I Wouldn't Mind.

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Las caricias en su piel eran suaves.

¿Quién diría que acabaría así?

Los dos.

En una sola cama.

En ropa interior.

Acariciándose suavemente y dándose uno que otro dulce beso.

(...)

El castaño acaricio con delicadeza el cabello del hombre lobo.

La cabeza de Derek estaba recargada sobre el pecho del chico con lunares.

Sus ojos estaban cerrados, sin embargo él no estaba dormido y Stiles lo corfimaba al sentir las débiles, pero perceptibles caricias en su cintura.

El menor enredó sus delgados dedos en el, curiosamente, suave cabello del de, ahora, su oficial novio.

Derek soltó un sonido que fácilmente se pudo catalogar como un ronroneo, Stiles sonrió ante eso.

Era extraño, no había pasado ni más de 1 día desde que confeso sus sentimientos pensando que el mayor no los correspondía y pensaba que lo humillaría, sin embargo estaba feliz, satisfecho con como habían acabado las cosas.

Recargo su mandíbula encima de la cabeza de su novio, continuando las caricias en la parte inferior, alado de su oreja.

Con delicadeza tarareo, Derek apretó más su agarre en su cintura escondiendo más su cara en su desnudo pecho, respiro hondo disfrutando del dulce aroma que soltaba Stiles.

Alegremente caemos fuera de lugar—cantó en susurro.—, fuera de lugar.—Derek sonrío con amor.— Caería en cualquier lugar contigo.—el mayor dibujo figuras imaginarias en la blanca piel de su amado.— Estoy de tu lado.—Derek alzo la vista.— Balanceando en la lluvia.—su dulce cantar apenas se escuchaba, sin embargo a los oídos del otro era como si lo estuviera gritando sin dañarlo.— Tarareando melodías.—el moreno planto un casto beso en sus labios.— No iremos a ningún lado hasta que nos congelemos juntos.—siguió cantando ahora con una sonrisa.— Ya no tengo miedo.—el cuarto se inundo de felicidad y amor.— No tengo miedo.—Derek acaricio la cintura del de lunares.— Por siempre es un largo tiempo.—las narices de los dos se acariciaron.— Pero no me importaría pasarlo a tu lado.—los dos sonreían como nunca lo habían hecho antes.— Cuidadosamente nos prepararemos para nuestro destino.—el amor se notaba en ellos.— Viniste y tomaste este corazón..—"Te amo." se dijeron sin palabras.— Y lo liberaste.—porque con ellos las palabras no se necesitaban.— Cada palabra que escribes o cantas es tan...—Derek plantó otro beso en su mejilla.— cálida para mi.—al castaño le gusta eso.— Tan cálida para mi.—bueno, a él le gusta todo de Derek.— Estoy destrozado—el mayor seco una lágrima que bajaba.—, estoy destrozado.—Stiles acuno su mejilla en la muñeca de Derek.— Estar justo donde tú estás.—él lloraba, pero mantenía su sonrisa.— Ya no tengo miedo.—pero no era una sonrisa falsa, no.— No tengo miedo.—los dos entrelazaron sus dedos.— Por siempre es un largo tiempo.—la voz del castaño deleitaba los oídos del mayor.— Pero no me importaría pasarlo a tu lado.—Derek beso su cuello con delicadeza.— Dime que todos los días...—luego beso su clavícula.— Me despertaré al lado de esa sonrisa.—el hombre lobo sonrío contra su cuello."Lo harás" susurro.— No me importaría en absoluto.—Derek beso seguidamente los labios de su castaño, impidiendo poder cantar el verso.— Tú me conoces.—Stiles le sonrío tiernamente.— Pellizcame delicadamente.—el hombre lobo volvió a besar su clavícula.— Casi no puedo...—sus besos bajaron al su pecho.— respirar.—su voz salio suave, como le gustaba a Derek.— Para siempre es mucho—el mayor beso donde estaría su corazón.—, mucho tiempo.—cantó con suavidad.— Pero no me importaría pasarlo a tu lado.—Stiles acaricio el pelo de su amado.— Dime,  todos los días me despertare a lado de esa sonrisa.—tomo entre sus manos la cara de Derek y beso sus labios.— No me importa en absoluto.—cantó cuando se separaron.— No me importa en absoluto...—Derek lo tomo de la cintura y lo coloco en su pecho.

— Te amo, Stiles.—susurro contra sus labios.

— Yo también te amo, Derek.—susurro antes de chocar sus labios.

Fin del capítulo.

S.S.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora