Cap. 4: Gracias a ti

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Zuko llego a su oficina mas temprano de lo usual, rpaidamente se encierra, se recarga en el respaldo de la silla mirando a la nada, la noche anterior habia sido demasiado dura para él; pues despes de lo sucedido con Katara no pudo dormir, sintiendose como un imbecil. 

Se pasaba las manos por el cabello como si ese gesto le ayudara a acomodar sus ideas, habia pensado en divoriciarse de ella en multiples ocasiones para que pudiera ser libre y asi rehacer su vida con alguien que la valorara, sin embargo la sola idea de imaginarla con alguien mas le causaba rabia y eso lo habia demostrado anoche, cuando la morena le grito en su cara que podia hacer lo mismo que él. 

El solo imaginar a Katara con otro hombre, besando sus labios y  admirando su cuerpo, sentia que ese día se moriria en vida. Sin embargo el mismo lo habia provocado, pues habia mentido desde el principio; sus ojos se posan en el anillo de bodas y comenza a jugar con él y sus pensamientos volaron hacia la noche anterior, cuando habia tomado a Katara. 

Jamás habia sentido lo que sientio con ella, escucharla gemir, ver como su respiracion se aceleraba y su cuerpo contraerse antel el orgasmo que le habia provocado.. Sonrie para si mismo, sintiendose como un adolescente siendo atrapado en su travesura. 

-Ey princesa - se oya una vox a su espalda. 

-Fastidiando tan temprano como siempre -se gira y queda frene a frente con Haru- 

-Toque y te estuve hablando. Pero como siempre andas en las nubes -se sienta y se recarga en el respaldo de la silla- 

-Pense que aqui tendria paz, pero me equivoque -con un gesto de disguto- 

-¿Todo bien? 

-¿Porque no habira de estarlo? -se pone serio- 

-Sabes a lo que me refiero ..

-Si te refieres a lo sucedido en el bar, dejame decirte que fue un accidente. 

-Ya lo creo.. Si por eso te paraste de la mesa y dejaste al tipo ese tirado en el suelo -habla con voz calmada- 

-Te preocupas demasiado por mi vida marital, deberias ser ter: apeuta de parejas -en tono burlezco- 

-Nunca esta de más una buena terapia, sobre todo cuando uno de los pacientes es un complento idiota -respondiendo a la burla de su amigo- 

-¿Lo dices por experiencia? -levantando un ceja y fingiendo sopresa- 

-A diferencia de ti, mi situacion marital es muy palcentera -le guiñe un ojo- 

-Sin detalles ni comentarios -levantandose de su silla- 

-Bueno, negocios son negocios. No estamos aqui para resolver tu problema de virilidad -hace un gesto con la mano- 

-A veces eres despreciable -hace una llamada- Enit. necesito que prepares la sala de juntas, no tardaran en llegar unos socios importantes. Que todo este montado para antes de las 9:30.

-Como ordene Señor.

-Ni por favor, ni gracias -se levanta de su asiento- 

-Lo siento mamá -se acomoda el saco, a paso lento se dirige hacia la puerta- 

-No sabia que andabas en tu dias -se burla y lo segui- 

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Mientras tanto en otro sitio, Katara entraba a paso veloz a la entrada del edificio de su trabajo, maldecia en sus adentros por haberse quedado dormida y como no hacerlo, si la noche anterior habia sido un completo desastre.... Para colmo la cabeza le aturdia, despues de tanto haber llorado, tomando en cuenta que habia ingenrido alcohol y la discusion con Zuko, fue un bum para su estado actual. Pasa rapidamente por el pasillo de los empleados y como rayo llego a su oficina, se encierra para no ser acosada por el personal y se quita las gafas de sol que se habia puesto para ocultar sus ojeras. Se sienta en su silla  y llama a su asistente por el intercomunicador. 

Un cambio de vida [Zutara]   ||Katara || ZukoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora