Gotham Adventures

Parte 2: Tim

— De nuevo haciendo como si no me conociera...

Tim hizo lo mismo y caminó hacia la entrada, pasando de su hermano mayor, que lo había abandonado para irse con sus odiosos amigos. 

Era lógico, aunque Jason jurara que no se avergonzaba de él. El mayor era el capitán del equipo de lucha, del equipo de fútbol, del equipo de los más guapos, populares y fisicamente talentosos del Instituto. 

En cambio Tim era el capitán del equipo de los nerds que a nadie le importaban. Aunque, en realidad, su mejor amigo Conner si que era bastante popular, también jugaba al fútbol y era un mastodonte atractivo. Pero lo más importante, era hijo de la directora. Eso le daba un poco de visibilidad a Tim y no es que quisiera aprovecharse, pero necesitaba las relaciones públicas más que nada.

—Primer día, man.- Lo saludó su amigo. Ya tenía cara de aburrimiento total, y eso que sólo habían pasado cinco minutos desde que la campana había sonado.

— ¿Se enteraron ya? - La que hablaba era Cassie, rubia, hermosa, divertida y muy "informativa". — Sobre los nuevos con las becas.

— Claro que me enteré Cassie, ¿se te olvida con quién vivo? - La chica sonrió con un gesto tonto ante lo que dijo Conner. —Y Tim lo sabe también, ¿se te olvida quién es su mejor amigo?

—¿Hablan de mí? - Frente a ellos apareció de la nada el pelirrojo. Su nombre era Bart y también había sido amigo de ellos prácticamente desde que tenía uso de razón.

Los cuatro crecieron juntos, sus familias eran cercanas y habían estudiado en el mismo colegio casi desde el inicio. Timothy recordaba perféctamente el día en que llegó a la escuela primaria de Gotham, nervioso y atemorizado. Había comenzado a vivir con su padre adoptivo, Bruce Wayne y el cambio había sido abrumador. No sólo por el hecho de haber pasado de ser un chico "normal" a uno de los más adinerados de la ciudad, también estaba el hecho de que tenía que aprender a convivir con dos hermanos mayores completamente opuestos entre si y, por si fuera poco, la razón por la que se encontraba en esa nueva vida: sus padres habían muerto.

Habían pasado ya ocho años de ese suceso y Tim aún lo seguía recordando tan claramente que hacía parecer que toda la terapia había sido sólo una pérdida de dinero.

A pesar de eso, no se sentía triste. Había encontrado el mejor apoyo con sus amigos, se habían convertido en el mejor cuarteto desde el primer día, siempre juntos, creciendo de la mano. Los quería a todos pero Conner era el más cercano y al que más confianza le tenía. También tenía mucho apoyo de  su familia. Dick era el mejor hermano que cualquiera podría desear; atento y divertido, siempre con una sonrisa en el rostro, a pesar de que él también tenía su propio pasado doloroso. Su relación con su "padre" también era bastante buena, Bruce tenía muchas expectativas en él y Timothy no estaba dispuesto a fallarle. También había contado con el apoyo del mayordomo, Alfred, que era lo más cercano que tenía a una "madre". Damian, su hermano menor, era la piedra en el zapato de su vida pero, no eran tan malo, al menos ya no intentaba mandarlo al hospital.

Y luego estaba...

—Señor Wayne, ¿causando problemas desde el primer día? - Tim volteó como acto reflejo, pensando que quizás esa voz se dirigía a él. No se sorprendió cuando se dio cuenta que, a quien le hablaba la profesora de Ciencias Sociales, era a su hermano mayor.

— Todd, mi apellido es Todd... -no escuchó lo demás, apretó el paso al notar que Jason lo miraba de soslayo, y sus amigos prácticamente corrieron tras él, hasta llegar al aula de la primera clase.

☆

—¿Entonces tu hermano sigue rechazando el apellido? - La pregunta indiscreta llegó por parte de Bart y fue escuchada por toda la clase. Tim no respondió, se limitó a mirarlo con reproche después de que el profesor les llamara la atención.

Pero la única respuesta a aquello era "si". Su padre adoptivo, Bruce, no era un hombre de imposición. Les había dado la opción de conservar sus apellidos o tomar el suyo al ser presentados en sociedad como los herederos de las industrias Wayne. Dick y Tim decidieron cambiarlo pocos años después, para fines prácticos y legales eran "Wayne", aunque, para sus amigos más cercanos y en casa con la familia eran "Grayson y Drake".

El caso de Jason era diferente. Había rechazado de forma tajante el apellido de su padre adoptivo y no había forma de hacerlo cambiar de opinión.

—Ya es demasiado para mí tener que verte como mi hermano, no quiero que se convierta en algo oficial - Le había dicho el mayor, y de alguna forma, Tim estaba de acuerdo con eso.

Después de todo, ellos tenían un secreto.