"MARRY ME" (Klance edition)

"Eres un completo idiota"

No podía dejar de mirar a la chica detrás del mostrador. Era guapo, alto, de cabello castaño y con una hermosa sonrisa. Trataba de poner atención a lo que me decía Hunk acerca de los pantalones que había encontrado, pero no podía apartar mi mirada de él.

-Creo que lo compre... -le entendí a Hunk. Miré al piso cuando crucé mirada con el chico, sentí que me sonrojaba de a poco. Hunk notó ese detalle y busco con la vista el punto que había estado mirando, cuando encontró al chico hizo una mueca y me goleó en la cabeza con el pantalón.

-No puedes, Lance. Estás comprometido ahora, ¿Que pensaría Keith si te viera en estos momentos?

Sí... ¿Qué pensaría él? ¿Me dejaría libre?

-No lo sé... tampoco es para tanto, sólo la estaba mirando. Estoy comprometido, no ciego -le respondí. Hunk negó con la cabeza y siguió sacando ropa de los colgadores de la tienda.

Levante la vista una milésima de segundo y sentí la mirada del chico. No podía hacer nada, el me gustaba pero no de la misma forma que Keith.

No, no era justo para greñas, así que me reprimí e hice como que él no estaba en el mismo establecimiento que yo.

Sin embargo, no funciono. Hunk me regañaba cada cinco minutos por mirara "descaradamente" a otro hombre que no fuera mi futuro esposo, pero al parecer él no comprendía que aún tenía 17 años que era un chico como todos los demás.

-Lance, ya basta. Llamare a Keith -me dijo enojado mientras sacaba el celular de su bolsillo.

-Tú no harás nada. No he hecho nada malo, no lo he engañado -protesté. Y era verdad, admitía que el chico me atraía y que no dejaba de lanzarle miradas, pero no había hablado con él, seguía siendo un desconocido para mí.

Pero como siempre, las cosas iban en mi contra. Cuando Hunk fue a pagar la ropa que había elegido, nos atendió nada mas y nada menos que el chico.

- Hola chicos, en qué puedo ayudarlos -nos dijo con una agradable sonrisa. Hunk bufó y me fulminó con la mirada con la clara advertencia de "no hagas nada o le diré a Keith".

-Quiero pagar esto -Le dijo Hunk sin dejar de amenazarme.

Cuando él le entregó el recibo y las bolsas con ropa, Hunk se apresuró a salir tirándome del brazo. Afuera de la tienda, sentando en una banca para descansar del centro comercial, Keith bebía un café.

-Recuérdenme no volver a a acompañarlos cuando digan la palabra "compras" es impresionante como se pueden tardar tanto -nos dijo poniéndose de pie y acercándose a nosotros. Pasó su brazo por mi cintura y comenzamos a caminar hacia la tienda de música, Hunk quería aprender a tocar la batería y para empezar necesitaba una.

-Al final, ¿que compraron? -nos pregunto Keith mientras subíamos por la escalera eléctrica.

-Yo unos shorts para cuando llegue la primavera, un cinturón, un saco, un pantalón y un par de zapatos -enumeró Hunk.

-¿y tú, Lance?

-nada - le contesté.

-No compró nada, pero le echó el ojo a algo que  estaba fuera de su alcance -comentó Hunk. Estuve a punto de caerme cundo nos bajábamos de la escalera.

-¿En serio? ¿Que era? Si no te alcanzo el dinero debiste llamarme, me pagaron ayer.

-No seas tonto, Keith. No te molestes -me apresure en decir, pero el ya se había dado media vuelta dispuesto a regresar a la tienda.

-Deja que Keith te consienta, lo hace por que te ama -agregó Hunk, alzando la voz para ponerle énfasis a sus últimas palabras.

Fue demasiado tarde para persuadirlo, en menos de dos minutos estábamos de regreso a la tienda. Estaba atrapado, no quería que Keith gastará su dinero en algo inservible y caro para confirmar mi coartada, pero si no lo hacía quedaría al descubierto.