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Primer día de 'supervivencia'

Vivir con un extraño era algo que no se veía todos los días, pero eran cosas que se hacían por razones de necesidad.

El colchón necesitaba el mullido aspecto para poder dormir bien. No le daba beneficios tener el colchón sobre el suelo; por suerte, el resto del mobiliario llegaría pasado mañana.

Por la falta de sueño, obtuvo insomnio; por el insomnio, cansancio; y por el cansancio, tiene sueño. ¿Qué sigue para tí, Soarin?

-Buenos días- saluda la fémina con desgano.

El domingo ahora no se les hacía tan agradable, lamentablemente debían terminar lo que no pudieron hacer ayer. Organizar el departamento.

¿Y por qué? Porque los niñitos decidieron hacer sus rabietas. La mejor manera de empezar el día fué con un desayuno simple, como lo eran la caja de galletas con leche. La verdad el apetito era escaso cuando estabas cansado y aparte tenías tareas pendientes.

Tan pronto como terminaron de comer, fueron a las habitaciones cada quien por su lado para comenzar con su mudanza.

La peliarcoiris estaba ocupando su reproductor de música mientras acomodaba varios libros en un estante. Mientras tanto, el peliazul sacaba su ropa de las cajas y la colocaba en el armario que se encontraba acaparando la pared junto a la puerta.

Así estuvieron una hora, no fué hasta que el de ojos esmeralda decidió tomar un descanso, fué a la cocina por un vaso con agua y al pasar a su pieza de nuevo un dulce ruido llamó su atención.

Una melodía.

-Wise men say
Only fools rush in

But I can't help
Falling in love with you.

Take my hand
Take my whole life too
For I can't help
Falling in love with you.

Shall I stay?
Would it be a sin
If I can't help
Falling in love with you.

Like a river flows
Surely to the sea
Darling, so it goes
S

ome things are meant to be.

Take my hand
Take my whole life too
For I can't help
Falling in love with you-

Estaba atento escuchando que tropezó con una caja del pasillo. Lo peor: era su caja.

~Maldito estúpido~ se regañó mentalmente.

Apenas iba a levantarse cuando frente a él vió una mano hacia su dirección. Al voltear encontró a la chica esperando que tomara su mano. Iba a cometer una tontería pero mejor se la ahorró; al fin y al cabo, no le había hecho nada malo por el momento. Tomó su mano, la cuál le fué suave al tacto, y con su ayuda se levantó.

-Gracias-

-De nada, ¿Has terminado?-

-No, tomaré un descanso-

-¡Uff! Yo estoy agotada y no llevo casi nada-

El joven fué a la pieza de la fémina y vió casi la mitad de la habitación terminada. De seguro hasta llevaba más que él. Como gesto de agradecimiento, fué a darle un vaso de agua a la chica quien lo recibió enseguida y lo bebió con sumo cuidado, por mucha sed que tuviera, no quería derramar agua al suelo.

Cuando hubo terminado, continuaron trabajando; así ya casi para la tarde ya habían terminado. Dash al acabar primero, fué a la cocina para ver qué podía hacer para la casi cena. Aquella merienda de un sándwich le había dejado hambre.

Nada.

No había sido buena idea dejar la compra de la comida para mañana. ¿Qué haría con medio cartón de jugo de naranja, 3 rebanadas de pan y un trocito de queso? Además, no solo iba a comer ella.

Al darse la vuelta, vió que del pasillo venía su compañero un tanto agotado. Conectaron sus miradas y la chica le dirigió la palabra.

-No hay comida- esas tres palabras hicieron explosión en la cabeza del chico. Tenía un gran apetito y lo peor era que de eso iba a morir si no se le ocurría nada pronto.

Optó por la opción rápida.

-¿Quieres salir a cenar?-

Adqfwxfadwfag ya me di cuenta de que no bugeo bien xD, las cosas como son. ¿Qué tal les parece la historia? Nos vemos a la próxima con La Symphonie :3
Bye~
Starly

Sin Rumbo Definitivo || ꜱᴏᴀʀɪɴᴅᴀꜱʜDonde viven las historias. Descúbrelo ahora