Capitulo 7

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Miércoles en la noche (el día del colapso) 10:46 pm.

Las puertas automáticas se abrieron y los paramédicos corrieron al encuentro de las enfermeras y los doctores. El paramédico se aferro a la camilla y gritaba mientras anunciaba su paso.

-Tenemos un chico de 19 anos, blanco hombre, mostrando síntomas de shock séptico. La presión es de 80/50 y bajando. Frecuencia respiratoria de 8/60 y bajando. Temperatura de 36.1 bajando rápidamente. No tiene historial de epilepsia. El paciente sufrió un ataque de dos minutos y otro en el camino, de tres minutos y medio. Trauma menos al caer de  tres metro de distancia pero dado su inconciencia, no podemos decir si tiene algún daño en la columna. La caída no parece ser la causa de la gravedad de su situación. – dijo, y luego abrió con la punta de la camilla, la puerta de una sala. – Según los testigos, se desmayo y la caída fue una consecuencia.

-Presión arterial bajando – anuncio una de las enfermeras, mientras el pequeño aparato estaba empezando a sonar.- 30 por minuto…. 25…. 20

-¡El paciente va a sufrir de un ataque! – grito el doctor a su equipo. – Preparar vasopresor y desfibrador.

-15…. 10 – anuncio la enfermera.

El monitor cardiaco empezó a hacer un sonido alarmante y el medico alzo los brazos.

-Pongan 1 mg de epinefrina y la carga a 200 julios, por favor. –las enfermeras se apresuraron a hacerlo, el medico coloco las paletas en el pecho de el chico - ¡Ahora! – grito. Todos dieron un paso atrás y el doctor descargo la descarga eléctrica.

-El ritmo ha vuelto a 60 por minuto – anuncio la enfermera.

-Esta bien, vamos a dejar al paciente en la sala de recuperación. Quero las pruebas de sangre de inmediato para su análisis y un análisis bioquímico completo. Programe una resonancia magnética de urgencia cuando tengamos al paciente estable…

Sábado – cuatro días antes del colapso.

-¡Liam, te esta fallando el ritmo en el segundo verso! Recuerda que tu paso viene tres segundos después del de Harry. – grito Ron desde abajo de la plataforma.

Liam frunció el ceño y marco el ritmo con las manos en su pierna, tratando de levarlo bien. Ron se volteo a Louis.

-Y Louis, debes avanzar as rápido, estas quedando cuatro pasos atrás de los chicos.

Louis asintió, pero le hizo una mueca en el interior. La extraña sensación con la que se había despertado el miércoles se estaba convirtiendo en un dolor sordo y punzante – que empeoraba cada vez que caminaba o hacia un movimiento brusco.

Obviamente se habría tirado un musculo y esa seria la razón de no poder hacer los pasos, pero no había nada que pudiese hacer. Como se dice, el show debe continuar.

Todavía no se estaba sintiendo bien y el frio en el estadio no estaba ayudando.

Liam volteo y Louis pudo notar el estrés en la cara de su amigo.

-¿Estas bien? – pregunto Liam.

-Estoy bien – dijo Louis, encogiéndose de hombros. No tenía sentido aumentar la presión cuando ya era suficientemente estresante el aire. Además, no lo podrían ayudar a estas alturas.

Tiempo, descanso y un poco de hielo lo harían mejorar –y quizás algunas vitaminas y mas horas de sueno.

Solo que no tuvo el tiempo como para recuperarse y para el ensayo del lunes se encontraba en una completa agonía que apenas podía caminar de forma normal para evitar sospechas. El dolor punzante a su lado le estaba irritando aun más, por lo que se tomo un ibuprofeno y un paracetamol antes de salir al escenario – para por lo menos concentrarse más en cantar y no en caminar. El tenia calculado que si después de el concierto de el miércoles en el LG Arena le seguía molestando, se iría a checkear con un doctor. De esa manera, podría descansar el jueves y el viernes antes de los conciertos más chicos. Nadie se estresaría por eso. Lo único que tendría que hacer seria aguantar el dolor hasta el jueves por la mañana, y para lograrlo necesitaría más pastillas.

Por desgracia, eso no le ayudaba en el momento. Al momento en que la música empezó, el camino derecho sobre su marca. El dolor en su costado aumento, que palpitaba horrendamente y combinado con la extrema sensación de haber tomado un ibuprofeno y un paracetamol sin antes comer, se debió poner una mano en la boca expulsar lo poco y nada que había en su estomago.

Desafortunadamente para el, Rob lo había visto.

-¡Paren! – grito y la música se apagó. Los chicos se detuvieron a medidos de sus pasos por la sorpresa. Ron corrió hacia el escenario y dio un salto impresionante para saltar sobre el. - ¿Louis? ¿Estas bien? ¿Qué sucede?

La necesidad de vomitar se había pasado ya que estaba parado pero el dolor aun se hacia presente.  Podia ver a Harry y los chicos por el rabillo del ojo. Louis dejo salir una sonrisa valiente, con la esperanza de que los chicos no escucharan lo que iba a decir.

-Lo siento, no es nada en realidad. – se perdono – Esto bien. Sinceramente.

-No parece como si fuese nada – replico Ron – Estas pálido. Ven, siéntate.

Louis no tuvo otra opción que seguir a Ron hacia el borde del escenario. Ron le hizo una mueca para que se sentara en le borde.

-¿Qué pasa? – pregunto Harry mientras se acercaba.

~Habitacion 315~ (Larry Stylinson)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora