Un nuevo comienzo (Nico di Angelo)✔️

13.- Vestidos de novia igual a desastre

Pov tu

Volví a mirar el reloj junto a mi cama, 8:30am, nunca me había tardado tanto en levantarme y ni si quiera porque me hubiera quedado dormida. Después de lo de anoche no había podido ni dormir bien. No deseaba levantarme, hoy sería el peor día de mi vida, anoche todo era perfecto y en menos de un segundo se echó a perder con la noticia de mi madre.

Se suponía que debía de estar lista en unos minutos, pero no tenía ni ganas de quitarme las sabanas, deseaba cerrar los ojos y que esto fuera un mal sueño.

Isabel: ¿No te has levantado ya? – dijo entrando a mi habitación

Tu: No tengo ganas

Isabel: Oye, a mí tampoco me emociona, pero si más nos apuramos dolerá menos  - dijo sobando mi brazo

Tu: No quiero Isabel, no quiero casarme con Alonzo – dije enterrando mi cara en la almohada

Isabel: Quisiera que hubiera otra forma pequeña, tal vez si yo no estuviera ya casada podría ayudarte.

Me consoló por unos minutos, pero mi madre comenzó a apurarnos así que como sea me cambie y salimos en busca de estúpidas tiendas para novia. Recorrimos como tres hasta que mi madre se decidió por una, busco un vestido pidiendo mi opinión, pero no decía más que si sin ánimo a lo que sea que estuviera viendo.

Tu madre: Pruébate este cariño, se te vera lindo

Suspiré y tomé el vestido

Tu madre: Sé que debes sentirte incomoda hija, sé que no te agrada esto, no creas que no lo noto – dijo sorprendiéndome – pero a veces debemos tomar decisiones que no nos gustan, yo sé que no es fácil siendo tan joven pero estoy segura que si lo intentas tú y Alonzo pueden llevarse mejor. Yo también quisiera que hubiera otra forma de hacer las cosas pero....ya sabes cuál es la realidad.Se fue sin darme tiempo a responder y entre en el probador. 

La realidad, si tan solo pudiera cambiarla a mi antojo.

Las vendedoras me ayudaron a cambiarme y cuando salí Isabel estaba al otro lado de la tienda junto con mi madre viendo más vestidos, caminé hacia el espejo más cercano e hice una mueca al verme, el vestido era lindo pero mi ánimo estaba por los suelos de solo saber para que lo usaría. Suspiré y voltee hacia el sillón que estaba al lado de la vitrina y mi respiración se detuvo, por un segundo odie la tienda y sus horribles ventanales con vista a la plaza. 

Nico di Angelo estaba frente a mí y su expresión era completamente de desconcierto y decepción, me sentía terrible de solo pensar en lo que pudiera estar creyendo de mí.

Reaccioné en cuanto lo vi voltear y seguir caminando, no me importó el hecho de que saldría con el vestido aun puesto, estaba desesperada, quería explicarle todo y no tenía tiempo. Cuando lo noté ya estaba fuera de la tienda e intente alcanzarlo

Tu: ¡Nico! – Grité – por favor, detente

Se detuvo casi cerca de cruzar la otra acera y volteo haciéndome estremecer por la fría mirada que tenía

Nico: ¿De verdad era tan difícil decírmelo? – Dijo molesto – pudiste ahorrarme....que idiota soy

Tu: No lo entiendes, yo no quería....no sentía que fuera el momento de decírtelo

Nico: ¿Cuando lo seria?, ¿el día en el que estuvieras por casarte? – Dijo con una sonrisa amarga – sabes que, olvídalo, olvida todo.

Volteó y siguió caminando a pesar de que intente llamarle, hubiera llorado ahí mismo de no ser porque mi madre se acercó corriendo sorprendida por verme fuera de la tienda, pero a mí ya no me importaba nada de eso. Quería correr y explicarle todo, pero antes debía deshacerme del vestido