But It's Better If You Do [Ryden]

Extra II

Gerard // 29 años
Frank // 28 años
"Si te quedas, Incluso esperaré toda la noche, O hasta que mi corazón explote"
-My Chemical Romance / Summertime
. . .

—Gerdad. Quiero otro bebé.

El ahora pelirrojo se atragantó con su café, provocando la risa de la pequeña sentada en su sillita.

—¡¿Qué?!

—Que quiero-

—No si, ya sé lo que dijiste, pero la pregunta es ¿por qué? Solo tiene dos años que tenemos a Bandit.

 —Ya sé, es solo... no sé...sabes que amo a los niños Gee, y solo quiero otro bebé...por favoooooor.

El chico de tatuajes comenzó a hacer un puchero realmente tierno, sabía que Gerard nunca le negaría nada, y mucho menos con esa carita de cachorro. Algo que describía muy bien a esta pareja, es que había 100% confianza y sus actitudes no eran las más maduras que digamos, es decir, a pesar de que Gerard afirmó que la llegada de la bebé lo había hecho alguien más recto, Frank lo arruinó con la gran carcajada que soltó, además de que sus amistades y familiares se tomaron por sorpresa el hecho de que iban a adoptar un bebé, y más aún cuando este resultó ser niña.

Algo que el de cabellos rojizos amaba de ambos era que sabían diferenciar entre lo que era jugar y salir con su pequeña, poder cuidarla como era debido, sin evadir alguna responsabilidad. Desde que el mayor conoció al azabache, siempre ha tenido un aura bastante agradable, un chico que se basa muy bien en el "solo se vive una vez" siempre lo admiraba de lejos, su forma de ser, su sonrisa e incluso su tamaño, resultaba ser tan tierno y algo genial, ya que no se dejaba intimidar por nadie, pues le tocó ver como le pateaba el trasero a dos chicos de tercer año en la salida. Fue como una bendición que Mikey se haya acercado a  hablar con él, ya que los pusieron juntos en un proyecto de ciencias junto a Spencer, y cuando su hermano se compadeció de él y lo ayudó a obtener el teléfono del chico, se lo agradeció a los mil cielos, incluso lo mencionó en su boda, porque si, ambos decidieron dar un paso importante, principalmente porque era un requisito para poder adoptar a la pequeña, fue pequeña realmente, solo invitando a sus respectivos padres y a sus amigos cercanos. Pero ahora, la idea de agrandar más la familia, no es que se le hiciera mala idea, pero algo un poco acelerado. Gerard suspiró y cerro los ojos, sabía un par de cosas:

1) Si se negaba, Frank comenzaría a hacer berrinches, lo dejaría en abstinencia (la cual existe dese que Bandit llegó a su hogar), y comenzaría a ignorarlo hasta que cediera.

2) Frank se lo contaría a Donna para que ella presionara al mayor de los Way y ser obligado a no negar que iban a tener otro bebé.

Frank Iero podía tener cara de ángel, pero era como un lobo disfrazado de oveja:

— ¿Gee?

— Cielo  —el pelirrojo tomó su mano —Me encantaría tener otro bebé contigo, pero ¿estas seguro? Es decir, llevamos poco con Bandit y nuestra situación económica cambiaría muchísimo-

  — Tenemos un buen trabajo y con buenos horarios, además, no quiero que mi bebé crezca sola, no es muy alegre ser hijo único, necesita un compañero de aventuras.

Ambos chicos voltearon a ver a la bebé, quién estaba con su pequeño plato de yogur tratando de comer sola y sonrió al tener la atención de ambos padres.