y abro la puerta de la habitación y me dirijo hacia la puerta principal,  escuchó como Freedom me dice que lo espere y lo veo caminar intentando levantarse el pantalón, es raro pero lo hago, espero por él, y para colmo casi se me escapa una carcajada al ver que me pone detrás de él para abrirla.

Cuando Freedom abre la puerta ahí está Tiger .

-¿Qué pasó? - pregunto inquieta.

- Disculpen la hora! Yo también quisiera estar en mi casa con mi compañera, pero esto no podía esperar!-

Cuando miro hacia atrás de Tiger, mi equipo está todo ahí y lo entendí, una nueva misión cuando veo a Ryan y sus ojos se conectan a los míos y de sus labios dos palabras que me dejan helada.

-¡Lo encontramos! -

La hora llegó y no me detendre hasta que por fin este muerto.