...
Esto pasa antes del primer día de clases de U.A.
————⊙————Aizawa se encontraba en la oficina del director Nezu, hablando sobre un tema un tanto complicado de resolver.
—¿Esta seguro de ésto, director Nezu? —Aizawa estaba un poco sorprendido por la propuesta que le dieron a la U.A. El gobierno jamás había interferido antes, pero al parecer, Nezu, ya no podía negarse —¿No podemos seguir eludiendo a esos tipos? —
—Tal parece ser que no... —soltó un pequeño suspiro, puedo ver a Aizawa maldecir en voz baja, y aunque no pudo escucharlo, pudo saber lo que dijo con solo leer sus labios —Habrá que aceptar la propuesta, o si no cerrarán la preparatoria para siempre —
—Esos malditos, ¿hasta donde pueden llegar? —
—No lo se, pero son capaces de mucho mas —el director se paró de la silla y caminó hacía la puerta, abriéndola y quedándose quieto para seguir hablando —Habrá que hablar de ésto con los otros profesores —luego salio del lugar, cerrando la puerta detrás suyo.
—Cada vez es peor, y mas peligroso para aquellas personas —murmuro Aizawa, abriendo la puerta para salir e ir a avisarles a los otros profesores sobre la situación.
...
Ya en el presente.
Izuku se encontraba en su cama, viendo el techo y pensando en lo cruel de la vida, o algo parecido. Aunque también recordaba esos momentos felices que tuvo y, gracias a eso, nunca perdió las esperanzas de que algo lo haría cambiar su perspectiva del mundo y la sociedad que lo rodea, pero no siempre la vida es como uno espera, ¿O si?.
—Que aburrimiento... —se sentó en la cama y miró hacía la puerta, esperando a que alguien entrara a su habitación, pero nadie lo hizo.
Saldré por un rato.
Se levantó y se dirigió a la puerta principal, saliendo de su departamento para dirigirse a quien sabe donde. Izuku caminaba por las calles con una capucha que apenas dejaba ver su rostro, las personas que pasaban por su lado lo ignoraban y, a veces ,cuando las personas chocaban con él, insultaban.
Llegó un momento en el qué Izuku casi usa su poder para hacer desaparecer a un sujeto que lo estaba insultando, pero trataba de tranquilizarse repitiendo una y otra vez "no dañes a nadie, no dañes a nadie o si no se molestará", aguanto así hasta qué el hombre siguió su camino.
Cuando izuku llegó a un parque, vió a unos niños jugando, eso le traía viejos recuerdo de cuando era un niño feliz, ahora solo queda la sombra de aquel niño y de su pasado. Izuku se quedó observando a los niños jugando mientras el seguía recordando los momentos felices que tubo en su infancia. Hasta que alguien se le acerco.
—Oye tú —llamó una voz femenina a su espalda, haciendo que Izuku salga de sus pensamientos ¿Que tanto miras a los niños?, pareces pedófilo —.
—¿Ha?, lo siento es que... estaba recordando algo —se dio vuelta para ver a una mujer de no más de 30 años —perdóneme si le incomode —Izuku se da vuelta y siguió caminando con la capucha puesta, y la mujer solo lo mira algo insegura y preocupada.
Ella debió darse cuenta de su edad, y era extraño que un niño estuviera caminando solo, sobretodo cuando ya se estaba haciendo tarde. Ella, cómo madre, solo pudo pedir a algún dios que cuidara al chico que parecía no estar bien.
Izuku ya no quería ver a nadie, así que mejor se fue a su hogar. Oh dulce y querido hogar. Y como siempre, no había nadie, no es como si esperara a alguien ni nada parecido, pero a veces tiene las esperanzas de que todo es un simple sueño y qué, en algún momento, despertarás y todo será como antes; un lugar en donde vuelva a estar su madre y su padre, una familia feliz. Pero él sabe que eso nunca va a pasar, porque la vida es cruel.
Izuku fue a por algo de comer y se preparo un katsudon, era su preferido. Se vá a su habitación, prendió su computadora para ver si había algo nuevo en las redes sociales ya que en la vida real no era para nada bueno con la gente, al menos en el internet podría ser alguien diferente, no es que tenga muchos amigos en las redes más que en la vida real, pero al menos con eso tenia bastante, y también se distraía.
Luego de unas horas que perecieron segundos para él, se fue a dormir un rato aunque, no tenia caso, ya que tenia clases en unas horas porque se desvelo estando en la computadora, así que mejor se empezó a preparar para ir a clases.
Cuando ya estaba listo, se dispuso a irse. Abrió la puerta y se fue en dirección a la escuela, pero sintió un sonido proveniente de un callejón, no le tomó mucha importancia, pero lo escucho una segunda vez y ahora si se acerco a éste y vio una pequeña caja de cartón, se asomó y observo un pequeño gato, cerca de uno o dos meses de nacido, lloraba buscando a su mamá, eso le recordó a él cuando no encontró a su mamá y en su lugar una nota, así que lo tomó y lo puso en su bolso con cuidado de no apretarlo o hacerle daño alguno. El pequeño gatito, al notar una fuente de calor, se acomodo delicadamente y se durmió.
Izuku se sintió calido por una vez luego de mucho tiempo, alguien ahora dependía de él, y ese sentimiento lleno su corazón.
Al llegar a U.A tuvo cuidado de no despertar al gatito para que no haga ruido, ya que no se permitían animales en la escuela y, para su suerte, no tuvo problema alguno al entrar con el gato. Llego a la clase 1-A y no había casi nadie, así qué se sentó en su pupitre y dejo la mochila en la mesa, la abrió un poco para ver al gatito que estaba durmiendo.
—¿Y ahora como te llamaré? —se puso a pensar un poco, ya que nunca había tenido un gato o pensar en tener uno, nunca se le paso por la mente el tener un animal de mascota y amigo —¿Que tal... Akira? —el gatito seguía dormido en su mochila -Creo que ese sera tu nombre, Akira —le dio una pequeña sonrisa al minino qué aun seguía dormido.
————⊙————
1066 palabras
Quería cambiarle el nombre al gatito, pero decidió dejarlo como Akira, me daba pereza buscar algo nuevo.
Pd: Estoy haciendo una portada mejor que la que tiene ahora, ya es solo una imagen que encontré por ahí cuando recién publique esto.
Publicado 2019
Editado Mar. 10 Sept. 2024
23:18 pm
ESTÁS LEYENDO
Un extraño poder en U.A [Editando]
Fiksi PenggemarEsta es la historia de Izuku Midoriya, una de las pocas personas en tener un poder desconocido en un mundo cruel y, su deseo, es ser una persona normal, pero gracias a una promesa que le hizo a su madre antes de fallecer es usar su poder para ayudar...