¡pιenѕo enaмorarтe!

⊱12

Un mes había transcurrido desde que Sasuke y Sakura se habían besado.

Desde entonces, muchas cosas inesperadas ocurrieron en su vida.

Una de ellas era que Sasuke le había confesado sus sentimientos. El decía estar enamorado de ella.

-Pienso enamorarte.

Le dijo días atrás este azabache mal humorado que tan bien conocemos.

Por su parte, Sakura había decido tirar su objetivo de eliminar a Sasuke de su corazón a la mierda. Ahora, he de suponer que ustedes se preguntarán ¿Por qué?

Pues se lo voy a explicar.

Resulta que nuestra descabellada amiga Ino se enteró, de que la pelirosa estaba acudiendo a citas con Sasori, y Gaara.

Dicho sea de paso:
•A Ino no le agrada Sasori.
•Uno de los amigos de Gaara subió el vídeo en el que ella corría más rápido de lo que podría hacerlo el mismísimo Flash. Pues un enemigo.

La rubia estaba en desacuerdo. ¿Esto le importaba a la pelirosa? Pues para nada.

Pero la cuestión es que la Yamanaka conoce tan bien a nuestra protagonista, que fácilmente se dio cuenta de que nuestra chica jamás amaría a esos pobres muchachos cómo amaba a Sasuke. Y me aconsejó que le dejara claro las cosas a ambos pelirrojos.

Así lo hizo Sakura, ambos decidieron retirarse de la estancia, por lo que Sakura se quedó sin ganado. Genial, tantas hectáreas y con estancia vacía.

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-Ya se me está secando el arroyo...-dijo un día Sakura.

Tenten,Temari, Hinata, Ino e incluso Kiba la miraron sorprendida.

-¿Qué?-dijo- No me miren así, desde que quedé viuda nadie me sacude como lona con arena-puso los ojos en blanco- Un año y medio de abstinencia.

Todos estallaron en carcajadas.

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Y otra de las razones por las que había se había rendido ante su objetivo era una charla que tuvo con su madre.

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La ojiverde se encontraba sentada en el sillón de su apartamento, cuándo su madre llegó a visitarla.

Mebuki notó rara a su hija, y le ofreció todo el cariño la confianza para que su hija se sintiera libre de contarle lo que fuera. Y como era de esperar, se trató del chico que hace años atormentaban los pensamientos de su hija.

-Es Sasuke ¿Sabes? él dice amarme... pero no estoy segura de eso me suena... a cuento, a algo irreal-suspiró- Dejé atrás mi propósito de olvidar mi sentimientos hacia él... pero tampoco me siento muy segura de eso. Me parece algo peligroso.
-Se que quieres decirme más, hija, dímelo.

Sakura miró la taza de te que había preparado para ambas, y vio su reflejo en ella, mirándose, continuó.

-Aveces tengo miedo se sentir lo que siento...es decir...es algo irónico que un sentimiento tan bello como amar...duela tanto. En ocaciones suelo arrepentirme de haber venido a Japón de nuevo. Y de amar a quien amo también.

La señora observó a su hija, convertida en una adulta, joven, bella, con un futuro brillante, y el pecho se le infló de orgullo.

-Hija... nunca en tu vida debes arrepentirte de amar a alguien... si puedes arrepentirte si amaste a alguien y no luchaste por ganarte el amor de esa persona. Amar es lo más lindo que existe, a pesar de todo... eres una mujer bella, inteligente, una muy fuerte, que sabe como enfrentar los problemas que se le presentan y si no puede sola busca ayuda, pero sobre todas las cosas eres una excelente persona... ¿Por qué arrepentirte? Tu luchaste por tenerlo, y pues bueno no resultó ¿Y eso qué? Tienes muchos hombres dispuestos a pedirte la mano. No tienes porque pasarte la vida sola sólo porque el hombre que amas no correspondió tus sentimientos.

La mujer hizo una pausa, tomó un sorbo de su te, y prosiguió.

-Mira, tu eres alguien joven, los tienes a casi todos prendados, incluso hasta los hombres casados y con familia desearían meter su misionero en tu cueva.
-¡Mamá!
-Es la verdad, todo el mundo lo ve. ¿Quieres besar al tipo que tanto te ha gustado? Adelante, besalo, si te corresponde, lo vas a contar saltando como un canguro. Y si no, pues el se pierde del arte de besar tu boca. Tu decides si quieres que ese chico te conquiste o no.

Sakura sonrió, y habló.

-Si quiero, pero esta vez no se lo dejaré tan fácil, le costará conquistarme.

La madre de Sakura carraspeó a propósito.

-Bueno, haré que le cueste-rodó los ojos.

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Otra cosa que se había descubierto era que Sakura estaba siendo perseguida por un fanático loco de las modelos.

Sabía absolutamente todo, y las seguía a todas partes sacándole fotos.

Un agente se seguridad de la compañía Nara (Compañía Shikamaru para los más cercanos) Se percató de que alguien perseguía a la abogada.

Poco después la justicia dispuso una orden de alejamiento para aquel muchacho, era fanático de las modelos.

Sakura modelava para Victoria Secrets y Calvin Klain.

Su teléfono sonó.

-¿Hola?
-¡Sakura!-escuchó la voz de Hinata del otro lado.
-¿Que pasa?
-Necesito que vengas con tu auto a mi apartamento ¡Ahora!-su voz se oía desesperada y entre cortada.
-Bien.

Prefirió no preguntar que ocurría y se dirigió hasta allí en su auto, a toda velocidad, atravesó semáforos en rojo, y hasta casi atropella a un borracho, seguramente se llevaría una buena multa y el retiro de la licencia.

Al llegar al edificio, se encontró con un despliegue policial enorme. Bomberos y ambulancias también se encntaban allí.

La escena era de lo más desgarradora, y espantosa que ni siquiera a en sus peores pesadillas habría ocurrido.

-¡Sa-Sakura!

Hinata se refugió en sus brazos, y lloró con desesperación. Un nudo se formó en la boca de su estómago, y miró hacia arriba, rezando en silencio que esto no tuviera el final tan evidente que se veía venir.