Déjame que te cuente

Vodka en la garganta

Después de contarme que le gustaba Bea, la mandé a tomar por culo. A la mierda todo. ¡Joder!
Pero necesitaba preguntarle una cosa.
Os pongo en situación:
Una de las quedadas que hacíamos en el río cuando aún seguía poniéndole los cuernos a Zaira bebimos alcohol, ella una litrona de cerveza y yo Absolut Vodka.
Mis padres no podían verme entrar a casa con una botella de alcohol como comprenderéis, por lo que le pedí a Aroa que me la guardara hasta que me la pudiera devolver.
¿Dónde se quedó esa botella?
En casa de Zaira.

No quería hablar con Aroa, pero en el fondo de mí sabía que si que quería ¿Es normal no? La ira superaba el amor.
Solo quería preguntarle a Aroa si me podía devolver la botella, ya sabes, son 16€ habrá que amortiguarlos, digo yo.
Me armé de valor y le hablé por Whatsapp como si ella me importase tres mierdas, y era todo lo contrario...

Tardó en contestar.

—Amaia, la botella está en casa de Zaira y está en Argentina

Zaira era de Argentina y se fue a Buenos Aires a visitar a sus abuelos para olvidarse de la dolorosa ruptura con Aroa. Pero Aroa tenía llaves de su casa porque Zaira le advirtió a Aroa que antes de que llegara de Argentina quería que sus cosas se fueran de su casa o por el contrario las tiraría.

—Tia yo no puedo entrar en casa de Zaira, todavía es muy pronto.—Dijo Aroa.

—Me da igual Aroa, devuélvemela.

El tema de la botella de vodka es tan absurdo que parecía la típica excusa para volver a saber de ella.
Y lo era.

—Amaia que no, que no tia lo siento pero no puedo entrar ahí.

Estaba tan cabreada con Aroa, tan rabiosa con lágrimas en los ojos después de lo que pasó con Bea, que enfadada avisé a mi hermano de todo lo que estaba ocurriendo.

Mi hermano se llama Alejandro y me saca 7 años. Él le tenía muchísimo asco a Aroa, cuando digo muchísimo es que REAL que era muchísimo.

Mi hermano no podía aguantar a Aroa y que yo estuviera detrás de ella como una perra lamiéndole el culo después de como me estaba tratando.
Él hacia todo lo posible para que mi mente (ciega de amor) pisara la tierra y se dejara de tanta fantasía.

Él, enfureció al oír lo que le conté de ella.
De alguna manera u otra, Aroa y yo quedamos con vernos en el Castillo (museo) del pueblo. Vendrían su nueva amiguita Estela, la cual tomaron en contacto un día que ella me estaba esperando de la Academia, ella era hermana de uno de los canis más idiotas de todo este pueblo, así que no me daba buena espina, pero se la veía bastante maja y decía que su hermano era un estúpido inmaduro, quizás si que voy a tener que darle una oportunidad 🤔.
El caso es que, en la quedada que haría en el Castillo sería con, la ya antes mencionada Estela, Bea 🤢 y Aroa por supuesto.

De verdad os digo ¿De verdad creéis que iba a ir de buenas maneras si iba a presentarse ahí la chica que le gustaba? me dolía en el alma, mi corazón estaba que gritaba, pero en silencio.
Estaba tan nerviosa que llegara ya el anochecer, sería ahí cuando quedase con ellas.
Mi hermano Alejandro me vio tan mal y tan preocupada que no dudó en decirme que el iría conmigo al Castillo y que no me opusiera, que iría aunque yo dijese que no.

Organizamos un "plan" yo le diría a Aroa de quedar y ella no sabría que estaría mi hermano, cuando lo viera se achantaría.
Mi hermano pensaba que si hubiese ido yo sola, Aroa me hubiese liado la cabeza con 4 tonterías y estaría de vuelta en la palma de su mano, cosa que él no quería consentir.