Alétheia

162 6 0
                                    


Qué gran amalgama de preposiciones.

Decídete, coge la rienda de tu destino y sino. Tú, ¡magnánimo! Decadente ser.

¿Por qué la eterna búsqueda del manantial se torna frustrante?

Se muere de sed y se le otorga ceniza. ¡Qué instante!

Cuando un amanecer resulta sombrío y lúgubre, todo candil se convierte en astro luminoso. Esa luz externa refrescante que alimenta el alma del atormentado, del deseo no colmado, un sufrimiento placentero.

Porque sobre lo divino no reparamos. Esperamos.

MeditacionesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora