Ya habían pasado 2 años desde que Luka Megurine se graduó de la Universidad y de estudiar su carrera, empezó a trabajar en el hospital psiquiátrico Yamaguchi, un hospital bastante importante en Japón, por sus avanzados equipos médicos; Cuando el dueño del hospital vio lo dedicada y responsable que era Luka, la puso al cargo de una tarea, difícil como la tabla del ocho.
*****
Era Lunes, 1:56 p.m para ser exactos, La peli-rosa escribía unos diagnósticos de unos pacientes,
mientras conversaba con una niña que respondía al nombre de Miku Hatsune.
Miku Hatsune no era precisamente una doctora, realmente no era absolutamente nada
de aquel hospital, tan solo contaba 16 años de edad, simplemente era sobrina de Luka, que al estar
de vacaciones decidió visitar a su tía de vez en cuando en el hospital, ya que ella también quería dedicarse
la carrera de Luka como doctora, y al ver que Luka no se distraía de sus labores, su jefe se lo
permitió.
Miku y Luka intercambiaban palabras alegremente, hasta que oyeron el sonido de
la puerta de la sala de doctores en la que se encontraban, era nada más y nada menos que
All, el dueño del hospital y jefe del mismo.
-Buenas tardes Srta. Luka, Hatsune.-Les saludo All con su cara seria, como era
de costumbre.
-Buenas tardes señor ¿Qué se le ofrece?- Le saludo Luka tratando de ser cordial, Miku simplemente
no saludo, ya que ella le tenía algo de pavor a aquel hombre de gran altura.
-Escúchame Luka, necesito hablar contigo de un asunto muy importante, ¿Puedes acompañarme, por favor?
-Con gusto, señor; Miku, tú quédate aquí mientras voy a hablar con el señor All, no te muevas de aquí.
-Si, tía- le respondió algo seria la chica con pelo color Aqua.
Luka y All salieron de la sala de doctores y pararon en el pasillo, no muy lejos de ahí.
-Srta. Luka, al ver el gran empeño y responsabilidad que usted me ha demostrado estos dos últimos años
me he dado a la tarea de asignarle un trabajo un importante, ¿cree usted que lo pueda cumplir?
-Con mucho gusto, señor, dígame, ¿Cuál es su pedido?
-Escucha, seguro habrás escuchado del paciente 83, ¿verdad? Es algo peligroso ya que el sufre
de un fuerte transtorno psicológico que hace que el tienda a hacer cosas tal vez inhumanas
en cierto tiempo determinado.- Le dijo All con un tono de seriedad que llegó a incomodar
un poco a la pelirrosa.
-Y al ver lo bien posicionada que estas respecto a las tareas que te he asignado
en este hospital, estoy seguro que tú eres perfecta para esta tarea, ¿Podrás cumplirlo?-
Agregó el alto hombre a su orden.
-Si señor, claro que podré cumplir con eso, no se preocupe.-Acepto la pelirrosa aquella tarea
que le había dejado el dueño del lugar.
-Bien, menos mal, bueno Luka te dejo, tengo varios asuntos pendientes, confió en ti- Dijo finalmente el
hombre para después darse media vuelta e irse a su despacho.
Luka estaba extrañada, claro que sabía acerca del paciente 83, aquel paciente frío
y distante que estaba en la habitación más alejada, pero; ¿ese paciente no tenía un cuidador?
Aquel chico que iba casi todos los días a verlo...
"Seguro que se habrá ido por alguna razón..."
Pensó ella para sí tratando de buscar una respuesta lógica.
Entro a la sala de doctores e informó a su sobrina para llamar a su madre
y llevársela, para ella poder hacer tranquila su tarea.
-¿Tan temprano, tía? Yo quería quedarme más tiempo- se quejó la peliAqua con su
tía, quien ya estaba llamando a la madre de la chica.
-Lo siento mucho, Miku, esto es un asunto importante, además ¿No tienes tu tareas que hacer?-Le dijo
desafiante la doctora con cabellos rosas a la chica, que estaba notablemente disgustada.
-Es.... Muy injusto...-dijo quejándose la peliAqua.
-Bueno querida, la vida es injusta- dijo en un tono sarcástico la doctora.
Al cabo de 20 minutos, la madre de la mencionada chica llegó, se puso a charlar unos cuatro minutos con la pelirrosa para después irse con la chica peliAqua.
Luka entró otra vez a la sala de doctores, recogió varias cosas y se fue a la habitación 83, en donde se suponía, habitaba un demonio despiadado con sed de destrucción (quería ver el mundo arder, Ahre)
Con miedo, penetro en aquella habitación y vio a un
hombre con cabellos morados amarrados en una liga, todo desordenado.
Estaba con las manos encadenadas a la pared y parecía estar muerto.
"¿Es tan peligroso?"
Pensó ella para sí nuevamente; El demonio pelimorado levantó su cabeza para
ver quien había entrado en su guarida, vio a la doctora pelirrosa que, aunque no se
sintiese segura allí, sabía muy bien cómo esconder su miedo.
-....¿quién eres tú?....-dijo seriamente el peli morado.
Y pos hasta aquí lo dejo weo :v
Ahí te esperas pa ver el siguiente:D
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Psychøløgicäl// GakuLuka//
Fanfiction"Eso esta prohibido" Megurine Luka, una mujer de 20 años de edad, trabaja como doctora en un importante hospital psiquiátrico en Japón, El hospital Yamaguchi; su pan de cada día es cuidar a los pacientes del mismo lo mejor que pueda, también es la...
