Enamorandote

Capítulo 19: Disparos.

Intente desamarrar sus manos de los nudos, pero al parecer estaban lo suficientemente fuertes como para que se queden intactos. Debía de apresurarme, escuche los pasos de Ben a lo lejos. Dos palabras. Estaba jodido.

-¿Quien esta ahí?- rápidamente me escondí en el closet que estaba en la misma habitación.

-¿Quien esta ahí?- volvió a repetir.

Abrí un poco la puerta del closet para poder ver a ben mirando a Emma quien lo miraba asustada.

-Adivino, tu amiguito vino por ti- ella negó con la cabeza -Aceptalo- ella seguía negando.Por suerte tenía la boca vendada, ella no era muy buena mintiendo. 

-Bueno, entonces te tendré aquí hasta que a alguien se le ocurra darme el dinero y no me digas que tu familia no lo tiene porque bien conozco que el novio de tu madre tiene plata- creo que a este le faltaba actualizar, nuestros papás ya no eran novios, o será que su mama se había enamorado de otro millonario pero ¿como sabia? 

-bueno, si no vienen por ti ya sabes lo que te espera-ella se removió incómoda, mirando hacia el closet donde yo estaba.

-Y si tu amigo no se revela... porque no podría ser más evidente de que está en esta habitación, aférrate a las consecuencias- concluyó amenazante.

Ben le saco la venda a Emma.

-¿Dónde está?- le dijo

-¿Quien?-

-No te hagas la idiota-

-No...no ha venido nadie- dijo bajando la cabeza disimulando decepción

-O lo dices o yo mismo lo saco- trague saliva. El probablemente sabía donde estaba, sabia que estaba escondido, mirándolos

-Ya te dije que no hay nadie- dijo Emma elevando su tono de voz

-Veamos qué es lo que opina tu amigo-. Se dirigió al closet y abrió la puerta de golpe, haciendo de que me cayera ya que yo estaba apoyado contra la puerta. Me levanté casi temblando, él me agarró del cuello y me estampo contra la pared, acto seguido me amarro a la puerta. Intentaba zafarme, pero mis muñecas estaban empezando a sangrar.

-El dinero- dijo acercandose a mi

-No tengo nada- el saco su pistola y me apunto

-El dinero-

-No tengo...- apuntó a Emma

-El dinero o los mato a los dos-

-La policía va a llegar y se va a hacer cargo de ti-le dije

-Cuando ustedes dos ya están muertos-dijo fingiendo una sonrisa. -Tu decides, de todas maneras saldrás perdiendo-

Me estremecí de pies a cabeza. Este tipo en serio nos quería matar.

-No tengo nada-

-Sabes lo que significa-dijo Ben apuntando

-Matame-suspire-con tal de que la dejes libre...-

-¡Que mierda dices Tyler! - dijo Emma intentando zafarse de donde estaba amarrada.

-¿Ella es todo para ti no?- me dijo en tono de burla

-Si- dije mientras bajaba la cabeza

-Me disparas y la liberas, así de simple-

-¿Y yo que? aun no consigo el dinero- dijo mirándome

-Mataste a su hermano, a su padre, si me matas a mi tambien apuesto a que vas a pagar de una maldita vez.

-Esta bien- agarro la pistola y me apunto.

-Últimas palabras-negué con la cabeza. Iba a morir. Ahora, no quería, bueno, obvio a quien le gusta morir.

Escuche a Ben recargar la pistola.*Esto es para algo bueno* me decía a mi mismo. Tenía que convencerme de que esto ayudaría a Emma, se libraría de Ben ya que el al matarme quedaría arrestado. Abrí los ojos para tener mi última vista de la vida antes de morir.

-No lo hagas- decía Emma llorando-No... no me dejes.

-Es por tu bien- dije bajando la cabeza. Odiaba verla así. -Ben por fin las va a dejar y ...-

-Tyler-

-Adelante- le dije a Ben, que nos estaba mirando.

-Disparame- Emma siguió gritando, por lo que el le tapo la boca con un pañuelo. Volví a cerrar los ojos. Me preguntaba, cómo se sentía morir ¿sera solo el bang y se acaba todo? No es que quisiera morir, pero Emma estaría bien, prefería morir yo, a que ella sufra porque su hermano o su mamá murieron por culpa de ben. Escuche el bang de la pistola. Uno... dos... tres balazos.

Pero... no me sentía muerto. No había sentido nada ¿Acaso ya estaba muerto? ¿Así de simple? No era posible. Mi corazón seguía corriendo la maratón que corría hace un rato. Sentía mis manos y piernas, seguía respirando. No. No estaba muerto. Entonces ¿Que había sido eso? Abrí los ojos lentamente.

Ben seguía ahí, pero lo que vi me paralizo. Todo mi mundo se vino abajo. No había muerto. Ben no me había disparado a mi, le había disparado a Emma.

Estaba tirada en el suelo, con tres balazos. Uno en el pecho y dos en el abdomen. Me quede tanto rato mirándola que no me di cuenta de que Ben había escapado. Ella estaba sangrando, en frente mío y no podía hacer nada. Intente zafarme, pero mis muñecas sangrantes no ayudaban mucho. Di un tirón hacia adelante para ver si se rompía la soga que me mantenía sujeto, luego de varios intentos más por fin me pude soltar. Corrí a su lado, tenía los ojos entreabiertos, si sentía su pulso y estaba respirando, suspire aliviado. Por lo menos no la había matado. Desvíe mi mirada hacia los tres balazos que tenía.

¿Por que a ella? Se supone que esto me tenía que pasar a mi y no a ella. Todo esto era mi culpa. Y ahora todo estaba mal. Ben había escapado y Emma estaba herida. Fue ahí cuando me di cuenta, Ben no quería el dinero, él las quería hacer sufrir. Y eso, era lo que más me molestaba.

Escuche a la policía afuera.

-Ahora vuelvo- le dije mientras me iba.

Baje las escaleras lo más rápido posible, pero una de las gradas se rompió haciendo que mi pie izquierdo terminará en el hueco de la escalera. Saqué mi pie de ahí y seguí bajando las escaleras. Corrí hacia la puerta y la abrí haciendo entrar a los oficiales y llevando a los doctores donde Emma.

Subí rápidamente las escaleras mientras los doctores se la llevaban en una camilla. Ella estaba, por así decirlo, más pálida que nunca. Sus heridas siguen sangrando, pero ya no tanto.

Los doctores la cargaron en la ambulancia, a mi no me dejaron ir, ya que su mama tenia la prioridad de acompañarla al hospital y en la ambulancia sólo había sitio para un acompañante. Detuve a uno de los doctores que estaba apunto de subirse a la ambulancia.

-¿Sobrevivirá?- pregunté alarmado. Hizo una sonrisa torcida

-Lo más probable es que si, la bala más cercana no penetró tanto como las demás, lo peor sería que termine en un estado de coma-Dijo dedicándome una sonrisa mientras se subía a la ambulancia.

Suspiré aliviado. En eso, mi padre se me acercó.

-¿Estas bien?- dijo colocando su mano en mi hombro

-Si a bien te refieres a que casi matan a mi amiga, pues creo que estoy bien-Doy una carcajada.

-¿Podemos ir al hospital ya? Necesito ver a Emma y saber que está bien- pregunté mirando al auto.

-Enseguida nos vamos-respondió mi padre.

-¿Quién pagará por todo esto?-volvió a hablar mi padre, pero esta vez dirigiéndose a los oficiales

-Eso está por verse- contestaron ellos.